Los regalos de Nico

Si hay algo que Lewis Hamilton no necesita para ganar carreras y t¨ªtulos son regalos de sus rivales como los que Nico Rosberg le ha hecho ¨²ltimamente. El ¨²ltimo de estos caramelitos se lo ofreci¨® en bandeja este domingo en Austin. Corr¨ªa la vuelta 24 de la carrera y el alem¨¢n lideraba el pelot¨®n con un margen de menos de un segundo sobre el brit¨¢nico. A su paso por la largu¨ªsima recta de atr¨¢s, Hamilton se peg¨® tanto como pudo a su vecino, abri¨® el aler¨®n trasero de su Mercedes (DRS) y le tir¨® el coche apuntando al v¨¦rtice de la siguiente curva, a la izquierda, de donde ya sali¨® como l¨ªder. Y de all¨ª, hasta el final, hasta cruzar bajo la bandera de cuadros el primero en el que fue su quinto triunfo consecutivo. Una maniobra te¨®ricamente sencilla que esta vez tan bien lo fue a la pr¨¢ctica, gracias una vez m¨¢s a la indolencia de Rosberg, que no fue capaz de protegerse y cerrarle el hueco.

¡°Comet¨ª un error, me equivoqu¨¦ en la forma de buscar la potencia extra del ERS (el motor el¨¦ctrico). Pens¨¦ que lo hac¨ªa bien, pero luego me di cuenta de que no. De este modo, [¨¦l] pudo tirarse encima de m¨ª¡±, justific¨® Rosberg al bajarse del monoplaza.

En las ¨²ltimas cinco carreras, el brit¨¢nico ha sumado 53 puntos m¨¢s que el alem¨¢n

Con el de Austin, son ya demasiados los fallos que el chico de Wiesbaden ha concedido en esta segunda mitad de la temporada. Al margen del toque de Spa que dej¨® a Hamilton fuera de combate y que propici¨® un buen tir¨®n de orejas por parte de la c¨²pula de su escuder¨ªa, en Monza se comi¨® dos veces la variante de final de recta, y de este modo facilit¨® que su colega le terminara superando. Ya m¨¢s adelante, en Sochi, el germano clav¨® los frenos inexplicablemente en la primera curva, circunstancia que le oblig¨® a enfilar los garajes inmediatamente para cambiar de gomas y a reincorporarse a la pista a la cola de la caravana. Y si entonces termin¨® el segundo fue gracias a la tremenda superioridad del prototipo que maneja. En las ¨²ltimas cinco paradas del calendario, el de Tewin ha sumado 53 puntos m¨¢s que ¨¦l, una barbaridad si tenemos en cuenta que conducen el mismo b¨®lido.

Llegados a este punto, Rosberg deber¨¢ replantear su estrategia para quemar las ¨²ltimas naves que quedan en su intento de darle la vuelta al calcet¨ªn. Solo tiene dos balas: Brasil y Abu Dabi. ¡°La forma de encarar las cosas no variar¨¢. Comprometido al m¨¢ximo y en modo ataque, tratando de conseguir la ¡®pole¡¯ en Interlagos para despu¨¦s ganar. Eso es todo. A¨²n hay mucho puntos para repartirse y todo puede pasar¡±, zanja Rosberg, aparentemente tranquilo. Si ¨¦l lo est¨¢ todav¨ªa lo est¨¢ m¨¢s quien ocupa el otro lado del taller de las flechas de plata, a quien le basta con terminar por detr¨¢s de ¨¦l en los dos ¨²ltimos asaltos para coronarse bicampe¨®n.