Nadal, con lanza y escudo
Frente a Almagro , el n¨²mero siete firm¨® un duelo " completo" en el que logr¨® equilibrar la ofensiva y el contragolpe ¡ñ "Me he entrontrado r¨¢pido y he recuperado bolas dif¨ªciles"
¡°Perdona, yo no tengo il tuo talento¡±. Por primera vez en mucho tiempo, al menos de puertas afuera, a Rafael Nadal se le escaparon ayer un par de carcajadas. Contenidas, fugaces, cierto es, pero risas al fin y al cabo. En los tiempos dif¨ªciles, a las duras, cualquier poco significa mucho, as¨ª que bienvenida sea esa doble hilera de dientes que mostr¨® el n¨²mero siete del mundo para cerrar una conversaci¨®n guasona con un periodista italiano. Antes, el espa?ol hab¨ªa batido a Nicol¨¢s Almagro (6-4, 6-3 y 6-1 en dos horas y 19 minutos de partido) para avanzar a la tercera ronda de Roland Garros y citarse el pr¨®ximo s¨¢bado con el ruso Andrey Kuznetsov (6-1, 5-7, 7-6 y 7-5 a al austriaco J¨¹rgen Melzer).
Ayer, Nadal s¨ª se pareci¨® al de los buenos d¨ªas; no al de los mejores, pero s¨ª al de aquellos en los que derrotarle parec¨ªa casi una quimera. Por eso, Almagro termin¨® desesperado, farfullando para s¨ª mismo. Lo intent¨® por todos los medios el murciano; por tierra, mar y aire, pero no hubo manera. Enfrente se encontr¨® con rival que guerre¨® como un antiguo caballero medieval, como si portase una lanza y un escudo. Porque ayer, en el marco de un d¨ªa gris y desangelado en el distrito de Boulogne, viento por un lado y por otro, Nadal despleg¨® todo el abanico: buenas derechas, golpes cruzados y un rev¨¦s mucho m¨¢s equilibrado que el de otras jornadas menos fruct¨ªferas.
Cuando tuvo que pegar, Nadal lo hizo (31 winners), y cuando tuvo que repeler las intentonas de Almagro (33), se puso la armadura y apret¨® los dientes para reducir (seis de siete en puntos de ruptura salvados) a su adversario. ¡°Me he movido mejor que el primer d¨ªa, creo que he hecho un partido bastante completo. Me he encontrado r¨¢pido y he recuperado muchas bolas dif¨ªciles, que es algo que me da mucha confianza. La din¨¢mica es positiva y hay que mirar las cosas de forma global, de forma honesta y autocr¨ªtica cuando toca, pero sin ser m¨¢s pesimista de la cuenta¡±, valor¨® despu¨¦s el de Manacor.
Me he encontrado r¨¢pido y he recuperado bolas dif¨ªciles. Eso me da mucha confianza"
"Siendo claros, en la temporada de tierra no he estado como otros a?os, pero he jugado mal en dos partidos: contra Fognini, en Barcelona, y contra Murray en la final de Madrid", prosigui¨®; "lo dem¨¢s no lo he jugado mal y eso es muy bueno. Como dije el otro d¨ªa, ni mi carrera se acaba aqu¨ª ni mi a?o tampoco, as¨ª que ninguna obsesi¨®n m¨¢s de la cuenta con este torneo. Debo intentar hacer las cosas lo mejor que s¨¦ y despu¨¦s veremos hasta d¨®nde puedo llegar".
Progres¨® Nadal y tampoco fallaron los otros favoritos que actuaron ayer, caso de Andy Murray (6-2, 4-6, 6-4 y 6-1) y Novak Djokovic. Eso s¨ª, el serbio, n¨²mero uno, dio un buen susto al futbolista Zlatan Ibrahimovic, invitado a su palco, al tener que ser atendido de un problema en la ingle derecha en su duelo contra Gilles M¨¹ller (6-1, 6-4 y 6-4). Poca cosa. Risas al final entre ¨¦l y el delantero sueco. Como antes Nadal, sonriente. ?Qu¨¦ mejor se?al?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.