Cosas que pasan

Ocurri¨® tras el 2-1 del Madrid en Tur¨ªn ante la Juve, cuando un futbolista lanz¨® uno de esos mensajes, de apariencia vacua, que acaba yendo a misa. As¨ª explic¨® Marcelo c¨®mo se gest¨® el segundo gol italiano: "Yo tiro, hay un rechace y nos pillan. Cosas que pasan". Desde el a?orado "f¨²tbol es f¨²tbol" de Vujadin Boskov nadie hab¨ªa dado un argumento m¨¢s demoledor para explicar este juego. "Cosas que pasan". Dispar¨® Marcelo a la salida de un c¨®rner favorable al Madrid y el bal¨®n acab¨® en el ¨¢rea contraria, donde Caravajal atropell¨® a T¨¦vez. Cientos de tertulias, debates, coloquios, cr¨®nicas, an¨¢lisis y dem¨¢s intentaron razonar el porqu¨¦ de la derrota. La catarata de errores de Ramos en el centro del campo, la invisibilidad de Bale, Varane convertido en un defensa de primera comuni¨®n. Incluso hubo quien culp¨® al desodorante de Ancelotti (palabra). Fue el inicio de cuatro d¨ªas que han dejado al Madrid en el alambre en Europa y estrellado en la Liga por culpa de ese 2-2 ante el Valencia del s¨¢bado, en el que el azar jug¨® un papel fundamental, con tres postes, la lesi¨®n de Kroos o el penalti fallado. Pero hay cosas que trascienden al azar. La actuaci¨®n colosal de un portero colosal, Alves, o el empe?o de Cristiano en lanzar su falta n¨²mero 56 en el ¨²limo a?o, a una por semana, de las que ha sacado el modesto r¨¦dito de un gol. Al menos Bale las estrella en la escuadra.

Otro que llora es Guardiola tras la dur¨ªsima derrota de su Bayern en el Camp Nou, su cuna, su casa y, seg¨²n especulan algunos medios alemanes, quiz¨¢ su cementerio, dependiendo de si los responsables del club, con Rummenige al frente, consideran que a un club tan inmenso le compensa no ganar m¨¢s que la Bundesliga, eso s¨ª, all¨¢ por Navidad. Tres partidos de semifinales ha disputado Guardiola con el Bayern frente a equipos espa?oles, dos contra el Madrid el pasado a?o y el del Bar?a del mi¨¦rcoles. 8-0 va perdiendo en tan particular marcador. Ante el equipo de Ancelotti (5-0 en el global) la culpa no la tuvieron los futbolistas sino los atletas (Bale, Cristiano y compa?¨ªa). Ante el de Luis Enrique, podr¨ªa tenerla la plaga de lesiones o podr¨ªa tenerla Boateng, el primer buz¨®n de correos que se cae ante un amago de regate. Pero no ser¨ªa justo. El Bayern logr¨® aguantar firme y entero (y con la posesi¨®n a su favor, por supuesto) 77 minutos. Pero en ese minuto, ?ay!, alguien le entreg¨® la pelota a Messi. Cosas que pasan.

287 partidos disputados, 231 victorias. Supone el 80,5% de ¨¦xitos, solo superado por dos instituciones como Pedro Ferr¨¢ndiz (85,7%) y Lolo Sainz (81,1%). Con ¨¦l, el Madrid ha disputado 11 de 14 finales posibles, las ocho ¨²ltimas de forma consecutiva. Ha ganado, en menos de cuatro temporadas, una Liga, tres Copas y tres Supercopas. El pr¨®ximo fin de semana, Pablo Laso se enfrenta a su tercera Final Four. Podr¨ªa ser que tampoco esta vez llegara la Novena. Resucitar¨¢n entonces las voces que obviar¨¢n que este se?or ha construido el mejor Madrid desde Sabonis y pedir¨¢n el fichaje de Obradovic, Maljkovic, Ivanovic, cualquiera cuyo apellido acabe en ovic, con fama de estratega y de saber leer los partidos, que debe ser tan complicado como leer el acto sexual. Nadie se atrever¨¢, se supone, a apuntar el nombre de Messina, aquel entrenador que hace cinco a?os dirigi¨® al Madrid y se empe?¨® en jubilar a Felipe Reyes, el mismo jugador que acaba de ser elegido en el mejor quinteto de la Euroliga y firme candidato al MVP de la Liga ACB. Se dice en EE UU que Messina podr¨ªa convertirse en el primer t¨¦cnico europeo en dirigir a un equipo de la NBA, San Antonio Spurs, sustituyendo a Gregg Popovich, lo que sin duda llenar¨¢ de satisfacci¨®n a los suyos y al baloncesto europeo en pleno, Felipe Reyes incluido.