Otra prueba de dominio para el Atl¨¦tico en Rostov

El retraso de m¨¢s de una hora con el que avi¨®n que el lunes trasladaba al Atl¨¦tico a Rostov gener¨® distendidos corrillos en la sala de embarque de la terminal tres de Barajas. El malestar de Simeone y de su cuerpo t¨¦cnico por la demora, se entremezcl¨® con algunas conversaciones en las que predominaba esa versi¨®n del Atl¨¦tico m¨¢s ofensiva desde la posici¨®n de Koke en el medio y la entrada en el once de Carrasco. En la sala de prensa del estadio Olimpic 2 de Rostov la tem¨¢tica se repiti¨®.

?Simeone volvi¨® a emerger como ese entrenador con capacidad para mutar de piel y de libreto que detesta tanto que le califiquen de ser un entrenador defensivo u ofensivo. ¡°Si me tengo que guiar por la forma de los jugadores tendr¨ªa que jugar con 14. Yo voy detr¨¢s de lo que necesita el partido, la situaci¨®n del juego que nos conviene por las caracter¨ªsticas de los futbolistas. No me autopresiono con nadie. No tengo compromiso con la forma de jugar, ni de atacar, ni de defender, lo que ¨²nico que me importa es ganar¡±, asever¨® el t¨¦cnico.

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Carrasco se engancha al Atl¨¦tico

El paso adelante de Simeone

M¨¢s all¨¢ de sus gustos, la trayectoria de Simeone como entrenador tiene un antes y despu¨¦s de su paso por los banquillos de Italia. En sus inicios, en Argentina, fue hasta un entrenador alocado en ataque. Ten¨ªa brotes impulsivos que, a veces, le llevaban a poblar de delanteros al Racing de Avellaneda o al River Plate. Los rigores y el tacticismo del calcio le ayudaron a controlar esos impulsos. Ahora que el Atl¨¦tico est¨¢ siendo se?alado como un equipo que ha sabido evolucionar hacia un juego m¨¢s abierto a Simeone le incomoda que le tachen de novato en el arte de atacar o de que su equipo sea protagonista desde el bal¨®n y desde los espacios. Siempre defendi¨® que jug¨® seg¨²n el perfil de los jugadores que ten¨ªa bajo sus ¨®rdenes. Alguna vez se rebel¨® manifestando que c¨®mo no le iba a gustar que el Atl¨¦tico tuviera el manejo de bal¨®n que muestra en este inicio de curso.

En el fondo de la cuesti¨®n y de la discusi¨®n est¨¢ si debi¨® dar ese giro antes en momentos puntuales. En el Bernab¨¦u en los cuartos de final de la Champions de hace dos temporadas, en la final de Mil¨¢n o, desde el inicio, en los dos primeros partidos de esta campa?a ante el Alav¨¦s y el Legan¨¦s. En Rostov, con un campo peque?o y ruidoso, un c¨¦sped regular y un equipo que juega con tres centrales, deja pocos espacios y f¨ªa su suerte ofensiva al contragolpe, a este Atl¨¦tico m¨¢s suelto le espera otra prueba de posesi¨®n y dominio. ¡°Es un rival peligroso. Cuando encuentras equipos que juegan a algo muy definido los partidos son complicados. El Rostov tiene claro a qu¨¦ juega, tiene una segunda pelota muy trabajada y, al perderla, tiene un repliegue r¨¢pido a zonas defensivas, donde se agrupan cerca del ¨¢rea y se sienten c¨®modos por la altura de sus centrales¡±, analiz¨® Simeone.

Sin perder la esencia

Las estad¨ªsticas reflejan esa evoluci¨®n del Atl¨¦tico a equipo dominador desde la pelota sin perder la esencia de ocupar muy bien los espacios y correr tanto o m¨¢s que el contrario. Este Atl¨¦tico m¨¢s alegre que hoy celebra su hinchada es el que mayor promedio de posesi¨®n de bal¨®n presenta con un 55%. En las cuatro temporadas completas previas a esta, nunca pas¨® del 49%. Ahora, por tendencia de los rivales a esperarle atr¨¢s, Simeone ha tenido que evolucionar hacia un f¨²tbol m¨¢s elaborado en el que la media de pases tambi¨¦n se ha incrementado. La evoluci¨®n creciente va de los 382 de la temporada 12-13, a los 514 de la actual. Nadie como Koke refleja esa realidad evolutiva desde su cambio de posici¨®n. Ha pasado de los 41 pases por partido de la campa?a 12-13 a los 81 de esta. Por entonces, cuando se le preguntaba por la posesi¨®n Simeone argumentaba que en los partidos en los que el rival ten¨ªa m¨¢s la pelota sol¨ªa coincidir con las victorias de su equipo.

En esa metamorfosis, con m¨¢s bal¨®n, los n¨²meros tambi¨¦n dicen que el Atl¨¦tico es el segundo equipo m¨¢s goleador de la Liga con 21 tantos; que remata m¨¢s que nunca, 17 disparos por partido frente a medias que nunca superaron los 13 remates; y que los tres goles que ha encajado son el mejor registro de la era Simeone en las ocho primeras jornadas del campeonato dom¨¦stico.

Tanto Simeone como sus jugadores prefieren etiquetarse como un equipo redondo y completo, capaz de jugar a dominar y a ser dominado, de atacar elaborando m¨¢s o contragolpeando. ¡°Somos un equipo que sabe jugar en todas las situaciones, con futbolistas muy inteligentes para poder cambiar de juego en cada partido¡±, concluye Gait¨¢n.