Pau y los coleccionistas de medallas
R¨ªo 2016 espera a Pau Gasol y su tropa con la convicci¨®n de que volver¨¢n de all¨ª con una medalla al cuello. Y si no lo hacen, lo mismo da
El individuo ese de la imagen lo ha ganado todo. En Espa?a, con Espa?a, en la NBA, en Europeos, Mundiales, Juegos Ol¨ªmpicos. P¨®ngale usted en su competici¨®n de barrio, en el juego m¨¢s rec¨®ndito que imagine su imaginaci¨®n, que gana. P¨®ngalo y eche su futuro a pares o nones, a pies, a los chinos. Que gana. El¨ªjale, no lo dude. Porque ese tipo no tiene fin. Y si tiene alg¨²n fin ser¨¢ en R¨ªo, tras estos Juegos, l¨ªder como es de la mejor generaci¨®n de jugadores de baloncesto que ha dado la historia en Espa?a. Qu¨¦ tonter¨ªa. ?l y su tropa no son solo la mejor generaci¨®n de baloncestistas que ha tenido este pa¨ªs en su vida. ?l y su tropa son los mejores deportistas espa?oles que jam¨¢s vieron los tiempos. Y ¨¦l y algunos de ellos dir¨¢n adi¨®s a la selecci¨®n en un mes. ?l, Juan Carlos Navarro y Felipe Reyes, juntos desde ni?os, protagonistas de gestas que nunca imagin¨® Espa?a, se despedir¨¢n de La Roja al acabar los Juegos.
Qu¨¦ f¨¢cil nos fue divertirnos con Pau y su gente. Les vimos ganar, siempre, o casi. Hasta en la derrota ganaron. Lo hicieron en 2008, en Pek¨ªn, cuando cayeron (108-117) en la final ante Estados Unidos en lo que fue La mejor derrota de la historia. As¨ª titul¨® este peri¨®dico la cr¨®nica de aquel partido. Y lo hicieron en 2012, en Londres, ante el mismo rival (100-107). Ganaron, s¨ª, que no se dude. Jam¨¢s una plata vali¨® tanto oro.
Poco m¨¢s de una semana queda para el inicio de los Juegos de R¨ªo. Y all¨ª acude Espa?a con 305 representantes, 163 hombres y 142 mujeres. Entre ellos, cinco t¨ªos ya saben lo que es colgarse dos metales al cuello: Pau, Navarro, Felipe Reyes, Rudy y Calder¨®n. Entre ellas destacan tres estrellas mundiales. Ruth Beitia, Mireia Belmonte y Carolina Mar¨ªn. Los pron¨®sticos indican que ah¨ª est¨¢n las medallas, por mucho que luego el azar reparta suerte a su manera y por mucho que la dirigencia del deporte espa?ol haga gala de un optimismo antropol¨®gico y eleve las posibilidades de ¨¦xito casi hasta la treintena.
El d¨ªa 7 de agosto el grupo que lidera Pau Gasol abre el tel¨®n ante Croacia. Brasil, Nigeria, Lituania y Argentina son el resto de rivales en la primera fase. Ya es curioso que, en baloncesto, la selecci¨®n espa?ola pueda estar dirigida por un t¨¦cnico extranjero, Sergio Scariolo, italiano ¨¦l, mientras en la de f¨²tbol esa posibilidad est¨¦ de todo punto prohibida porque as¨ª le sale de ah¨ª al se?or Villar, hombre moderno y de ambiciones internacionales como es bien sabido. Con Scariolo al mando, Espa?a no ha hecho sino engordar un palmar¨¦s que no admite comparaci¨®n ni de lejos con ning¨²n otro deporte, m¨¢s all¨¢ del hockey sobre patines.
Desde que el tal Pau Gasol apareciera en escena junto a Navarro y Reyes con un t¨ªtulo mundial juvenil en la mochila, el de 1999, la selecci¨®n ha conquistado un oro mundial, dos platas ol¨ªmpicas, tres oros, dos platas y dos bronces europeos. Y sin hacer m¨¢s ruido del necesario. Y sin el boato que acompa?a a otros profesionales de portada diaria. El 7 de agosto echa a andar el mejor equipo que nunca conoci¨® Espa?a. Hubo un d¨ªa, el 17 de septiembre de 2015, en el que el mundo asisti¨® boquiabierto a la mayor exhibici¨®n que se le recuerda a un deportista de este pa¨ªs. Fue ante Francia, en las semifinales del Europeo, cuando Pau Gasol hizo honor a su condici¨®n de leyenda y ¨¦l solo logr¨® la misma valoraci¨®n (52 puntos) que todo el equipo franc¨¦s.
R¨ªo les espera a ¨¦l y su tropa con la convicci¨®n de que volver¨¢n de all¨ª con una medalla al cuello. Y si no lo hacen, lo mismo da. Hace mucho, mucho tiempo que esta gente se gan¨® el derecho a fracasar.
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