Daniel Torres: ¡°Yo ten¨ªa que nacer de nuevo; era mi ¨²nica salida¡±
El volante cuenta la experiencia espiritual que le ayud¨® a combatir el alcoholismo, lograr cuatro t¨ªtulos con el Santa Fe de Bogot¨¢ y convertirse en una revelaci¨®n de la Liga espa?ola
En la era del f¨²tbol supertecnificado, en la era del entrenador como m¨¢ximo exponente del juego, en la era de la complejidad t¨¢ctica, la se?ora Sandra Merino, pastora de la Iglesia del Dios Viviente y autodenominada La Mam¨¢, es la ide¨®loga de un equipo campe¨®n. El Santa Fe de Bogot¨¢ conquist¨® cinco t¨ªtulos de la m¨¢xima competici¨®n colombiana entre 2012 y 2016. Su jugador m¨¢s relevante, el mediocentro Daniel Alejandro Torres (Bogot¨¢, 1989), internacional colombiano fichado este verano por el Alav¨¦s, es una de las personalidades m¨¢s llamativas de la Liga.
Pregunta. Usted repite que atraves¨® una etapa de irresponsabilidad. Pero ahora parece un ingeniero al frente de una corporaci¨®n.
Respuesta. Ahora soy totalmente diferente. Mi ¨¦poca m¨¢s irresponsable fue entre 2010 y 2011. No tuve orientaci¨®n. Mis padres son de C¨¢queza, un pueblo de las monta?as de Cundinamarca. Yo de ni?o me tuve que ir solo para Bogot¨¢, a la cantera del Santa Fe. Viv¨ª en un hotel, en una casa-hogar, en lo de una t¨ªa. Hice cuentas y viv¨ª en ocho lugares diferentes. No ten¨ªa un control. Recib¨ª todo aquello que es bueno cuando lo sabes administrar: un prestigio, un buen salario, y ese reconocimiento de poder jugar al f¨²tbol y trabajar en ello. Para los que so?amos de peque?os con ser futbolistas, mi situaci¨®n era una bendici¨®n enorme. Pero empec¨¦ a¡ No beb¨ªa. Nunca beb¨ª. No me gustaba el alcohol. ?Jam¨¢s! En Colombia lo popular era el aguardiente. Pero a m¨ª no me gustaba. Y empec¨¦ a tomar whisky. Yo solo pod¨ªa tomarme dos botellas. Se me notaba en la cara y en el tufo. Pero al otro d¨ªa entrenaba con normalidad. No s¨¦ c¨®mo aguant¨® mi cuerpo. No s¨¦ c¨®mo no tuve una lesi¨®n de rodilla, un desgarro.
P. ?Jugaba en esas condiciones?
R.. En Santa Fe me perdonaron unas ocho veces con prueba de alcoholemia positiva. El doctor y el presidente me lo pasaban. Hasta que lleg¨® un t¨¦cnico en 2011 y me sent¨®. Seis meses estuve sin jugar. Cuando acab¨® la temporada le dije al presidente que me dejara ir a Nacional de Medell¨ªn porque todos sab¨ªamos que ya no iba a jugar. Viendo el problema que ten¨ªa y viendo que me estaba perdiendo, decidieron mandarme a ver si todo cambiaba. Y fue peor. Medell¨ªn es muy noct¨¢mbula, muy fiestera. Empec¨¦ a salir m¨¢s. Solamente dur¨¦ seis meses. El d¨ªa de mi cumplea?os me fui de fiesta y a los tres d¨ªas llegu¨¦ al entrenamiento cuarenta minutos tarde. Me hicieron prueba de alcoholemia y di positivo. Est¨¢bamos en la recta final. Me suspendieron tres partidos. En el ¨²ltimo necesit¨¢bamos empatar o ganar para poder clasificar a los play offs. Entonces se me acerca el presidente y me dice: ¡®Es la ¨²ltima oportunidad que tienes, o nos clasificas o te vas¡¯. Perdimos 1-0. Nos dieron vacaciones. Yo me hab¨ªa separado de mi esposa y de mi hijo. Iba en un taxi al aeropuerto de Medell¨ªn y escuch¨¦ que daban mi nombre por radio. Estaba en la lista de los que sal¨ªan de Nacional. Llam¨¦ al presidente y al t¨¦cnico y no me contestaron. Entonces recib¨ª la llamada de C¨¦sar Pastrana, el presidente del Santa Fe. Y me dice: ¡®Daniel, Nacional no te quiere; ellos quieren enviarte para un equipo de mitad de tabla para abajo. Yo no quiero que te vayas para un equipo as¨ª porque t¨² no eres para ese tipo de equipo¡¯. Yo en Nacional estaba en uno de los clubes m¨¢s grandes de Colombia y me resign¨¦. Era diciembre. Fue la peor etapa de mi vida. No sab¨ªa qu¨¦ iba a ser de mi profesi¨®n; hab¨ªa perdido a mi esposa y a mi hijo; me estaba quedando sin f¨²tbol; los medios hablaban muy mal de m¨ª: me llamaban borracho. Estaba afectando a mi familia.
