Vidal salva a Chile y condena a Bolivia

A la afici¨®n estadounidense, a la que todav¨ªa le cuesta engancharse con el f¨²tbol, Chile y Bolivia no le hicieron ning¨²n favor. El partido result¨® un bodrio para la hinchada, una condena para Bolivia y un interrogante para Chile. El cuadro de Pizzi se encontr¨®, literalmente, con la victoria en el descuento. Arturo Vidal sell¨® la victoria de la Roja gracias a un penalti que solo vio el asistente y que solo el ¨¢rbitro estadounidense se anim¨® a cobrar. Demasiado castigo para la selecci¨®n de Baldivieso, que hab¨ªa defendido con fuerza el empate y se qued¨® sin nada en el ¨²ltimo segundo. Ya est¨¢ fuera Bolivia de la Copa Am¨¦rica, mientras que Chile coge un poco (solo un poco) de aire.

Anda sin br¨²jula la selecci¨®n de Pizzi, irreconocible respecto del equipo que un a?o atr¨¢s levant¨® en su casa la primera Copa Am¨¦rica de su historia. El t¨¦cnico santafesino todav¨ªa no le puede dar su sello a la Roja, un conjunto sin identidad, un h¨ªbrido entre un equipo que atesora la pelota y otro que juega con v¨¦rtigo. Ausente de ideas cuando tiene el bal¨®n, Chile extra?a a un jugador como Valdivia, que rompa l¨ªneas y encuentre a la velocidad de Alexis u Orellana, extraviados este viernes ante Bolivia.

Para el cuadro de Baldivieso la falta de ritmo de Chile fue un caramelo. Arrinconado cerca de su portero, el t¨¦cnico de Bolivia plant¨® una defensa de cinco, arropada por una l¨ªnea de cuatro volantes. Una muralla de camisetas verdes que a la Roja, que a pesar de tener el bal¨®n en el campo de Bolivia, le costaba demasiado derribar. En el primer acto, Chile solo asust¨® en dos ocasiones al guardameta boliviano. Centeno salv¨® a en la l¨ªnea, despu¨¦s de un fuerte derechazo de Alexis que se hab¨ªa aprovechado de una salida en falso del portero boliviano. Antes el Tucu Hern¨¢ndez hab¨ªa intentado apaciguar el aburrimiento con un disparo desde el balc¨®n del ¨¢rea. Pero la nada gobern¨® el primer acto en el Gillette Stadium.

Ocurri¨®, sin embargo, que tras el paso por vestidores Chile encontr¨® la luz. El problema para el conjunto de Pizzi fue que le dur¨® solo 40 segundos. Todav¨ªa la hinchada no se hab¨ªa terminado de acomodar en sus butacas cuando Arce se durmi¨® con el bal¨®n y Arturo Vidal no lo desaprovech¨®. El jugador del Bayern le birl¨® el cuero y toc¨® para Pinilla, que no tard¨® volver a buscar a Vidal para que firmara el 1-0. Robar la pelota y jugar en velocidad, una vieja f¨®rmula de la Roja. Sin embargo, despu¨¦s de la alegr¨ªa del gol, Chile volvi¨® a la melancol¨ªa.

Ni los gritos desesperados de Pizzi desde la banda, ni los tres cambios que dispuso el preparador argentino despertaron a Chile. Y Bolivia, ese equipo que se hab¨ªa defendido con el alma pero que no se hab¨ªa atrevido a visitar la casa de Claudio Bravo, se encontr¨® con un premio grande. En la antesala al regreso de Messi, Campos se visti¨® de la Pulga. Un zapatazo para la historia el 10 de Bolivia, que lanz¨® un tiro libre tan precioso como imposible de parar para Claudio Bravo. Pero cuando el 1-1 parec¨ªa anclado en el marcador, en el minuto 99 Arturo Vidal firm¨® el 2-1, que mantiene la ilusi¨®n de Chile de reencontrarse con su mejor versi¨®n, desaparecida desde que Pizzi se sent¨® en el banquillo.