Hosszu, la h¨²ngara de hierro
La nadadora h¨²ngara asombra al mundo de la nataci¨®n en una tarde de gloria con dos oros y un bronce de leyenda.

La nataci¨®n es un deporte que aprecia m¨¢s las heroicidades que los r¨¦cords, s¨®lo hace falta recordar los tiempos del poliuretano que parec¨ªan una realidad virtual ajena a la gente. Si la gran Mireia Belmonte se ahog¨® en la delirante utop¨ªa de nadar dos finales en 10 minutos y nadie la podr¨¢ quitar la gloria del intento, Katinka Hosszu (P¨¦cs, Hungr¨ªa, 25 a?os) hizo una gesta legendaria en el Vel¨®dromo de Berl¨ªn que quedar¨¢ grabada en el imaginario colectivo sin importar gustos ni nacionalidades. La nadadora h¨²ngara se ha convertido en la reina de la nataci¨®n en Europa. Lleva tres oros: 400m y 200m estilos, 100m espalda y un bronce en el 4x200m. Para el recuerdo quedar¨¢ su hora y veinte minutos de la tarde-noche del 21 de agosto. A las 18.18 horas arras¨® en el 200 estilos con un tiempo de 2m08s11, tres segundos menos que la medalla de plata Aimee Willmott. A las 18.58 horas se llev¨® otro metal de oro en el 100 espalda que compartir¨¢ con la danesa Nielsen. Y a las 19.38 horas despu¨¦s de recoger las medallas con el gorro puesto incluido, disput¨® el 4x200 e hizo una remontada espectacular, dej¨® el crono en 1m56s58 y el coraz¨®n de Hungr¨ªa en un pu?o. Una breve frase de Mireia cuando le preguntaron por la haza?a vale para resumir su grandeza: ¡°Hosszu es Hosszu¡±.
Esta h¨²ngara de brazos portentosos es una hiperactiva del agua y una enfermiza de las pesas, no descansa en todo el a?o y por eso es la nadadora que m¨¢s dinero gana en la Copa del Mundo (unos 250.000 euros por temporada). Katinka estudia psicolog¨ªa, quiz¨¢s para entender su lun¨¢tica pasi¨®n por la nataci¨®n, vive en Los ?ngeles y la entrena su marido, el americano Shane Tusup, que relataba lo bien que le vino fracasar en los Juegos de Londres: ¡°Me alegro de que no obtuviera medalla. Desde entonces es un animal competitivo. Habla, act¨²a y se entrena de la misma forma, pero ahora no conoce el miedo¡±.
Su marido y entrenador Tusup respond¨ªa as¨ª a las cr¨ªticas por el n¨²mero de carreras que disput¨® el a?o pasado Hosszu: ¡°Hay gente que se dedica a contar las carraras. Ella s¨®lo se dedica a nadar. Nosotros no contamos las del a?o pasado y tampoco tenemos intenci¨®n de contar las de este a?o¡±. A la valiente Hosszu, que se autodenomina Iron Lady (la Dama de Hierro) todav¨ªa le quedan las pruebas del 200 mariposa, 200 y 400 libre y 50 espalda en este Europeo. Nadar¨¢ en 11 pruebas. Pase lo que pase, en Berl¨ªn la Dama de Hierro ha dejado de ser una estrella chiflada y se ha convertido en una leyenda del deporte.
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