Ortigoza: ¡°?Por supuesto que me gusta m¨¢s el Bar?a!¡±
El conductor del juego del San Lorenzo dice que quiere la camiseta de Pepe
¡°Yo siempre fui pobre¡±, dice N¨¦stor Ezequiel Ortigoza. ¡°El potrero te da cosas que no te da el profesionalismo. Te ense?a a vivir con la presi¨®n de no achicarte en ninguna cancha y jugar de la misma manera en todos lados. En el barrio donde viv¨ªa, en Merlo, hab¨ªa muchos campeonatos nocturnos. Empezaban a las nueve de la noche y acababan a las seis de la ma?ana. A medida que ibas avanzando ten¨ªas que esperar media hora para jugar otra vez. Si empatabas, defin¨ªas por penaltis. Ah¨ª gan¨¦ mis primeros pesos¡±.
Ortigoza dej¨® el potrero, y su equipo del barrio, el ¡®Central del 30¡¯, siendo un adolescente. Se lo impuso Caruso Lombardi, su t¨¦cnico en Argentinos Juniors, harto de verle llegar a los entrenamientos del club desgastado. Fue un ultim¨¢tum y el comienzo de una carrera exitosa. Este verano, a los 30 a?os, levant¨® la Copa Libertadores convertido en el l¨ªder m¨¢s querido del San Lorenzo. Pasado ma?ana le espera el Madrid en la final del Mundial de Clubes.
¡°Voy a llegar bien¡±, aclar¨® el centrocampista el mi¨¦rcoles, nada m¨¢s salir del vestuario del estadio de Marrakech. Hab¨ªa jugado cojo durante una hora y media contra el Auckland. Con el tend¨®n de Aquiles derecho inflamado y un dolor que le atravesaba el tobillo. ¡°Hemos acabado fusilados¡±, sentenci¨® Bruno Militano, el preparador f¨ªsico del San Lorenzo, resignado despu¨¦s de asistir a una semifinal con pr¨®rroga que a?ade dificultades al encuentro con los madridistas. En cuanto a Ortigoza, su pron¨®stico es tajante: ¡°El ¡®Gordo¡¯ no ha nacido con un cuerpo superdotado para el deporte. Pero no par¨® de correr porque tiene un gran coraz¨®n. ?El ¡®Gordo¡¯ no se pierde la final ni muerto!¡±.
A Ortigoza todos lo conocen como ¡®El Gordo¡¯. Su cuerpo, semejante a un cilindro macizo, destaca a simple vista. Cuando le sustituyeron, al final del partido, la hinchada apostada en la tribuna le dedic¨® un canto un¨¢nime y amoroso: ¡°?Gordo, ol¨¦, Gordo, ol¨¦, Gordo¡!¡±. ?l los salud¨® con las manos.
¡°Yo soy uno que juega de ¡®doble cinco¡¯, explica. ¡°Un poco m¨¢s adelantado que el mediocentro, creando juego. A veces jugu¨¦ de ¡®ocho¡¯, pero siempre en el medio. De chico jugaba de ¡®cinco¡¯ solo. Arranqu¨¦ a los nueve a?os en Argentinos Juniors. Debut¨¦ a los 17 y estuve ah¨ª hasta los 26¡±.
¡°No soy un seguidor del f¨²tbol europeo¡±, confiesa. ¡°Miro poco. M¨¢s que nada suelo mirar el f¨²tbol sudamericano. Me gusta mucho. Pero por ah¨ª cuando juega el Bar?a lo miro m¨¢s. Porque, ?por supuesto me gusta m¨¢s el Barcelona que cualquiera! El Barcelona tiene los mejores jugadores del mundo, lo gan¨® todo y siempre jug¨® mejor¡±.
Ortigoza ostenta el r¨¦cord argentino de penaltis ejecutados con ¨¦xito de forma sucesiva. Meti¨® 15. Su especialidad, un arte sutil bien aprendido en el barrio, le vali¨® a San Lorenzo un buen trozo de Copa Libertadores. ¡°Dicen que me cargu¨¦ el equipo en la espalda porque pateo los penaltis pero todos asumimos la responsabilidad de poner al club en lo m¨¢s alto¡±, explica. ¡°Era un club grande que nunca hab¨ªan ganado una Copa Libertadores. El grupo tuvo una buena circunstancia. Remamos todos para el mismo lado y eso hizo que levantemos la Copa. Ahora lo que vamos a enfrentar es algo muy lindo para el club y los jugadores en el aspecto personal. Sabemos que ser¨¢ muy dif¨ªcil. Pero no iremos a pasear. Iremos a hacer lo nuestro¡±.
¡°Al Madrid le tenemos que jugar concentrados, muy atentos, no dejarlos pensar, no dejarlos jugar, y meterle a cada pelota dividida. Que se sientan inc¨®modos. En todas sus l¨ªneas son unos fen¨®menos pero tenemos mucha fe en nosotros. No hemos venido a Marruecos a hacer de ¡®sparring¡¯ de nadie¡±.
Ortigoza es un duro. Pero tiene una debilidad que confiesa con la timidez de un cadete. ¡°Obviamente¡±, dice, ¡°uno siempre quiere tener una camiseta de esas. Yo si puedo le voy a pedir la camiseta a Pepe¡±.
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