P. ?Qu¨¦ hizo?
R. Conoc¨ª a Dios. Decid¨ª entregarle mi vida al Se?or y utilizarla para poder glorificarle, honrarle y llevar el mensaje a donde ¨¦l me pusiera. En enero me llamaron para decirme que me quedara en Santa Fe y regres¨¦ con mi esposa. Lo dif¨ªcil fue limpiar mi nombre. Ya nadie me cre¨ªa. Cada vez que llegaba tarde a un entrenamiento, aunque fuera por un accidente, me hac¨ªan prueba de alcoholemia. Pensaban: ¡®Volvi¨® a caer¡¯. Pero mi vida ya fue totalmente diferente. Cuando tuve esa situaci¨®n desastrosa comenz¨® a influirme Sandra Merino.
No me gustaba el alcohol y acab¨¦ tom¨¢ndome dos botellas de whisky por noche. No s¨¦ c¨®mo aguant¨® mi cuerpo
P. ?Qui¨¦n es Sandra Merino?
R. Una pastora, una gu¨ªa espiritual. Ella era la suegra de Camilo Vargas, el arquero de Santa Fe, y un gran amigo m¨ªo. ?l me la present¨® y ella comenz¨® a hablarme de la palabra de Jesucristo. Pero yo no le hac¨ªa caso. Hasta que me encontr¨¦ tan mal que cog¨ª una Biblia y me dije: ¡®Voy a experimentar, a ver qu¨¦ ofrece¡¯. La palabra dice que en Dios todas las cosas son hechas nuevas. Cuando uno decide aceptar a Jesucristo todo pecado es quitado y toda mancha es borrada y un nuevo ser humano nace. Yo ten¨ªa que nacer de nuevo. Era mi ¨²nica salida. Y yo me dije: ¡®?Vamos a darle una oportunidad!¡¯. Fui a donde la se?ora Sandra y oramos. Hice la oraci¨®n de fe, que es aceptar a Jesucristo como Dios y salvador de nuestras vidas. Fue como darle el control. Que ¨¦l sea quien gobierne mi vida. Yo en ese momento le dije al Se?or que no era nadie, que no era nada, que estaba en la ruina y lo necesitaba.
P. ?C¨®mo acab¨® Sandra Merino influyendo a todo el equipo?
R. En diciembre de 2011, cuando conoc¨ª a Jesucristo, llev¨¢bamos 37 a?os sin salir campeones. Empezamos la temporada y hasta la octava jornada creo que sumamos ocho empates. En Colombia se trabaja mucho con brujer¨ªa, con chamanes. Cosas de esas. Cosas que en realidad atan. Santa Fe ten¨ªa una maldici¨®n. Llegaban a puntos decisivos y perd¨ªan. Perd¨ªan de una forma incre¨ªble. Nos dec¨ªamos: ¡®?Por Dios! ?C¨®mo es posible? Algo est¨¢ pasando, ?por qu¨¦ empatamos?¡¯. No jug¨¢bamos mal. Pero est¨¢bamos bajo el arco para empujarla y los balones pegaban en el palo, le ibas a dar y se escachaban¡ Dec¨ªamos: ¡®?Algo est¨¢ pasando!¡¯. Est¨¢bamos en crisis. Quer¨ªan echar al t¨¦cnico. Pero el presidente decidi¨® darle una oportunidad hasta la novena jornada: el cl¨¢sico con Millonarios, nos revivir¨ªa o morir¨ªamos en el intento. Ah¨ª surgi¨® el nombre de la Se?ora Sandra.
P. ?El entrenador particip¨®?
Santa Fe ten¨ªa una maldici¨®n. En Colombia se trabaja mucho con brujos. Nosotros preferimos dejar que entrara Dios en el equipo y llamamos a la pastora Sandra Merino
R. Omar P¨¦rez, el capit¨¢n, habl¨® con el presidente y con el entrenador y les dijo que aqu¨ª pasaba algo raro, algo que no era natural, y que necesit¨¢bamos hacer algo diferente, pero sin brujos ni chamanes. ¡°D¨¦mosle a Dios la oportunidad de entrar al equipo por medio de la se?ora Sandra¡±, les dijo Omar. Ella viv¨ªa en Fusagasug¨¢ as¨ª es que la primera comunicaci¨®n que tuvo con la plantilla fue por Skype.
