Sevilla, la ciudad m¨¢gica para La Roja
Gordillo, Luis Enrique y Zubizarreta recuerdan dos noches ¨¦picas de Espa?a en la capital de Andaluc¨ªa: del 12-1 a Malta rumbo a la Eurocopa de 1984 al 1-0 a Dinamarca antes del Mundial de EEUU
¡°La cosa estaba chunga despu¨¦s del Mundial 82 con la selecci¨®n. Lleg¨® el pelotazo del 12 a 1 a Malta y Miguel Mu?oz, que conoc¨ªa Sevilla porque hab¨ªa entrenado aqu¨ª, decidi¨® que jug¨¢ramos todos los partidos oficiales en mi ciudad. Para m¨ª era algo b¨¢rbaro¡±, recuerda Rafael Gordillo, 75 veces internacional, con tres Eurocopas y dos Mundiales a sus espaldas. El jugador del Betis y el Madrid simboliza a la perfecci¨®n el amor que surgi¨® entre Sevilla y la selecci¨®n nacional, que se convirti¨® en sede fija del equipo espa?ol desde ese Espa?a-Malta del 21 de diciembre de 1983 hasta el siete de junio de 1995, en un Espa?a-Armenia de clasificaci¨®n para la Eurocopa 96 de Inglaterra. Durante ese periplo, Espa?a encarril¨® en Sevilla dos clasificaciones para las fases finales de la Eurocopa (Francia 84 y Alemania 88) y tres Mundiales (M¨¦xico 86, Italia 90 y Estados Unidos). Es m¨¢s, el Benito Villamar¨ªn, campo del Betis, fue escenario de la clasificaci¨®n para la Eurocopa de Francia 84 en el Espa?a-Malta (12-1) y el Mundial de M¨¦xico 86 (2-1 ante Islandia).
El Ram¨®n S¨¢nchez Pizju¨¢n, por su parte, vivi¨® el dram¨¢tico partido ante Dinamarca del 17 de noviembre de 1993, cuando Espa?a sac¨® el billete para Estados Unidos 94 con un gol de Hierro que derrotaba a los daneses. Bakero ayud¨® lo suyo haciendo falta al meta Schmeichel. Espa?a jug¨® aquel partido con uno menos desde el minuto 10 por la expulsi¨®n de Zubizarreta. ¡°Me quer¨ªa morir despu¨¦s de la tarjeta roja¡±, reconoce el propio Zubizarreta, que vio en el palco el partido, desconsolado, pues sent¨ªa que le hab¨ªa fallado a sus compa?eros en un momento donde ten¨ªa problemas para conservar la titularidad en el Barcelona. ¡°Sin desmerecer a otras ciudades, es cierto que la afici¨®n de Sevilla es especial. Es verdad eso de que te lleva en volandas¡±, admite el ex portero del Athletic, Barcelona y Valencia. Zubizarreta (126 partidos como internacional), adem¨¢s, estuvo en el banquillo en el m¨ªtico Espa?a-Malta.
¡°Nunca he jugado un partido como ese Espa?a-Dinamarca¡±, recuerda Luis Enrique (62 veces internacional). ¡°La afici¨®n de Sevilla nos empuj¨® hacia un triunfo que ten¨ªamos muy complicado. No era solo c¨®mo viv¨ªan el d¨ªa del partido. Era una afici¨®n que se volcaba desde que lleg¨¢bamos a Sevilla¡±, aclara el actual entrenador del Barcelona.
La m¨ªstica se mantiene en el tiempo. ¡°Es uno de los campos donde m¨¢s sientes la presi¨®n de la afici¨®n cuando vienes a jugar, as¨ª que jugar de local en Sevilla es un placer porque se trata de una afici¨®n que se entrega¡±, apunta Iniesta, titular ante Ucrania. ¡°Mi recuerdo son 20.000 ni?os con la cara pintada cuando iba a ver Espa?a", a?ade Sergio Ramos, sevillano de la localidad de Camas, en las afueras de la capital.
¡°Ocurri¨® que la afici¨®n de Sevilla se meti¨® en el papel para animar a la selecci¨®n, como si fuera la hinchada de un equipo. Lo tomaron como algo suyo y siempre gan¨¢bamos. No recuerdo perder en Sevilla¡±, aclara Gordillo. Los datos le dan la raz¨®n. Espa?a ha jugado en Sevilla un total de 42 partidos, de los que gan¨® 36, empat¨® cinco y solo cay¨® derrotada en tres ocasiones. En el Ram¨®n S¨¢nchez Pizju¨¢n, sede del encuentro ante Ucrania, Espa?a ha jugado en 24 ocasiones y jam¨¢s conoci¨® la derrota. De hecho, la ¨²nica derrota en encuentro oficial de Espa?a en Sevilla se produjo el 12 de octubre de 1991, cuando Francia derrot¨® a Espa?a (1-2) en la fase de clasificaci¨®n para la Eurocopa de Suecia 92.
Fue Javier Clemente el seleccionador que decidi¨® que Sevilla dejara de ser sede fija de la selecci¨®n en 1995. ¡°La afici¨®n fue siempre fant¨¢stica. No nos marchamos por falta de apoyo¡±, afirm¨® el propio Clemente. El motivo estuvo en unos terrenos de juego inadecuados para el f¨²tbol de alta competici¨®n. En el Benito Villamar¨ªn, por ejemplo, se llegaron a colocar mu?ecos en las gradas de Gol porque ¨¦stas no estaban acomodadas para que el p¨²blico estuviera sentado. Incluso se lleg¨® a colorear de verde en el terreno de juego ante la ausencia de c¨¦sped.
Gracias a que Sevilla fue sede de la selecci¨®n, Gordillo pudo celebrar triunfos de manera especial en su ciudad. Como la noche del Espa?a-Malta. ¡°Despu¨¦s del partido me llev¨¦ a los vascos a tomar una copa, luego los dej¨¦ en el hotel, en Oromana, donde nos concentr¨¢bamos, porque se iban para su tierra. Yo no ten¨ªa ganas de irme a casa y me fui al Mercasevilla (Mercado Central de Sevilla), donde trabajaba un pescaero amigo m¨ªo. Me tom¨¦ la pen¨²ltima con el Peroles, que era un t¨ªo muy b¨¦tico¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.