Aun sin Noya, el triatl¨®n espa?ol pisa fuerte
Mario Mola lidera un terceto que habla de medallas
Como si fuera la lista de los Borbones u otras dinast¨ªas reinantes en Espa?a, el triatl¨®n ol¨ªmpico espa?ol estaba perfectamente ordenado. Al fundador Iv¨¢n Ra?a le sigui¨® Javier G¨®mez Noya, quien lleg¨® a la medalla de Plata en Londres y deber¨ªa haber sido de oro en R¨ªo antes de ceder el trono a su heredero designado, Mario Mola. Noya, sin embargo, se rompi¨® el brazo hace un mes entren¨¢ndose, lo que ha acelerado el traspaso de poderes. El sucesor, Mario Mola, que ya fue ol¨ªmpico en Londres, se siente preparado. Tambi¨¦n, claro, se sent¨ªa listo antes de la ca¨ªda de Noya, por algo el ¨²ltimo a?o ya hab¨ªa sido segundo en el Mundial. En R¨ªo, hoy, acompa?ado de Fernando Alarza, otro adelantado al futuro, querr¨¢ demostrarlo. Completa el terceto espa?ol, uno de los m¨¢s fuertes, otro debutante ol¨ªmpico, el canario Chente Fern¨¢ndez.
¡°Pero no hablemos de equipo¡±, dicen tanto Mola, mallorqu¨ªn, como Alarza, toledano de Talavera de la Reina. ¡°Antes del accidente de Javi ya dijimos que lo m¨¢s fruct¨ªfero era el individualismo, entendido como no privar a nadie de perseguir sus ambiciones¡±, a?ade Mola. ¡°As¨ª tendremos que seguir, cada uno a lo suyo¡±. ¡°Nuestro planteamiento no cambia¡±, dice Fernando Alarza, a quien entrena el mismo t¨¦cnico que ten¨ªa G¨®mez Noya cuando fue medalla de plata en Londres, Omar Gonz¨¢lez. ¡°Sin Noya o con Noya tenemos la obligaci¨®n de luchar por las medallas¡±.
Los hermanos Brownlee
El rival en Copacabana ser¨¢ el Reino Unido, tres triatletas a los que s¨ª se puede considerar equipo. Est¨¢ formado por los hermanos Alistair y Jonathan Brownlee, los chavales de Leeds que emparedaron a Noya en el Serpentine de Hyde Park, y contar¨¢n con un gregario para endurecer el tramo de bicicleta, cinco vueltas a un circuito de ocho kil¨®metros hacia los repechos que dan la espalda al mar. ¡°Ser¨¢ su t¨¢ctica, romper el grupo en ciclismo para que lleguemos ya desgastados a la carrera a pie [10 kil¨®metros arriba y abajo por el paseo mar¨ªtimo de la playa m¨¢s famosa de R¨ªo], y convertirla en una prueba de desgaste. No es lo mismo encararla fresco que en estado de fatiga¡±.
Dando marcha atr¨¢s, entonces, la nataci¨®n (1.500 metros en aguas de olas peque?as, y saliendo de la arena, no del habitual pont¨®n) ser¨¢ el segmento clave. ¡°Si no salimos retrasados del agua, evitaremos que se adelanten con la bici los brit¨¢nicos¡±, sostiene Alarza. ¡°Noya sol¨ªa colaborar con ellos, porque le iba bien su t¨¢ctica. Sin Javi ser¨¢ diferente¡±.
Con m¨¢s memoria del triatl¨®n que Alarza, con m¨¢s a?os creciendo a la sombra del gigante gallego, Mola es capaz de echar la vista atr¨¢s. Le acompa?a su chica, la tambi¨¦n triatleta Carolina Routier, que se entrena con ¨¦l a las ¨®rdenes de Joel Filliol y que competir¨¢ el viernes, lo que le obligar¨¢ a una complicada jornada previa. ¡°Yo lo tengo m¨¢s f¨¢cil, ir¨¦ a verla porque no tengo que competir al d¨ªa siguiente¡±, dice Mola, que con el resto del equipo se ha alojado en el Royalty, el hotel de Copacabana en el que estuvieron los ciclistas.
Mola era una de las mayores promesas del atletismo espa?ol en fondo antes de que los triunfos de Noya le hicieran lanzarse al triatl¨®n, donde parti¨® con el h¨¢ndicap, cada vez m¨¢s superado, de un nivel en nataci¨®n inferior al de la elite. ¡°Habl¨¦ con Noya al saber lo de su accidente¡±, dice el mallorqu¨ªn, que ha asumido su responsabilidad. ¡°Es la persona que m¨¢s ha hecho por este deporte. Nos ha ense?ado a todos a competir. Nos ha hecho creer que lo excepcional puede ser lo normal. Gracias a ¨¦l, podemos presumir de ser un grupo muy unido¡±.
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