Juega el Bayer, canta el BayArena
El Leverkusen, que dirime su futuro europeo, aguarda al aliento de su afici¨®n para ¡°el desaf¨ªo m¨¢ximo¡± ante el Barcelona
Por las calles de Colonia y Leverkusen, ciudades que est¨¢n de la mano geogr¨¢ficamente, se respira cordialidad y amabilidad. No hay un bocinazo ni un grito de m¨¢s y hasta en el tren de camino al BayArena, el mismo que cruza la ciudad deportiva del club de la Aspirina por Chempark ¨Cdonde est¨¢n todas las f¨¢bricas de Bayer-, piden a la gente que guarde silencio cuando habla demasiado alto por el m¨®vil. ¡°El alem¨¢n es serio hasta que entra en el estadio¡±, cuentan sonrientes desde las oficinas del Bayer. ¡°Con el apoyo de nuestra afici¨®n, todo es posible¡±, reflexiona el t¨¦cnico Roger Schmidt. Tienen ante s¨ª la complicada tarea de vencer al Barcelona para seguir en la Champions ¨Csiempre y cuando la Roma no supere al BATE Borisov- o de igualar (empate o derrota) el resultado del equipo bielorruso para continuar en la Liga Europa.
Para el Bar?a es un duelo menor, ya clasificado como primero de grupo. De ah¨ª que Luis Enrique haya convocado a cuatro canteranos (Samper, Gumbau, C¨¢mara y Kaptoum) y dejado en casa a Piqu¨¦ e Iniesta, que descansaron en el ¨²ltimo encuentro de Copa. Figura en la expedici¨®n, sin embargo, un tridente que apunta a titular porque definen la presi¨®n en campo contrario y porque con media ocasi¨®n resuelven los entuertos. ¡°A Messi no se le puede parar del todo, pero es que el Bar?a tambi¨¦n gan¨® al Madrid sin que apenas jugara¡±, reconoce Schmidt; ¡°no s¨¦ equipo saldr¨¢, pero cuando encuentran la fluidez en su juego no hay quien los pare¡±. Del mismo modo se expresa el director general Rudi V?ller, que ve ¡°pr¨¢cticamente imposible¡± ganar. Pero todos cuentan con el aliento de la afici¨®n.
Es un poco diferente al Camp Nou. Conozco al p¨²blico y esperemos que nos acoja bien", dice Ter Stegen del estadio?
Aunque compiten con entidades cercanas como el Colonia, Schalke y Dusseldorf, y no es un club con ra¨ªces populares porque naci¨® de la petici¨®n de los trabajadores de la planta qu¨ªmica de Bayer en 1904, los 25.000 aficionados que llenan cada fin de semana el estadio se desga?itan en los encuentros. ¡°Es la cultura alemana. Se viene a cantar, a disfrutar¡±, explican desde las oficinas del club. ¡°Y, aunque quiz¨¢ no est¨¢n tan ¡®locos¡¯como los del Schalke, Frankfurt o Dortmund, la mayor¨ªa nos apoya siempre con sus c¨¢nticos y m¨¢s en los partidos grandes. Tambi¨¦n les gusta el buen f¨²tbol, por lo que son un poco exigentes¡±, a?aden desde el ¨¢rea deportiva. Bien lo sabe Ter Stegen, que ha disputado varios encuentros en el BayArena cuando defend¨ªa al Borussia M?nchengladbach. ¡°Es un poco diferente al Camp Nou. Conozco al p¨²blico y esperemos que nos acoja bien. Siempre es interesante volver a descubrir una afici¨®n diferente a la nuestra¡±, resolvi¨®.
Sea como sea, el Bayer necesita un buen resultado. ¡°Se habla de milagro, pero en la ida casi damos la sorpresa en un duelo que pudimos ganar. Tenemos que seguir creyendo en nuestras fuerzas¡±, apunta Schmidt. Por una vez, les vale el sarc¨¢stico apelativo de Vicekusen, dado que nunca ganaron nada por los cinco subcampeonatos ligueros, dos coperos y uno m¨¢s en la Champions y en la UEFA. Toca partido y toca animar. Canten, se juega.
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