Guardiola y Thiago, de la mano
El regreso del centrocampista auxilia al t¨¦cnico en su momento m¨¢s cr¨ªtico en el Bayern
Thiago Alc¨¢ntara regres¨® para escribir su historia futbol¨ªstica el pasado 4 de abril, poco m¨¢s de un a?o despu¨¦s de que su rodilla derecha crujiese en un partido contra el Hoffenheim, tras sufrir tres operaciones y ejercer como involuntario detonante del enfrentamiento, devenido en divorcio, entre el cuerpo t¨¦cnico y el m¨¦dico del Bayern de M¨²nich. ¡°Es un reinicio¡±, atin¨® a catalogar pleno de emoci¨®n tras jugar veinte minutos de vuelta en el campo del Borussia Dortmund. Fue como si nada hubiese pasado, salt¨® al campo, alz¨® la frente y no dej¨® de pedir la pelota al pie con la jerarqu¨ªa de los valientes. ¡°Es un absoluto genio¡±, concluy¨® Karl-Heinz Rummenigge, presidente del Bayern y dos veces mejor futbolista de Europa.
¡°Es muy importante para nosotros¡±, le alab¨® su entrenador tras eliminar al Oporto
Han pasado dos semanas y la genialidad de Thiago se ha convertido en decisoria. Marc¨® el gol que dio vida a su equipo en la ida de la eliminatoria contra el Oporto y anot¨® el que inici¨® la remontada en la vuelta. El carrusel de prodigios conlleva tambi¨¦n otro de emociones. Tras aquellos minutos en Dortmund dej¨® el campo entre l¨¢grimas emocionadas y al llegar a la zona del banquillo se fundi¨® en un duradero abrazo con Manel Estiarte. Este mi¨¦rcoles esa expresi¨®n p¨²blica fue con Pep Guardiola. Aclamado por la hinchada, felicitado por los compa?eros, Thiago se fundi¨® con tanta energ¨ªa al entrenador que incluso lo alz¨® al cielo b¨¢varo. ¡°Con futbolistas as¨ª y dirigiendo grandes equipos es f¨¢cil¡±, zanj¨® el t¨¦cnico cuando le hicieron ver tras el partido que en su sexta participaci¨®n como entrenador de la Liga de Campeones ha conseguido llegar seis veces a semifinales.
El retorno del medio espa?ol ahoga un tanto el conflicto por la marcha del m¨¦dico
Guardiola quiere trazar un perfil bajo, pero su trayectoria le eleva tanto como lo hizo Thiago. Todos sus movimientos se escrutan. La UEFA le ha abierto un expediente sancionador por comparecer en la rueda de prensa oficial del lunes pasado con una camiseta en la que se pod¨ªa leer el hashtag #JusticiaParaTopo, en referencia a la campa?a que reclama que se esclarezcan las circunstancias de la muerte del periodista Jorge Topo L¨®pez durante el pasado Mundial. En junio se cumplen ocho a?os del inicio de su carrera como entrenador. En su primera campa?a ascendi¨® al filial del Barcelona a Segunda B. Y a partir de ah¨ª, excepto la temporada de su voluntario retiro en Nueva York, la Liga de Campeones le retrata en el ¨¦xito. Gan¨® la competici¨®n dos veces con el Barcelona (2009 y 2011) y en tres oportunidades se qued¨® en la pen¨²ltima instancia eliminado. Pero a Guardiola le mueve ahora la revancha de la ¨²ltima Liga de Campeones, un 0-4 contra el Real Madrid en el partido de vuelta que, seg¨²n recogi¨® Mart¨ª Perarnau en su libro Herr Pep, la huella del primer a?o del t¨¦cnico en Munich, Pep considera su ¡°peor cagada¡± desde que dirige un equipo.
Una trayectoria triunfal
Guardiola finaliz¨® su carrera como jugador profesional en 2006 (hab¨ªa debutado en 1990), con 35 a?os. Ese mismo a?o se sac¨® el t¨ªtulo de entrenador de f¨²tbol. En junio de 2007 toma las riendas del Barcelona B, con el que consigue el ascenso a Segunda B. D¨ªas despu¨¦s es presentado como entrenador del primer equipo, en sustituci¨®n de Rijkaard.
Hombre de la casa (empez¨® de recogepelotas), marc¨® una ¨¦poca de ¨¦xitos en el club catal¨¢n en sus cuatro temporadas, entre la 2008/09 y la 2011/12: dos Champions League, tres Ligas, dos Copas del Rey, tres Supercopas de Espa?a, dos de Europa y dos Copas Mundiales de Clubes son su saldo.
