Cinco claves para lo que queda de Giro

Escaladores espa?oles

Si echaran un pulso de escaladores Contador y Landa en estos momentos ser¨ªa complicado apostar por uno u otro, tal es el nivel mostrado por el ciclista alav¨¦s. Si se tomara como referencia los tiempos de ascensi¨®n al Mortirolo, como si se tratara de una cronoescalada, se comprobar¨ªa que Contador, que tard¨® 45m 7s en ascender los 11,850 kil¨®metros con un desnivel de 1.289 metros y una pendiente media del 10,9% con un 18% de pendiente m¨¢xima, aventaj¨® 49s a Kruijswijk, en 53s a Landa y en 2m 43s a Aru. Sin embargo, esos tiempos no tienen en cuenta que Contador inici¨® su cronoescalada pr¨¢cticamente 10 kil¨®metros antes ni que Landa estuvo bastante tiempo frenado por Aru, a cuyo ritmo ascendi¨® los primeros kil¨®metros. Si se midiera el duelo por la arrancada final de Landa para ganar en Aprica a la que intent¨® responder Contador, habr¨ªa que matizar tambi¨¦n que el l¨ªder del Giro, en un reflejo de madurez, prefiri¨® guardar fuerzas para el final del Giro antes que picarse con el corredor del Astana por la victoria de etapa.

Equipos (1)

Terminada la etapa del Mortirolo, Alberto Contador respond¨ªa a las cr¨ªticas a la aparente debilidad de su equipo, el Tinkoff, poni¨¦ndole una nota de 10 a cada uno de sus compa?eros y recordando el trabajo oculto, el que no se ve por televisi¨®n, que llevan haciendo desde el primer d¨ªa, cuando asumieron la responsabilidad de la carrera. El trabajo no oculto, permiti¨® constatar que al pie del Mortirolo lleg¨® Contador con un solo compa?ero (Roman Kreuziger, quien mantuvo el tipo contra el viento todo el falso llano) mientras el Katusha, el equipo que aceler¨® cuando el pinchazo del l¨ªder, y el Astana contaban con media docena de vistosos corredores. Tambi¨¦n, mir¨¢ndolo de otra manera, hizo resaltar la inteligencia madura de Contador, quien supo aprovechar diferentes apoyos en lo m¨¢s duro de la subida al Mortirolo y la gran ayuda del holand¨¦s Kruijswijk en la parte m¨¢s complicada, con Landa a rueda.

Equipos (2)

¡°Tengo un equipo tan bueno que no son los corredores a los que asusta la responsabilidad, sino a m¨ª. Tengo miedo de no estar a su altura¡±, reconoce Giuseppe Martinelli, el director del Astana, el equipo del segundo y del tercero, Mikel Landa y Fabio Aru, que ha mantenido la tensi¨®n constante en todas las etapas con corredores de magn¨ªfico nivel, como Tiralongo, Cataldo, Rosa, Luis Le¨®n o Kangert. ¡°Con Nibali, en el Tour, solo quiero a gregarios verdaderos, aunque Fuglsang quiz¨¢s disfrute de mayor libertad. Pero con Aru, en el Giro, he querido traer un equipo de j¨®venes, salvo el capit¨¢n Tiralongo, que puedan demostrar su valor¡±. ¡°Normalmente son los corredores los que hacen dura o f¨¢cil una carrera pero en este Giro se han conjugado el recorrido, muy complicado todos los d¨ªas, y la voluntad de mi equipo. Se me ha criticado por ello, pero no han entendido nada. Yo s¨¦, por que le conozco, que si Contador dice que va a ganar una carrera y est¨¢ preparado para ello, es imposible derrotarle¡±, reconoce Martinelli. ¡°Por eso, mi t¨¢ctica, que ha podido favorecerle, no iba contra ¨¦l, sino para hacerles m¨¢s dif¨ªcil la existencia a los rivales que nos pod¨ªan disputar los puestos de honor. As¨ª hemos eliminado a Ur¨¢n, a Porte, a cualquiera que nos pod¨ªa hacer sombra¡±. A ello podr¨ªa haber a?adido Martinelli que ha sido la fortuna, en forma de ca¨ªdas, pinchazos o aver¨ªas, el elemento que m¨¢s ha influido en el desarrollo de varias etapas, incluida la reina.

Compa?eros

Aunque solo les separan 50s en la general, tanto Aru como Landa han afirmado que se ha producido un cambio de jerarqu¨ªa en el equipo. Landa es ahora el l¨ªder y no tanto porque se haya proclamado, sino porque est¨¢ m¨¢s fuerte que Aru. Ello no obsta para que, inteligentemente, el ciclista de Murgia se mostrara diplom¨¢tico cuando le preguntaron si ahora Aru trabajar¨ªa para ¨¦l. ¡°Trabajaremos los dos juntos para darle guerra a Contador¡±, respondi¨® Landa. ¡°Sobre todo en las etapas del viernes y el s¨¢bado¡±. Al Giro, en efecto, le quedan dos etapones de monta?a y una etapa emboscada. Despu¨¦s de la etapa llana del jueves con final en Lugano (Suiza), el jueves, antes de llegar a Verbania, al borde del Lago Mayor en un descenso sin respiro, hay que superar el Monte Ologno (10 kil¨®metros al 9%); el viernes se llega a Cervinia, en el Valle de Aosta, una etapa con tres primeras interminables, el san Bartolom¨¦, el San Pantale¨®n y el que da nombre a la meta, con una media de 17 kil¨®metros de longitud cada uno; y el s¨¢bado es el d¨ªa de Le Finestre y Sestriere,

El efecto Amador

Cuarto, a 56s de Aru, acecha Andrey Amador, de 28 a?os, el sorprendente costarricense al que ni el Mortirolo ha sido capaz de desanimar. El ciclista del Movistar, uno de los fieles de Nairo Quintana, es grande y pesado, aunque ha bajado peso el ¨²ltimo a?o, y posee un motor de gran cilindrada, pero nunca, aparentemente, hab¨ªa disputado una clasificaci¨®n general. En realidad s¨ª que disput¨® una general, la del Tour de 2011, y la gan¨®. El primer d¨ªa de aquel Tour sufri¨® un esguince de tobillo y nadie daba un duro de que pudiera aguantar m¨¢s de dos etapas. Contra todo pron¨®stico, todos los d¨ªas tomaba la salida. Luci¨® el farolillo rojo hasta el pen¨²ltimo d¨ªa, en el que tuvo el valor de escaparse y lograr terminar pen¨²ltimo su primer Tour. Es su mayor victoria hasta el momento, junto a una etapa en el Giro de 2012, en el Monte Cervinia justamente.