¡°Detr¨¢s de la careta no me discriminan¡±

¡°Cuando me pongo la careta soy yo, una atleta. Me ven como una atleta y s¨®lo me juzgan por mis habilidades no por mi religi¨®n, piel o g¨¦nero. Por eso he elegido este deporte, porque me permite ser lo que soy y porque nadie puede ver qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de la careta¡±. Ibtihaj Muhammad tiene 30 a?os, es afroamericana y musulmana; la primera musulmana del equipo ol¨ªmpico de Estados Unidos. En R¨ªo buscar¨¢ una medalla en esgrima. El presidente Barak Obama, de visita con ella a una mezquita de Baltimore en abril, le dijo que volviera a casa con el oro.

Su casa es Nueva Jersey. Hija de un detective de narc¨®ticos y de una profesora de educaci¨®n especial, Ibtihaj viene de una familia ¡ªcinco hermanos¡ª que siempre consider¨® el deporte como la mejor forma de integraci¨®n. ¡°Mi madre dec¨ªa: s¨¦ lo importante que es para los ni?os sentirse parte de la comunidad, el deporte les ayuda a integrarse¡±. Pero ninguno de los deportes que practicaba Ibtihaj le permit¨ªa llevar el velo y vestir pantalones largos. Ninguno de los uniformes le cubr¨ªa el cuerpo y el cabello. Sus padres se los ajustaban en casa y lleg¨® a jugar al voleibol con polainas sueltas. Dej¨® eso, el tenis y el atletismo porque sus compa?eros se burlaban de ella.

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Hasta que, por casualidad, descubri¨® la esgrima. Vio a trav¨¦s de una cristalera unos deportistas con pantal¨®n largo y caretas. Ten¨ªa 13 a?os. Hoy 30. Aparece en una de las salas del centro de prensa de R¨ªo acompa?ada por sus compa?eros de esgrima con los que competir¨¢ en sable por equipo, adem¨¢s de sable individual. Lleva un velo azul, los ojos pintados con una raya negra y las u?as color rosa. Es amable, encantadora, chisposa y siempre est¨¢ sonriendo. Durante los 20 minutos de charla con los medios, algunos le preguntan por Donald Trump, el candidato republicano a las elecciones presidenciales. ¡°?Qui¨¦n?¡±. Trump. ¡°?Qui¨¦n?¡± Donald Trump. ¡°Perd¨®n es que no oigo bien¡±, sonr¨ªe picara sin contestar.

Episodios de racismo

Ibtihaj sufri¨® episodios de racismo estando incluso en el equipo ol¨ªmpico. En la p¨¢gina web del equipo de esgrima hay un apartado dedicado a ella y a sus logros y alguien dej¨® comentarios como este: ¡°?Qu¨¦ verg¨¹enza, esto es desagradable. Los musulmanes no nos representan!¡±. En otra ocasi¨®n en un control de seguridad en un aeropuerto al ver que llevaba el velo le pidieron que hablara ingl¨¦s para demostrar que era americana.

¡°Cuando la gente piensa en un atleta ol¨ªmpico estadounidense es probable que no imagina a alguien parecido a m¨ª: de piel negra y musulm¨¢n. Esto es lo que soy: americana y musulmana. Es algo que no puedo ni quiero cambiar, por nada en el mundo. Me gusta c¨®mo me eduqu¨¦ y c¨®mo crec¨ª. Mis padres me han ense?ado a creer en m¨ª misma y siempre me he centrado en lo m¨ªo y he seguido mi camino. Todos los obst¨¢culos que he encontrado en la vida me han hecho m¨¢s fuerte. He trabajado duro¡±, explicaba el mi¨¦rcoles en la charla con los medios.

¡°Estoy contenta porque lo que estoy haciendo ahora no lo estoy haciendo solo por m¨ª sino que espero que sirva para ayudar a otras personas. Espero que la esgrima se convierta en algo multicultural¡±. Es su deseo, aparte de llevarse a casa la medalla que le pidi¨® el presidente Obama.

Ibtihaj significa alegr¨ªa. Ella la tiene pintada en la cara. Adem¨¢s de deportista, es emprendedora, ha creado una marca de ropa junto a su hermana que lleva el nombre de la abuela, Louella. ¡°Estoy feliz de estar en los Juegos, tan emocionada que no siento el cansancio. Me represento a m¨ª misma, a mi pa¨ªs y tambi¨¦n a la comunidad musulmana. Espero que mi presencia en el equipo ol¨ªmpico sirva para cambiar la idea que tienen las personas de los musulmanes, espero terminar con los estereotipos¡±, asegura. En los Juegos de Londres no pudo competir por un problema en el tend¨®n de la mano. Ahora disfruta de R¨ªo y de las estrellas que se encuentra por la Villa. Entre ellos, Rafa Nadal, al que le pidi¨® hacerse una foto.