La llegada de Lleg¨® al Bayern se confirm¨® en enero de 2013. Firm¨® por tres a?os y 17 millones de euros al a?o, (pasando a ser el mejor pagado del mundo). Ha ganado una Bundesliga, una copa, un Mundial de Clubes y una Supercopa de Europa.
Como t¨¦cnico se ha clasificado para seis semifinales de Champions de seis intentos, cuatro con el Bar?a (gan¨® dos) y dos con el Bayern (perdi¨® en 2014 con el Real Madrid).
Potencial lastrado
Hijo de brasile?os (su padre es Mazinho, campe¨®n mundial con la Canarinhaen 1994), Thiago Alc¨¢ntara naci¨® en Italia, pero se cri¨® y se form¨® futbol¨ªsticamente en Espa?a ¡ªa partir de los 14 a?os, en La Masia¡ª. Desde su debut azulgrana en 2009, gan¨® con el Bar?a una Champions, cuatro Ligas, una Copa, dos Supercopas de Espa?a y una de Europa.
Se sum¨® al nuevo proyecto de Pep Guardiola en el Bayern en la temporada 2013/2014. Aunque en esa primera temporada de hizo con el doblete Bundesliga-Copa, la lesi¨®n en su rodilla derecha, que durar¨ªa un a?o y una semana, solo le permiti¨® jugar 11 y dos partidos en cada torneo. En la Champions, de la que su equipo fue apeado por el Madrid en semifinales, solo jug¨® tres. Marc¨® dos goles en Liga.
Tampoco este ejercicio ha podido demostrar demasiado: dos partidos de Champions (con dos goles, eso s¨ª) y cuatro en Liga es todo lo que el internacional espa?ol ha podido disputar.
Thiago ya se hab¨ªa perdido aquel doble duelo contra los blancos y se qued¨® fuera de un Mundial en el que ten¨ªa reservado un papel estelar para Vicente del Bosque. ¡°O ¨¦l o nadie¡±, hab¨ªa dicho Guardiola sobre el hijo de Mazinho cuando se plante¨® su llegada. Pese a los 25 millones de euros gastados, era una apuesta de poco riesgo, futbolista dominante en dos campeonatos de Europa sub-21, donde no solo venci¨®, sino que fue nombrado como mejor futbolista del torneo. Nacido en Italia, se cri¨® en Galicia, creci¨® en Barcelona, sus padres son brasile?os, defiende la camiseta de la selecci¨®n espa?ola y ahora vive en Alemania, donde lleg¨® frustrado por la ausencia de oportunidades en un Bar?a plagado de talento y de mitos. Tiene el descaro de los que saben y no duda en tomar el mando en un equipo que no solo concede gran importancia a la her¨¢ldica sino que alinea a bastantes campeones del mundo. ¡°Es muy importante para nosotros¡±, apunt¨® Guardiola la tarde de su regreso en Dortmund. Ante el Oporto y con su batuta el Bayern obvi¨® sus notables ausencias (Robben, Ribery, Alaba, Schweinsteiger o Benatia) y aparc¨® el cisma generado tras la renuncia del m¨¦dico Hans Wilhelm M¨¹ller-Wohlfahrt, presentada al sentirse se?alado tras la debacle de Portugal.
El cisma entre el todopoderoso Mull y Guardiola comenz¨® por la desaz¨®n de ¨¦ste al percibir al poco de llegar a Munich que ning¨²n m¨¦dico presenciaba los entrenamientos del equipo, estaba con ellos en fases tan vitales como la pretemporada y que los jugadores lesionados ten¨ªan que acudir al centro de la ciudad a la consulta del galeno. La ascendencia de ¨¦ste sobre la jerarqu¨ªa del club es may¨²scula: todos los exjugadores que ahora rigen la entidad pasaron por su camilla desde que en 1970 comenz¨® a trabajar para el Bayern. El episodio con Thiago, que decidi¨® con el consentimiento de Guardiola pasar por el quir¨®fano en Barcelona, acab¨® de fracturar la relaci¨®n entre entrenador y doctor. La revista germana Kicker apunt¨® esta semana que M¨¹ller-Wohlfahrt se habr¨ªa negado a tratarlo seg¨²n las pautas que tra¨ªa de Espa?a. El sonoro 6-1 al Oporto ahoga otros ruidos, pero Thiago apenas da ahora sus primeros pasos tras el reinicio y el recorrido no se ha completado para Guardiola, que lleg¨® a un Bayern campe¨®n de Europa y del Mundo. ¡°S¨¦ lo que se espera de m¨ª en este club¡±, apostill¨® el martes tras el partido contra los portugueses. Guardiola, a la postre, es v¨ªctima de su ¨¦xito: cada vez que se aleja del triunfo se aparta tambi¨¦n de la expectativa que despierta.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.