Obradoiro roza el bombazo

Hubo un momento tras la efervescencia de la puesta en acci¨®n en el que pareci¨® que el Obradoiro se ven¨ªa abajo, en el que se jugaba al ritmo de la charanga del Baskonia; un momento en el que el Obradoiro hab¨ªa tirado nueve triples sin embocar, en el que su oponente circulaba 14 puntos por delante en el marcador y el aficionado m¨¢s observador pod¨ªa ver en el fondo del banquillo baskonista a Alberto Corbacho. S¨ª, uno de los mitos del equipo gallego, indiscutido integrante de su quinteto hist¨®rico, la estrella que dej¨® el equipo al final de la pasada temporada, era el ¨²ltimo hombre del rival al que trataba de apartar de las semifinales de la Copa del Rey, de la Copadoiro, como rezaba la promoci¨®n del club en su apuesta por traer la competici¨®n a Galicia.

Pero al Obradoiro hay que conocerlo. Hay mucho orgullo detr¨¢s de un equipo que esper¨® 20 a?os para que la justicia le devolviera el puesto que le correspond¨ªa entre los grandes. Muchos de los chicos que visten su camiseta ni hab¨ªan nacido cuando se forj¨® aquel car¨¢cter ind¨®mito, pero est¨¢ en el ADN del club porque de ello se encarga el entrenador que ahora lo dirige, que antes que t¨¦cnico fue aficionado del equipo. Se revolvi¨® el Obradoiro porque tuvo fe y al d¨¦cimo triple intentado despu¨¦s de nueve errores entr¨® la pelota en la cesta y al siguiente empe?o volvi¨® a hacerlo. Y la adrenalina devolvi¨® al equipo al partido en un esfuerzo coral.

El Baskonia mostr¨®, en todos los sentidos, su m¨²sculo. Se vali¨® para empezar del acierto del franc¨¦s Causeur, pero sobre todo de la dureza de sus hombres altos, con bastantes m¨¢s kilos que los del Obradoiro. Pero el d¨¦bil encontr¨® las cosquillas precisas para competir. Le dio buenos minutos el joven Santi Yusta y le alivi¨® desde Alec Brown, un 2,16 con rango de tiro desde m¨¢s all¨¢ de la l¨ªnea de tres. Waczynski, al que se esperaba pero no acab¨® de llegar, marr¨® el tiro que hubiera valido el empate a 35 al poco de regresar del receso, pero para entonces el Obradoiro ya hab¨ªa tomado la autopista y hab¨ªa llegado a A Coru?a. Comenz¨® a anotar con facilidad y Bendzius desat¨® la fiesta con un triple que puso por delante (49-47) al equipo gallego por primera vez desde sus dos anotaciones iniciales. La charanga se escuchaba menos. De Causeur hab¨ªa dejado de haber noticias

El Obradoiro se desat¨® con 30 puntos en el tercer cuarto. Ya hab¨ªa reducido la sangr¨ªa de balones perdidos, apenas dos en diez minutos, el porcentaje de aciertos en triples ya igualaba al del Baskonia. El partido se aboc¨® a un final incierto. Con dos tiros libres para empatar a falta de tres segundos, Waczynski fall¨® el que tir¨® a meter y meti¨® el que tir¨® a fallar. A continuaci¨®n Causeur hizo exactamente lo contrario. Y as¨ª, de una manera casi grotesca, dobl¨® la rodilla el decimoquinto de la liga, con un r¨¦cord reciente de una victoria y doce derrotas, ante el l¨ªder del mejor grupo de la Euroliga. Es la Copa del Rey.