P. ?Y qu¨¦ les dijo?
R. Que llevaba dos a?os orando por Santa Fe. Que en 2010 el Se?or le revel¨® que interceder¨ªa y que saldr¨ªamos campeones. Que Santa Fe era el ¨²nico equipo en el mundo con un nombre prof¨¦tico: la Santa Fe, que es la fe santa. Que es el ¨²nico equipo que tiene al le¨®n de Jud¨¢ como mascota. Que el color rojo de su camiseta es el rojo de la sangre de Cristo. Que luch¨¢bamos por la s¨¦ptima estrella, el s¨¦ptimo t¨ªtulo de Liga. El n¨²mero perfecto de Dios...
P. ?Por Skype?
R. S¨ª, nos reunimos todos delante de la pantalla. Ella nos saluda, se presenta, nos dice lo que le ha mostrado el Se?or y porqu¨¦ el Se?or quer¨ªa que a partir de ese momento se consiguiera la s¨¦ptima Liga. Nos convenci¨®. Santa Fe no ten¨ªa esperanza. Jugaba por jugar. De pronto, encontramos una esperanza. Despu¨¦s de 37 a?os. La Biblia fue nuestro manual. Jug¨¢bamos contra Millonarios un domingo y nos encontramos con la se?ora Sandra un s¨¢bado. Y lo primero que hizo fue lavarnos los pies: como Jesucristo lav¨® lo pies a sus disc¨ªpulos. Fue un acto de limpieza espiritual. Fue una cosa loca porque jam¨¢s en el f¨²tbol se hab¨ªa visto algo as¨ª. Pero el d¨ªa del cl¨¢sico, en el primer tiempo le metimos 4-0 a Millonarios. ?Y no hab¨ªamos hecho ni un gol en el primer tiempo en las primeras ocho jornadas! Nos asombramos tanto que en la segunda parte entramos al campo con una displicencia tremenda: ?Pens¨¢bamos que nadie nos ganar¨ªa! Empezamos a caminar la cancha, a hacer jugaditas bobas, el central sali¨® tirando un t¨²nel... Y nos hicieron el 4-1, y el 4-2¡ ?Dios te ayuda, pero t¨² tienes que ayudarte a ti mismo! Al final quedamos 4-3. Ganamos siete partidos consecutivos.
P. ?Qu¨¦ tiene que ver el esp¨ªritu con los pies?
R. Ella nos dijo que la Biblia refleja la santidad en los pies. El lugar donde uno pisa es el lugar donde se manifiesta la presencia de Dios y es un lugar limpio. As¨ª es que pasamos uno por uno y empez¨® a lavarnos los pies, y casi siempre nos dec¨ªa que hab¨ªa sido perdonado nuestro pecado y limpiada nuestra culpa. Porque a veces, aunque te perdonen, te queda esa culpabilidad. ¡®Perdonado tu pecado y limpiada tu culpa¡¯, nos dec¨ªa. A partir de ese d¨ªa, sal¨ªamos al campo descalzos antes de los partidos. Que es lo que yo hago siempre. Fue una promesa. La Biblia nos dice que si salimos descalzos tomamos posesi¨®n del lugar que pisamos para que el Se?or pueda obrar all¨ª. Yo no salgo a caminar descalzo para obtener un resultado deportivo, sino porque s¨¦ que en el momento en que piso el campo descalzo la presencia de Dios est¨¢ all¨ª. Y suceder¨¢ lo que Dios quiera.
P. ?Usted c¨®mo percibe la voluntad divina?
Jug¨¢bamos un domingo y nos encontramos con Sandra un s¨¢bado. Lo primero que hizo fue lavarnos los pies: como Jesucristo lav¨® lo pies a sus disc¨ªpulos. Fue una cosa loca. Pero ganamos siete partidos seguidos
R. En el Calder¨®n habr¨ªa sido injusto perder por un penalti inexistente en el minuto 91. Luchamos 90 minutos, en el 91 nos pitaron un penalti que no era, y Gameiro hizo el 1-0. ?Incre¨ªble! Yo estaba convencido de que la justicia de Dios est¨¢ all¨ª. Por eso pude entender que empat¨¢ramos en el minuto 94 con un gol que sali¨® de la nada. Ah¨ª veo que se hace la voluntad de Dios.
P. ?Piensa caminar descalzo en todos los campos de la Liga?
R. Todos. Yo camino la casa donde vivo. Camino todos los lugares a los que voy por primera vez. Mendizorroza, antes de que fu¨¦ramos a jugar, lo camin¨¦ descalzo. No lo invent¨¦ yo sino la Biblia, que se escribi¨® hace miles de a?os y sigue vigente. El mensaje es que, pase lo que pase, en el lugar que pises descalzo, jam¨¢s quedar¨¢s en verg¨¹enza.
P. Al Alav¨¦s solo le han metido un gol de penalti y otro de c¨®rner en las tres primeras jornadas. Son sus primeros partidos en Europa y ya ha frustrado a algunos de los jugadores que han hecho historia en el f¨²tbol espa?ol en los ¨²ltimos a?os: Neymar, Messi, Arda, Iniesta, Torres¡ El ¨²nico que lo pudo regatear con ¨¦xito fue Messi.
