M¨¢rquez se impone en Sachsenring con velocidad y una buena estrategia

No gan¨® esta vez porque el de Sachsenring sea un circuito que se le da bien, que se adapta a su estilo de pilotaje, que tiene tantas curvas a la izquierda (10, solo tres a la derecha) que le recuerda a esas pistas de corte americano que tanto le gustan en las que practica modalidades como el dirt track, donde puede tirar mano de las derrapadas y tambi¨¦n de lo mejor de su t¨¦cnica. Todo eso pudo influir en cuanto se sec¨® la pista y empez¨® a rodar r¨¢pido, a dar miedo, a obligar a m¨¢s de un rival a apartarse de su trazada. Pero lo que de verdad le hizo lograr su s¨¦ptima victoria consecutiva en el gran premio de Alemania fue la clarividencia con la que ¨¦l y su equipo leyeron la carrera, la calma con la que asumi¨® que las 30 vueltas que hay que darle al circuito germano dan para mucho y que la pista acabar¨ªa sec¨¢ndose tarde o temprano, lo que le dar¨ªa cierto margen de maniobra.

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La maniobra, en este caso, se redujo a 11 vueltas en las que Marc M¨¢rquez, el de las derrapadas y el pu?o de oro, el que ha aprendido a ser paciente y correr con la cabeza, vol¨®. Y pas¨® de ser 13? a liderar la prueba en seis giros. Y lleg¨® a ir hasta ocho segundos m¨¢s r¨¢pido que el entonces piloto en cabeza, Miller (que no entr¨® a cambiar neum¨¢ticos hasta que quedaban cinco vueltas para el final, y termin¨® s¨¦ptimo). As¨ª que la victoria fue una exhibici¨®n de resistencia y de estrategia.

Resisti¨® M¨¢rquez porque la pista no estaba para tonter¨ªas. Ni para filigranas. Era un d¨ªa de perros. Se dio cuenta en cuanto dio las primeras vueltas. Michelin se hab¨ªa sacado de la manga un nuevo neum¨¢tico delantero s¨²per blando para lluvia, mucho m¨¢s que la versi¨®n blanda del que ya hab¨ªa tra¨ªdo para el gran premio y que tantos problemas dio a los pilotos durante el fin de semana ¨Cse han visto numerosas y dur¨ªsimas ca¨ªdas en Sachsenring e incluso se ha puesto en entredicho la seguridad de uno de los circuitos m¨¢s t¨¦cnicos y complejos del calendario¨C, as¨ª que, como hicieron sus rivales, Lorenzo, Rossi o Pedrosa, ¨¦l (que se cay¨® la misma ma?ana del domingo) tambi¨¦n lo escogi¨®. Pero era demasiado blando para su estilo de pilotaje, m¨¢s agresivo, especialmente a la entrada de las curvas. No se sent¨ªa c¨®modo. As¨ª que baj¨® ligeramente el pist¨®n. Sab¨ªa que en alg¨²n momento la pista se habr¨ªa secado y podr¨ªa cambiar las gomas por otras con las que se sintiera m¨¢s c¨®modo.

Y as¨ª fue. En cuanto se form¨® un carril seco en el asfalto M¨¢rquez se la jug¨®. No fue el primero en entrar, pero casi; cuatro giros antes lo hab¨ªa hecho Iannone, pero aquel hab¨ªa salido con las gomas intermedias. El de Honda se calz¨® los lisos. De entre los pilotos que le siguieron hubo de todo. Algunos, como Iannone, apostaron por los intermedios; fue el caso de Rossi y de Lorenzo. Y no les funcion¨®. Otros, como Dovizioso o Barber¨¢, optaron por un h¨ªbrido: delante el intermedio, detr¨¢s el liso. Y no fue una mala combinaci¨®n. Pocos hicieron como M¨¢rquez, que opt¨® por lo de siempre, pues hasta este a?o no hab¨ªa opci¨®n de ponerse esas gomas para situaciones en las que la pista est¨¢ medio seca, medio mojada. Si bien, nunca se hab¨ªan probado en carrera, y su rendimiento, como se vio, no fue el mejor. Los pilotos de Honda no se la jugaron. Y menos despu¨¦s de ver que al l¨ªder del Mundial su apuesta le sal¨ªa de rechupete: Crutchlow, que acab¨® en el podio, Pedrosa (sexto) y Miller (s¨¦ptimo) s¨ª le copiaron.

Marc se subi¨® al caj¨®n acompa?ado de un magn¨ªfico Crutchlow ¨Cmaravillosa su remontada en las ¨²ltimas vueltas, el adelantamiento a Redding en la primera curva, y las ¨²ltimas dos vueltas r¨¢pidas¨C y de Dovizioso, que salv¨® la carrera en los ¨²ltimos giros y firm¨® un adelantamiento bestial, tambi¨¦n a Redding, en la bajada de la curva 12.

Qui¨¦n peor gestion¨® la prueba fue Rossi, que rodaba en cabeza desde el principio, con la pista empapada, y no supo entrar a tiempo a cambiar de moto y neum¨¢ticos. Cuando la pista empieza a secarse sufren much¨ªsimo las Yamaha. Basta con ver a Lorenzo, que ya las pas¨® canutas en el ¨²ltimo gran premio de Holanda. Y volvi¨® a hacerlo esta vez. Adem¨¢s, tambi¨¦n err¨® la estrategia. Entr¨® tan tarde que apenas pudo enmendar el desastre bajo la lluvia, cuando le falta confianza. El fallo no fue solo suyo, tambi¨¦n del equipo, que no planific¨® cu¨¢ndo deb¨ªa entrar y le ense?¨® la pizarra apenas a unos giros del final de la carrera. Un 15? puesto, a casi 1m,18s de M¨¢rquez, es demasiado para el campe¨®n del mundo. Qued¨® el cuarto por la cola. Y se va de vacaciones a 48 puntos del liderato.