Triunfo ¨¦pico del Baskonia frente al Olympiacos
Bourousis, con una espectacular actuaci¨®n, lidera al equipo alav¨¦s con un recital de trabajo y eficacia
Primero fue un triple muy mal lanzado por Spanoulis (noticia), despu¨¦s fue un pelotazo largu¨ªsimo de James que dio en el aro y se fue a la red, pero le sobr¨® un instante, una minid¨¦cima de segundo para ser legal. Y el ¨¢rbitro lo advirti¨® en la pantalla del ordenador. Ten¨ªa raz¨®n: antes de que la pelota saliera de la mano de James, el cron¨®metro marcaba, 00,00. O sea, la bocina fue anterior al lanzamiento. Fueron dos instantes que llevaron el partido a la pr¨®rroga, un partido tremendo, de una intensidad f¨ªsica descomunal que acab¨® llev¨¢ndoselo el Laboral Kutxa porque hab¨ªa apostado m¨¢s, porque fue mejor equipo y porque mantuvo una dosis de regularidad a la altura del acontecimiento. Y porque el griego, el luminoso griego, no fue esta vez Spanoulis, con sus fintas, su sabidur¨ªa, su templanza y sus cada vez menores reservas f¨ªsicas, sino Bourousis, el armario, el grandull¨®n, con su poblada barba y sus brazos largos y sus piernas largas, disfrutando como un ni?o jugando al baloncesto en un recreo. Lo suyo es la pelea, el braceo, el contacto, la pantalla, y as¨ª empez¨®, a lo suyo, taponando cuanto llegaba por sus dos costados, pero se anim¨®, y se anim¨®, y asumi¨® responsabilidades cuando sus compa?eros le dejaron jug¨¢rsela al triple como ¨²ltimo recurso. Y Bourousis no fall¨®. Lo suyo no es prodigarse en el h¨¢bil ejercicio de anotar desde lejos, pero lo suyo no es rehuir la responsabilidad cuando alguien lo tiene que hacer. Lo hizo en los momentos clave, dos consecutivos cuando agonizaba el segundo cuarto, Le dejaron solo al grandull¨®n y el grandull¨®n les devolvi¨® el ninguneo con dos triples magn¨ªficos.
Pero ni a¨²n as¨ª se resolv¨ªa el partido que hab¨ªa dejado un 21-18 en el primer cuarto y se hab¨ªa ido al descanso con un 48-39 que tampoco aclaraba el panorama. El Olympiacos rotaba y rotaba, pero el papel estelar que acostumbra a lucir Spanoulis ahora le corresponde a Lojeski, un americano de Winsconsin nacionalizado belga que tiene a bien transformar casi todo lo que cae en sus manos. Con la ayuda irregular de Printezis y Mantzaris, Lojeski mantuvo el pulso vital del Olympiacos. 28 puntos le adornaron en sus estad¨ªsticas, a pesar de la defensa rigurosa del Laboral Kutxa, una defensa que nadie rehuy¨® y que le fue dando vida a pesar de lo ajustado del marcador. El tercer cuarto dej¨® un r¨¦dito de seis puntos (69-63) para los baskonistas y no fue hasta avanzado el ¨²ltimo cuarto cuando el equipo griego se puso por vez primera por delante en el marcador (71-72). Ah¨ª tuvo el Baskonia un momento de duda, aderezado por las err¨®neas decisiones de su base Adams, con triples inadecuados. Pero de nuevo apareci¨® Bourousis para poner orden.
Laboral K., 96 - Olympiacos, 89
Laboral Kutxa (21+27+19+11+16): Adams (8), Causeur (9), Hanga (17), Tillie (4), Planinic (4)-cinco inicial-, James (13), Corbacho (3), Bourousis (28), Blazic (3), Kangour (5), Diop (2).
Olympiacos (18+21+20+17+9): Mantzaris (13), Spanoulis (11), Strawberry (7), Printezis (11), Young (5)-cinco inicial-, Hunter (7), Lojeski (28), Agravanis, Papapetrou, Milutinov (2), Hackett (5), Athinaiou.
Arbitros: Ryzhyk (UKR), Sahin (ITA), Vojinovic (SRB). Se?alaron t¨¦cnica a Blazic (m. 13). Eliminado Blazic.
Incidencias: Segunda jornada de la fase regular de la Euroliga disputada en el Buesa Arena de Vitoria ante 10.826 espectadores, seg¨²n el club.
Y llegaron los triples, el fallado por Spanoulis y el extempor¨¢neo de James. Y la pr¨®rroga, y otra vez Bourousis con su poder¨ªo en el rebote, con su presencia monumental hasta zanjar la contienda del lado de quien m¨¢s insistentemente busc¨® la victoria, quien m¨¢s la sud¨®, quien m¨¢s la sufri¨® y quien m¨¢s la disfrut¨® (96-89).
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