El Villarreal se complica su pase a la Champions League

Con Fran Escrib¨¢ en la direcci¨®n, un entrenador reci¨¦n llegado, con un equipo plagado de bajas, el Villarreal fue v¨ªctima de s¨ª mismo, en desventaja desde el inicio del partido por un penalti cometido de manera inocente por N¡¯Diaye, central improvisado esta vez. El club de Roig se complica su regreso a la Champions, derrotado por un buen equipo sin m¨¢s como el M¨®naco, mucho m¨¢s rodado y conjuntado que el conjunto castellonense, que supo levantarse y equilibrar el juego y el marcador, con el estreno goleador de Pato, y poner en evidencia las limitaciones t¨¦cnicas del conjunto monegasco. Cuando m¨¢s convencido estaba el equipo de Escrib¨¢ de revertir la situaci¨®n, de ir en ventaja a Montecarlo, un nuevo error de N¡¯Diaye, fuera de posici¨®n, dejaba el pasillo para que en una diagonal perfecta de Bernardo Silva, el mejor jugador del M¨®naco, pusiera en ventaja la eliminatoria para los monegascos.

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Carente de sincron¨ªa y ritmo, al Villarreal le falt¨® temple para crear y contundencia en el ¨¢rea monegasca, la que no tuvo en la de Asenjo. Musacchio, Bruno y Trigueros sosten¨ªan al equipo amarillo, mientras Roberto Soriano y Pato dejaban buenas sensaciones. Poca cosa. A Escrib¨¢ no le quedaban ni recursos en el banquillo formado con cinco canteranos.

Todo se le torci¨® al Villarreal desde el inicio. A los dos minutos de juego, Mark Borsch, el experimentado ¨¢rbitro alem¨¢n del encuentro, se?al¨® penalti de N¡¯Diaye a Lemar, por una acci¨®n torpe y de exceso de confianza del franco-senegal¨¦s, que actuaba de central debido a las bajas de Bonera y V¨ªctor Ruiz. Fabinho pon¨ªa en ventaja al M¨®naco.

Tard¨® el Villarreal de asimilar el golpe, falto de coordinaci¨®n entre sus jugadores. Demasiadas caras nuevas, con ocho ausencias, destacadas todas, y que presumiblemente estar¨ªan presentes en el once ideal de Escrib¨¢. Un drama para tanto en juego. Con buen ¨¢nimo el M¨®naco por la temprana ventaja, el conjunto del principado se crey¨® m¨¢s de lo que realmente es, con el dinamismo que le proporciona Bernardo Silva, condicionado el grupo de Jardim tambi¨¦n por la baja de Radamel Falcao.

Despabil¨® el Villarreal con el paso de los minutos, cuando se le pas¨® el susto, en el momento que comenz¨® a combinar con sosiego y cierta continuidad. Dos avisos de Pato hicieron ver al M¨®naco que el conjunto amarillo es mucho m¨¢s de lo que aparent¨® de inicio. Pasada la media hora, el Villarreal empataba el encuentro, en una asociaci¨®n a cuatro toques, los tres ¨²ltimos de cabeza, iniciada la acci¨®n en un pase picado de Trigueros para Roberto Soriano que cedi¨® a Rafael Santos Borr¨¦, culminada felizmente por Pato con la testa. El primer gol de amarillo del exmilanista, a quien Marcelino no le acababa de convencer, indudable la calidad del delantero brasile?o, al igual que la de Roberto Soriano, el italiano llegado de la Sampdoria y por el cual el Villarreal ha pagado 14 millones de euros.

Regres¨® el Villarreal del descanso con m¨¢s intensidad e intenci¨®n, dominador del esf¨¦rico y los espacios, vigilante ante las r¨¢pidas transiciones monegascas, obligado el conjunto del portugu¨¦s Jardim a retroceder unos metros y proteger a Subasic. En un contragolpe conducido y finalizado por Bernardo Silva al aprovechar un nuevo error defensivo de N¡¯Diaye, el M¨®naco se adelantaba de nuevo en el marcador. El Villarreal se qued¨® con escaso ¨¢nimo y fuerzas. El arrebato final no le dio para reconducir la situaci¨®n que complica su regreso a la Champions.