Un Brasil de medio pelo pasa por encima de Venezuela

Este Brasil que pas¨® por encima de Venezuela en la segunda fecha por las eliminatorias al mundial de Rusia debe ser la peor canarinha en muchos a?os. Apenas descuella William, imparable para la precaria defensa de la Vinotinto, y algunos destellos de Douglas Costa. Los dem¨¢s son obreros calcados a imagen y semejanza de su seleccionador, ese mediocentro grit¨®n y raspacanillas que fue Dunga, o jugadores casi a punto de retiro como Kaka o Ricardo de Oliveira. M¨¢s que en crisis, que lo est¨¢, el f¨²tbol de Brasil est¨¢ en deuda con sus gloriosos antepasados. Ahora es un equipo rampl¨®n, que gusta del juego vertical y rudimentario y con eso les ha bastado para llevarse los tres puntos que se disputaron en el estadio Castel?o de Fortaleza.

Ha sido en cualquier caso una victoria justa y que pudo ser m¨¢s amplia de no ser por los yerros frente al arco de Baroja o los cierres de los defensas. Venezuela parece el equipo que hace 20 a?os deambulaba por los escenarios de Sudam¨¦rica dando l¨¢stima. Sin Juan Arango, su mejor jugador, recientemente retirado, con un t¨¦cnico, Noel Sanvicente, que no logra transmitir su idea a los jugadores, el equipo parece la reuni¨®n de once voluntariosos sin ideas. Antes llevaba alg¨²n peligro mediante jugadas de bal¨®n parado porque las cobraba Arango con su exquisita pierna zurda. Hoy ni siquiera puede abandonarse a esa posibilidad porque los sustitutos no tienen el mismo talento.

Venezuela intent¨® encontrar en Jeffren Su¨¢rez al futbolista que ten¨ªan con Arango

Para esta primera fecha de eliminatorias Venezuela intent¨® encontrar en Jeffren Su¨¢rez, el ex jugador del Barcelona nacido en Ciudad Bol¨ªvar, en el suroriente del pa¨ªs, al futbolista distinto que ten¨ªan con Arango. Pero despu¨¦s de su aceptable presentaci¨®n en el debut contra Paraguay Jeffren se lesion¨®. Su sustituto fue Alejandro Guerra y carg¨® con la cruz del primer gol. A los 30 segundos del primer tiempo el mediocampista, que juega en el Atl¨¦tico Nacional de Medell¨ªn, intent¨® maniobrar en el c¨ªrculo central presionado por Luis Gustavo y perdi¨® el bal¨®n, que cay¨® en los pies de William. El volante del Chelsea se march¨® de Amorebieta ¡ªla sombra del rudo pero buen central que tuvo el Athletic hasta hace algunas temporadas¡ª y le dobl¨® las manos al arquero con un derechazo alto. Cualquier plan de Sanvicente qued¨® hecho trizas antes del primer minuto de partido.

Venezuela lo intent¨® por las bandas, pero el equipo no es capaz de generar jugadas de real peligro. Entre los jugadores venezolanos el futbol asociado es una quimera, los volantes no atacan el espacio para ofrecerse y parecen superados por el fren¨¦tico ritmo que imponen los rivales. Este Brasil marca Dunga retrocedi¨® y se limit¨® a esperar. Cuando se cans¨® de la inoperancia del mediocampo vinotinto, cuando se agot¨® de cuerpear a Salom¨®n Rond¨®n y a Cristian Santos, dos espectros vinotinto, decidi¨® tomar de nuevo el control y llevar real peligro con la anticipaci¨®n de El¨ªas, de gran partido, y los cambios de velocidad de Douglas Costa y William. Y as¨ª lleg¨® el segundo gol. Filipe Luis super¨® a Vargas y Ricardo Oliveira, con un gran presente en el f¨²tbol de su pa¨ªs a sus 35 a?os, dej¨® pasar la pelota para la llegada de William. El derechazo del peque?o mediocampista del Chelsea super¨® al portero Baroja. Brasil ganaba 2-0 con justicia.

Noel Sanvicente, que no parece encontrar respuestas para levantar al equipo, orden¨® dos cambios apenas iniciado el segundo tiempo, pero ni Arqu¨ªmedes Figuera ni John Murillo contribuyeron a darle salida al equipo. Sin embargo, el empuje de la Vinotinto y el retroceso de Brasil provocaron tres tiros de esquina. Los dos primeros, cabeceados por el goleador de la Eredivise de Holanda, Cristian Santos, terminaron en las manos de Allison, pero con el tercero acortaron las distancias. Venezuela tuvo un momento de lucidez con la pelota parada y record¨® cuando era comandada por el profesor C¨¦sar Far¨ªas. En una jugada preparada Vizcarrondo cabece¨® en el primer palo y Santos solo tuvo que empujarla.

Venezuela lo intent¨® por las bandas, pero el equipo no es capaz de generar jugadas de real peligro

A partir de all¨ª pareci¨® que la Vinotinto pod¨ªa proponer algo m¨¢s, pero de nuevo aparecieron los errores de principiantes. El irreconocible Amorebieta, con todo a favor para despejar un centro desde la izquierda, dej¨® pasar la pelota. Oliveira no desaprovech¨® el regal¨® y marc¨® el 3-1 definitivo. Son los tres primeros puntos del pentacampe¨®n mundial despu¨¦s de la derrota como visitante ante Chile. En la pr¨®xima fecha visitar¨¢n a Argentina y recibir¨¢n a Per¨². A Venezuela, mientras tanto, le toca subir hasta La Paz, la capital de Bolivia, para enfrentar al local en el duelo de los peores equipos de la zona. Despu¨¦s jugar¨¢ en Puerto Ordaz contra Ecuador que ha mostrado un gran nivel en la primera doble jornada. El camino para ambos seleccionados est¨¢ lleno de pe?ascos.