Los descensos administrativos liberar¨¢n a los futbolistas
La reforma en el Convenio Colectivo limita las horas m¨¢ximas de concentraci¨®n y restringe la exclusi¨®n de un jugador de los entrenamientos
Entre la pompa y el boato de las grandes cifras, entre los focos que alumbran a las estrellas, entre los contratos millonarios, en el f¨²tbol existe una clase media?silente que lucha por sus derechos. No obvian su condici¨®n de trabajadores, para muchos privilegiados, y refuerzan, en la medida de lo posible, el Convenio Colectivo suscrito entre la Liga y la Asociaci¨®n de Futbolistas Espa?oles (AFE) en octubre de 2014. Fruto de esta negociaci¨®n, los jugadores han dado un paso decisivo si su equipo desciende por motivos administrativos, como le ocurri¨® al Elche la temporada pasada. Podr¨¢n rescindir el contrato y exigir la indemnizaci¨®n correspondiente por el impago de sus salarios.
"Queremos que los jugadores no se vean de repente jugando en una divisi¨®n diferente a la que deber¨ªan estar por los resultados deportivos. No puede ser que, a falta de un d¨ªa para que comience la competici¨®n, no tengan su situaci¨®n resuelta", explican desde la AFE.
Esta modificaci¨®n del Convenio, que era una de las batallas del presidente de la AFE, Luis Rubiales, afecta a m¨¢s ¨¢mbitos. Las inquinas personales de los entrenadores tendr¨¢n que quedarse fuera de los terrenos de juego o, en este caso, lejos de los entrenamientos. Ni man¨ªas ni cuitas personales, como en su d¨ªa tuvo Marcelo Bielsa con Fernando Llorente en el Athletic. El delantero lleg¨® a asegurar que el entrenador le "vaciaba mentalmente". Lo que ocurre en el campo, se queda en el campo o, mejor dicho, en la caseta. "Los entrenamientos ser¨¢n colectivos y no se podr¨¢ apartar a nadie salvo que est¨¦ recuper¨¢ndose de una lesi¨®n, enfermedad u otra causa justificada", expone el art¨ªculo 8.
Las negociaciones entre la Liga y la AFE se desarrollaron en un ambiente de cordialidad. El siguiente reto al que se enfrentar¨¢n es la firma de un nuevo convenio ¡ªel actual finaliza el 30 de junio de 2016¡ª. Seg¨²n diferentes fuentes, el texto ya est¨¢ escrito y solo falta que se publique en el Bolet¨ªn Oficial del Estado. Tendr¨¢ modificaciones sustanciales para los derechos de los futbolistas y estar¨¢ vigente hasta 2020.
La conciliaci¨®n laboral y familiar preocupa tambi¨¦n al mundo del f¨²tbol. Entrenos, partidos, viajes... Los preparadores no van a tener tanta manga ancha para reclutar a sus pupilos. Los pueden tener a raya y hacer pi?a siempre que quieran, pero con unos peque?os l¨ªmites. Tal y como estipula esta reforma, las concentraciones no exceder¨¢n el d¨ªa y medio cuando se juegue en casa y tres cuando sea en campo ajeno. Un alivio para quienes crean que est¨¢n demasiado tiempo fuera de casa.
Pero no todo iban a ser ventajas para los futbolistas. Siempre han contado con privilegios, y m¨¢s cuando provienen de su propio club. No ten¨ªan el m¨¢s m¨ªnimo problema para obtener entradas o copar los mejores asientos del estadio, independientemente del partido. A partir de ahora, tendr¨¢n que ir con m¨¢s cuidado; y no es descabellado que alg¨²n jugador termine siendo amigo de un reventa. Seg¨²n el Convenio, si el aforo est¨¢ completo, el partido tendr¨¢n que verlo por la televisi¨®n; aunque no todo est¨¢ perdido. "Con independencia de lo anterior, el club pondr¨¢ a disposici¨®n de los futbolistas un m¨ªnimo de 20 asientos", determina el texto.
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