Un vacilante Bar?a se asfixia en Rusia

El Barcelona perdi¨® un partido que domin¨® la mayor parte del tiempo y en el que no supo aprovechar su enorme superioridad en el rebote. A medida que el Lokomotiv apret¨® las tuercas en defensa, se diluy¨® el Barcelona. Los peque?os detalles arruinaron su primer envite en Krasnodar. Un par de tapones, un par de balones que les quitaron literalmente de las manos a Tomic y la lesi¨®n de Dorsey en la ¨²ltima jugada antes del descanso fueron marcando los peque?os puntos de inflexi¨®n que desembocaron en un ¨²ltimo cuarto demoledor.

El Barcelona, en ese ¨²ltimo periodo se qued¨® en ocho puntos, la mitad que el Lokomotiv, que explot¨® a fondo sus virtudes. En contra de lo que sugiere la abreviatura de su nombre en castellano, Loko, la escuadra que dirige el griego Georgios Bartzokas puede incurrir en errores y tiene defectos como cualquier otro, pero si algo evita es perder los papeles.

Estuvo a punto de obcecarse con los triples, precisamente una de sus virtudes. Pero sus ca?oneros no estaban inspirados. Fallaron 12 de los 15 que intentaron en el primer tiempo. Corrigieron en la segunda parte, en la que lanzaron la mitad. Bartzokas prefiri¨® que las jugadas concluyeran con penetraciones del base Delaney o que Anthony Randolph, el p¨ªvot que estuvo seis a?os en la NBA, continuara busc¨¢ndose sus tiros a cuatro o cinco metros.

Entre ambos martirizaron la defensa blaugrana. Doellman empez¨® siendo el amo y se?or, con la facilidad que le otorg¨® la defensa del Loko. Claver era su marcador, pero no le presionaba en exceso mientras el bal¨®n circulaba lejos del aro o incluso delegaba en las ayudas de otros compa?eros. El Barcelona, sin alardes en ataque, cuidando el rebote, m¨¢s abundante de lo habitual debido a los fallos de los artilleros del Loko, lleg¨® a dominar con relativa comodidad (19-28 antes del descanso y 35-42 poco despu¨¦s).

Draper, el base que tuvo una corta etapa en el Madrid, se enton¨®. El Loko opt¨® por mover el bal¨®n de tal manera que penaliz¨® los errores defensivos del Barcelona con un carrusel de tiros libres. El equipo ruso obtuvo 17 puntos desde la l¨ªnea de castigo; el Barcelona solo cuatro. El partido se igual¨®. Pau Ribas y Abrines dieron se?ales de vida en ataque. Pero el Barcelona no acab¨® de encontrar situaciones francas para sus p¨ªvots. Ni Samuels ni Tomic fueron suficientemente efectivos en el interior de la zona, ni se zafaron como era de esperar cuando los cambios defensivos del Loko les emparejaron con jugadores notablemente m¨¢s bajos.

El final fue a cara y cruz. Draper adelant¨® al Loko a falta de un minuto y medio (62-61) tras una acci¨®n en que el banquillo azulgrana pidi¨® falta de ataque sobre Arroyo. Acto seguido, todas las escaramuzas acabaron de mala manera para el Barcelona. Pau Ribas perdi¨® un bal¨®n porque cuando lo recibi¨® estaba pisando la l¨ªnea de banda, Delaney anot¨® en una entrada a canasta que derriti¨® la defensa blaugrana como si fuera mantequilla (64-61), Abrines fall¨® un triple. Y en el ¨²ltimo ataque Doellman estuvo a punto de robar el bal¨®n, pero la acci¨®n no hizo otra cosa que acabar en manos de un jugador del Loko, Broekhoff, que cerr¨® el primer debate. El Barcelona tendr¨¢ que esperar que Dorsey se recupere de su lesi¨®n y jugar con mucha m¨¢s convicci¨®n para ganar ma?ana en Krasnodar.