R. Recuerdo la acci¨®n. Yo fui hacia ¨¦l. Ya est¨¢bamos en el borde del ¨¢rea y me toc¨® ir a buscarlo. Y ah¨ª es cuando cualquier jugador queda m¨¢s expuesto. Porque cuando vas hacia ellos, con un movimiento te superan. En cambio, cuando son ellos los que tienen que venir hacia ti, te puedes hacer m¨¢s fuerte. Quiz¨¢s todo el partido contra el Bar?a fue as¨ª: esper¨¢bamos y ellos ten¨ªan que venir. Pero cuando tienes que salir y dejar espacios a tu espalda, con esos cracks es muy dif¨ªcil. De cinco, cuatro veces se te van a ir.
P. ?C¨®mo enga?a Messi? ?Con el cuerpo o con el pie?
R. Por m¨¢s que uno est¨¦ pendiente del bal¨®n¡ Porque el objetivo no es Messi sino poder quitarle el bal¨®n¡ ?l hace un movimiento con su cuerpo hacia un lado pero tiene la habilidad de decidir en el ¨²ltimo instante si se lleva el bal¨®n para un lado o lo empuja hacia el otro. Por su estatura, el cambio de direcci¨®n es m¨¢s r¨¢pido. Y los que somos un poco m¨¢s altos esos movimientos nos suponen una dificultad a?adida.
Mi objetivo es ganar la Liga con el Alav¨¦s. Dicen que estoy loco. A veces hacen falta locos para que se cumplan las cosas
P. ?Est¨¢ satisfecho con su adaptaci¨®n al juego en Europa?
R. Me est¨¢ costando adaptarme a la velocidad. Aqu¨ª el bal¨®n es m¨¢s liviano, el juego es m¨¢s din¨¢mico, los jugadores son m¨¢s r¨¢pidos. All¨¢ es m¨¢s pausado. Lo mejor para el futbolista es entrar al partido concentrado pero tranquilo. No con esa presi¨®n de estar pendiente de d¨®nde puedes equivocarte, de qu¨¦ es lo que puedes hacer mal. Cuando sales al campo suelto, tu juego es m¨¢s productivo y m¨¢s vistoso. Yo, por ahora, estoy con esa tensi¨®n. Debo pensar en no equivocarme.
P. ?D¨®nde es m¨¢s f¨ªsico el f¨²tbol?
R. En Sudam¨¦rica hay mucho m¨¢s contacto. En el bal¨®n parado te pegan por todos lados. Hay m¨¢s fricci¨®n. Aqu¨ª es la t¨¦cnica sobre la velocidad. La precisi¨®n es superior. Se juega m¨¢s al pie porque las canchas son muy r¨¢pidas y si das el pase al espacio, el bal¨®n se te puede ir lejos. Hay que ganar esa sensibilidad en el pase. All¨¢ las canchas son m¨¢s secas, el c¨¦sped es m¨¢s alto, y puedes darle m¨¢s duro al bal¨®n porque se frena. Aqu¨ª lo tocas y se te va.
P. ?Se ha propuesto alguna meta esta temporada?
R. Donde quiera que yo vaya tengo dos objetivos: llevar la palabra de Dios y pelear por lo que yo juego. Aqu¨ª jugamos por la Liga y la Copa del Rey y yo quiero los dos t¨ªtulos. Yo juego por ser campe¨®n de Liga y de Copa con el Alav¨¦s. Decir que jugamos por la permanencia es como caminar de espaldas: si no miras hacia adelante te tropiezas con los obst¨¢culos. Dicen que estoy loco. A veces hacen falta locos para que se cumplan las cosas. Yo en 2012 necesit¨¦ de una loca. La loca era la se?ora Sandra. ?Qui¨¦n iba a creer que una cosa as¨ª suceder¨ªa? A partir de ah¨ª Santa Fe gan¨® cinco t¨ªtulos consecutivos. No nos par¨® nadie. Este verano me convocaron para la selecci¨®n de Colombia y fuimos a la Copa Am¨¦rica de Estados Unidos y quedamos terceros, el mejor puesto de nuestra historia. Ahora estoy jugando en la Liga espa?ola y le hemos ganado al Barcelona en el Camp Nou.
P. ?Qui¨¦n quer¨ªa ser de peque?o?
R. Siempre quise ser volante central. Hoy en d¨ªa me gusta el trabajo de Sergio Busquets, tan silencioso y efectivo. Pero cuando era muy joven me encontraba a los jugadores famosos y dec¨ªa: ¡®Yo no voy a pedirle fotos; m¨¢s adelante ellos me pedir¨¢n una foto a m¨ª¡¯.
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