Mar¨ªa Vasco: ¡°March¨¦ para comer, corro para disfrutar¡±

De la marcha a la carrera. De los 20 kil¨®metros contoneando la pelvis, siempre con un pie en el suelo, a los 42,195 kil¨®metros corriendo. De 27 a?os practicando la marcha y de una exitosa carrera deportiva, a la inmersi¨®n en otra de las m¨¢s exigentes disciplinas atl¨¦ticas, el marat¨®n. Mar¨ªa Vasco se ha fijado el reto eludiendo objetivos quim¨¦ricos. Y con un convencimiento: ¡°Si eres una buena marchadora, no puedes ser una buena corredora¡±.

Tras dar por concluida su trayectoria en la marcha, en noviembre de 2013, a la atleta barcelonesa, medalla de bronce ol¨ªmpico en Sidney 2000 y en el Mundial de Osaka 2007 en los 20 kil¨®metros marcha, se aficion¨® a correr. Hoy se apostar¨¢ en la salida de la Avenida Reina Maria Cristina con la intenci¨®n de llegar alrededor de tres horas despu¨¦s al mismo punto tras recorrer 42,195 kil¨®metros por Barcelona.

Busco la eficiencia. No levanto mucho los pies. No es un estilo bonito. Corro muy bajito¡± Mar¨ªa Vasco

Al gusanillo habitual de quienes afrontan semejante reto se a?aden dos cuestiones que acrecientan sus nervios: se ha erigido en uno de los iconos del Zurich Marat¨®n de Barcelona y una lesi¨®n en los isquios ha perturbado su preparaci¨®n en las ¨²ltimas semanas. Reconsider¨® su objetivo inicial y se ha concedido diez minutos m¨¢s para cumplirlo, hasta las tres horas. ¡°No pretendo ni ganarme una beca ni ganar ning¨²n campeonato¡±, expone. ¡°Nervios voy a tener, eso est¨¢ clar¨ªsimo. Estamos hablando de una distancia que ni controlo ni s¨¦ c¨®mo es. Pero es diferente a cuando me jugaba mi beca. March¨¦ para comer. Ahora, corro para disfrutar. Los nervios ser¨¢n por la curiosidad, la incertidumbre de qu¨¦ va a pasar¡±.

Desde que dej¨® la marcha y se fij¨® el objetivo de completar los 42,195 kil¨®metros, se ha curtido en varias carreras de medio marat¨®n. La m¨¢s larga, de 30 kil¨®metros, distancia alternativa que se disput¨® en el Marat¨®n de Tarragona, y en la que se impuso con un tiempo de 2 horas y 4 minutos.

El cambio de especialidad lo nota, sobre todo, en la t¨¦cnica y en la adaptaci¨®n de su f¨ªsico a la carrera. ¡°Me defiendo. Busco la eficiencia. No levanto mucho los pies ni las rodillas para no sufrir mucho con el impacto sobre el asfalto. Afortunadamente no peso mucho. No es un estilo bonito, pero no me voy a poner a trabajar la t¨¦cnica a mi edad (cumpli¨® 39 a?os en diciembre). Corro muy bajito. Algunos me dicen que no se sabe bien si corro o si marcho¡±, dice divertida. La distancia es lo que le crea mayor incertidumbre. ¡°Todo el mundo me habla del famoso muro del marat¨®n. Tengo un gran respeto por esa barrera de los 30 kil¨®metros¡±, admite. ¡°Cada carrera y cada persona es diferente. Ese muro siempre puede estar ah¨ª, depender¨¢ del ritmo de la carrera y de c¨®mo me encuentre¡±.

Mar¨ªa sabe que compartir¨¢ esfuerzos con el numeroso grupo de m¨¢s de mil atletas, de los 19.200 inscritos, cuyo objetivo es concluir la prueba alrededor de las tres horas. Sin embargo, los focos se centran en ella. ¡°Eso no me crea presi¨®n. Me encanta que exista ese inter¨¦s, aun sabiendo que tengo mis limitaciones, que no voy a destacar en esto. Me siento una privilegiada, pero no quiero hacer sombra a nadie y mucho menos al mont¨®n de atletas espa?olas que quedar¨¢n muy por delante de m¨ª¡±. La mejor marca de las atletas inscritas es la de la keniana Frashiah Nyambura con dos horas y 32 minutos, mientras que en hombres son las de los keniatas Lawrence Kimayo y Abraham Too, con dos horas y siete minutos.

Todo el mundo me habla del famoso muro del marat¨®n. Tengo un gran respeto por esa barrera¡±

¡°S¨¦ que voy a sufrir mucho¡±, reconoce. ¡°Pero siempre voy al l¨ªmite, me dejo la piel. No s¨¦ hacer las cosas a medias. Y quiero recompensar la apuesta de los organizadores por m¨ª¡±. Mar¨ªa es entrenadora personal de pruebas de fondo en la cadena de gimnasios y centros de salud Home Place y dirige a un grupo de ni?as, de 7 a 13 a?os, que practican la marcha en el Club de Atletismo Gav¨¤. ¡°No quiero entrenar a profesionales, me motiva m¨¢s dirigir a las que empiezan de cero¡±, afirma. Esas ocupaciones le han impedido prepararse para el marat¨®n como hubiera querido. Se resiste a verbalizar su ilusi¨®n por competir en otro marat¨®n, el de Nueva York, por ejemplo. ¡°De momento, me centro en terminar este; despu¨¦s en recuperarme para poder prepararme para otro, si fuera el caso, m¨¢s a fondo. Pero ahora, necesitar¨¦ descansar¡±. Eso ser¨¢ despu¨¦s de correr por media Barcelona, con un lema en mente, el que consigna en su p¨¢gina web: ¡°?Por qu¨¦ caminar si puedes volar¡±.