??Un nuevo caso de acoso sexual deja a un segundo atleta fuera de los Juegos Ol¨ªmpicos
El boxeador Jonas Junius, abanderado de Namibia, fue detenido por intentar besar a la fuerza a una limpiadora en la Villa Ol¨ªmpica
Es la segunda vez en cuatro d¨ªas que la Polic¨ªa Civil irrumpe en la Villa Ol¨ªmpica para detener a un deportista por acoso sexual. Esta vez el detenido ha sido el abanderado de Namibia, el boxeador de 22 a?os Jonas Junius, que posteriormente fue trasladado a comisar¨ªa acusado de abusar de una limpiadora.
La agresi¨®n se produjo, seg¨²n declaraciones de la v¨ªctima a la Polic¨ªa, este domingo, cerca de la habitaci¨®n del boxeador. Junius se abalanz¨® sobre la mujer, que se encontraba de espaldas, limpiando. El luchador le dio un beso en el cuello e intent¨® besarla en la boca. Luego, seg¨²n la Polic¨ªa, hizo gestos obscenos indicando que quer¨ªa darle dinero a cambio de sexo.
En Brasil, este tipo de agresiones, aunque no se consuma el acto sexual, puede tipificarse como delito de violaci¨®n, con penas de hasta diez a?os de c¨¢rcel. ¡°Ha sido detenido por violaci¨®n, no por acoso sexual. Delito de violaci¨®n, insisti¨® la comisaria Carolina Salom?o al diario brasile?o Extra.
Junius es el segundo deportista y boxeador que acabar¨¢ preventivamente en la c¨¢rcel por el mismo motivo y se perder¨¢ la competici¨®n m¨¢s importante del mundo del deporte. Jonas Junius luchar¨ªa la noche del jueves contra el franc¨¦s Hassan Anzille, pero necesitar¨¢ un h¨¢beas corpus para poder comparecer. A Hassan Saada, detenido el viernes por manosear a dos limpiadoras, se le deneg¨® su libertad y sigue en prisi¨®n.
Los casos de violaci¨®n en R¨ªo est¨¢n lejos de ser aislados. En este Estado se cometieron, en 2015, 4.128 violaciones, cerca del 9% de las violaciones denunciadas en todo Brasil si consideramos los ¨²ltimos datos de 2014 del Anuario de Seguridad P¨²blica. Esta cifra revela que, cada dos horas, una mujer es violada en R¨ªo de Janeiro.
La violencia sexual en Brasil ha fortalecido el movimiento feminista durante el ¨²ltimo a?o. Campa?as virtuales como la del #meuprimeiroassedio [mi primer acoso], con la que las mujeres contaban la primera vez que se sintieron acosadas, han demostrado que los abusos son mucho m¨¢s comunes y cercanos de lo que arrojan las estad¨ªsticas. Un caso de violaci¨®n en grupo en mayo en una favela de R¨ªo tambi¨¦n puso de manifiesto la naturalizaci¨®n de la violencia sexual contra la mujer, adem¨¢s de c¨®mo una buena parte de la sociedad sigue culpando a las v¨ªctimas. En la propia Villa Ol¨ªmpica, a pesar de la r¨¢pida acci¨®n policial, dos guardias de seguridad ¡ªun hombre y una mujer¡ª comentaban las dos agresiones. Ambos, sin conocer a las chicas que limpiaban las habitaciones en cuesti¨®n, dieron su veredicto: ¡°lo ¨²nico que quieren es ser famosas¡±.
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