La Espa?a pragm¨¢tica vence a Suecia
Sostenido por las paradas de P¨¦rez de Vargas, el equipo de Cadenas doblega al cuadro n¨®rdico (24-22) y afronta la segunda fase en una posici¨®n de privilegio para acceder a las semifinales
A tenor de lo visto en estos tres primeros partidos, Espa?a cerr¨® la fase regular de este Europeo de Polonia con el mejor de los botines: como primera de grupo, con dos triunfos ¡ªcontra Alemania (32-29) y este ¨²ltimo, ante Suecia (24-22)¡ª, un empate que supo a gloria ¡ªen los ¨²ltimos instantes, frente a Eslovenia¡ª y cuatro puntos de oro en el casillero. Es decir, si los renglones no se tuercen, los hombres de Manolo Cadenas afrontan la segunda fase del torneo desde una posici¨®n de privilegio para sellar su pasaporte a las semifinales.
ESPA?A, 24 - SUECIA, 22
Espa?a: Sterbik (p), P¨¦rez de Vargas (p), Ca?ellas (1), Aginagalde (4), Entrerr¨ªos (1), Maqueda (3), Tom¨¢s (1), Ugalde, Viran, Rivera (9), Garc¨ªa (3), Mindegia (1), Del Arco, Baena, Gurbindo, Guardiola y Dujshebaev (1).
Suecia: Andersson (p), Appelgreen (p); Kallman, Karlsson, Eckberg (3), L.Nilsson (2), Konradsson (1), Jakobsson (4), Petersen, Cederholm (1), Ostlund (4), Zachrisson (2), Olsson, A.Nilsson (2) y Nielsen (3).
Parcial cada cinco minutos: 1-2, 3-3, 4-4, 7-6, 9-7, 12-10 -descanso-, 14-12, 15-14, 17-15, 21-17, 23-18, 24-22.
?rbitros: Slave Nikolov (MAC) y Gjorgji Nachevski (MAC). Excluyeron dos minutos a Antonio Garc¨ªa y Gede¨®n Guardiola por parte de Espa?a. Y a Olsson, Petersen, Ostlund y Nielsen en Suecia.
8.000 espectadores en el Centennial Hall de Breslavia.
En la siguiente escala, los Hispanos se enfrentar¨¢n a Dinamarca, Rusia y Hungr¨ªa. El primer duelo, contra el cuadro del exquisito Mikkel Hansen, supondr¨¢ una buena piedra de toque para calibrar el estado real del equipo en unos par¨¢metros competitivos superiores. La primera fase deja peque?as sombras, las estrecheces para doblegar a los alemanes y los suecos, dos huesos hist¨®ricos, pero igualmente transmite la sensaci¨®n de que esta Espa?a sabe desenvolverse en aguas revueltas.
Como ya ocurriera en los dos primeros compromisos, ofreci¨® su versi¨®n m¨¢s pragm¨¢tica. Al no carburar del todo lo bien que se desear¨ªa el engranaje, tir¨® del libreto m¨¢s pragm¨¢tico y oficioso, que en campeonatos tan exigentes como este resulta una variable muy a tener en cuenta para escapar de situaciones comprometidas. Sin embargo, la correa de transmisi¨®n no est¨¢ del todo fina y la revisi¨®n descubre dos inquietudes.
La primera, que est¨¢ costando en exceso conectar con el hombre-boya, Julen Aginagalde, figura esencial en el devenir del equipo; y la segunda, que la corriente llega de forma discontinua hasta los extremos. Ante la Suecia de Stefan Olsson, devaluada en los ¨²ltimos a?os y con la baja de ¨²ltima hora del c¨¦lebre Jonas Kallman, pero siempre pujante, los de Cadenas apenas castigaron desde los costados y tan solo firmaron dos goles al contragolpe, especialidad de la casa. Sin velocidad ni carreras, el escenario se complica.
Frente a otro entramado muy rudo, fueron determinantes el pilotaje de Ra¨²l Entrerr¨ªos, el acierto de Valero Rivera desde los siete metros (7/8) y, sobre todo, las manos de Gonzalo P¨¦rez de Vargas, un ¨¢ngel bajo los palos. El joven guardameta del Barcelona firm¨® 15 paradas a 37 lanzamientos, un espl¨¦ndido 41%. Con Arpad Sterbik reservado, debido a una contractura, el portero fue el sost¨¦n principal de Espa?a, de esta Espa?a pragm¨¢tica que debe activar el turbo de aqu¨ª en adelante.
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