El ¡®soccer¡¯ femenino en pie de guerra

Cinco jugadoras de la selecci¨®n femenina de f¨²tbol de Estados Unidos (EE?UU) han presentado este mi¨¦rcoles una querella en la que acusan a la Federaci¨®n de F¨²tbol de EE UU de discriminaci¨®n salarial. En la queja, llevada a cabo por cinco estrellas del equipo (las dos capitanas, Carly Lloyd y Becky Sauerbrunn, la delantera Alex Morgan, la centrocampista Megan Rapinoe, y la guardameta Hope Solo), las jugadoras explican que, aunque el equipo femenino es el motor econ¨®mico de la federaci¨®n, ellas reciben una remuneraci¨®n bastante inferior a la de los miembros del equipo masculino.

"Hemos sido bastante pacientes a lo largo de los a?os, creyendo que la federaci¨®n har¨ªa lo correcto y nos remunerar¨ªa debidamente", coment¨® en un comunicado Lloyd, elegida mejor jugadora del Mundial del a?o pasado. La guardameta, Hope Solo, compar¨® directamente los resultados entre el equipo femenino y masculino: "Somos las mejores del mundo, habiendo ganado tres Mundiales y cuatro torneos ol¨ªmpicos, y los jugadores del equipo masculino nacional ganan m¨¢s que nosotras".

Las jugadoras que han presentado la demanda ante la Comisi¨®n de Igualdad de Oportunidades Laborales (EEOC por sus siglas en ingl¨¦s) han solicitado que se abra una investigaci¨®n a la federaci¨®n sobre dichas diferencias salariales. El abogado de las jugadoras, Jeffrey Kessler, dijo que "ellas ganan el 40% de lo que ganan los jugadores del equipo masculino". "Es el caso m¨¢s alarmante de discriminaci¨®n contra mujeres atletas que jam¨¢s he visto", sentenci¨®.

Los datos son los siguientes: un jugador del equipo nacional masculino gana como m¨ªnimo 5.000 d¨®lares por perder un amistoso. Pero si el conjunto gana ante un rival importante, el jugador puede recibir hasta 18.000, aproximadamente. Una jugadora del equipo femenino gana cero si el equipo pierde. Si consigue la victoria, se lleva 1.350.

En su reacci¨®n, la federaci¨®n ha expresado en un comunicado que se sienten "decepcionados por esta acci¨®n" y defienden que siempre ha potenciado el f¨²tbol femenino y "ha mostrado un gran compromiso a trav¨¦s de la promoci¨®n de equipos femeninos en EE UU durante los ¨²ltimos 30 a?os".

Sin embargo, las tensiones entre el equipo femenino de f¨²tbol y el organismo no son nuevas. Esta demanda solo supone la ¨²ltima acci¨®n en el marco de una serie de quejas que las jugadoras han transmitido acerca de las condiciones laborales ¡ªincluyendo la log¨ªstica de viajes y alojamientos¡ª, as¨ª como los sueldos.

El ¨²ltimo suceso ocurri¨® en diciembre pasado, cuando las futbolistas de la selecci¨®n se negaron a jugar en un campo de c¨¦sped artificial por motivos de seguridad mientras estaban de gira por Estados Unidos con motivo de su victoria en el Mundial. En consecuencia, el presidente federativo, Sunil Gulati, se limit¨® a disculparse por la situaci¨®n y a cargar contra los sindicatos del equipo femenino, crispando a¨²n m¨¢s las relaciones.

Hope Solo afirm¨® este jueves en el programa de televisi¨®n Today que "poco ha cambiado en la d¨¦cada y media que llevo en este equipo. En esta era se trata de igualdad. Se trata de tener los mismos derechos. Se trata de tener la misma remuneraci¨®n". "Es nuestro deber como mujeres deportistas luchar por los mismos derechos y los mismos sueldos", enfatiz¨® la jugadora.

Las cinco jugadoras han afirmado que su petici¨®n legal representa no solo su sentimiento individual, sino la postura del equipo entero respecto a la diferencia salarial entre el equipo masculino y femenino. Esta iniciativa oficial es otra de las que se suman al debate en los ¨²ltimos meses sobre discriminaci¨®n salarial contra las mujeres en otros deportes, como el tenis.