Cuando Donald Trump premi¨® a un ciclista mexicano

¡°Donald Trump me dio el premio en persona, s¨ª. Fue en Boston, donde termin¨® la ¨²ltima etapa, pero con todo y con que fuera el creador de una carrera ciclista yo no le votar¨ªa para presidente, yo votar¨ªa a Hillary Clinton¡±. A Ra¨²l Alcal¨¢, el mejor ciclista mexicano de la historia, Donald Trump le entreg¨® en persona un cheque de 50.000 d¨®lares, como ganado de una de sus ideas de grandeza que no dur¨® m¨¢s de dos a?os, el llamado, por supuesto, Tour de Trump.

¡°Fue una carrera muy dura¡±, recuerda por tel¨¦fono Alcal¨¢ desde Monterrey, donde naci¨® en 1964 y donde sigue viviendo. ¡°Fueron 13 etapas por el Este, por recorridos pintorescos, con muy mal tiempo y monta?a dura. Hab¨ªa muchos espectadores, y bandas de m¨²sica en las cunetas. Mucha animaci¨®n y muy buena organizaci¨®n. Y Trump estaba en todo¡±. Habla Alcal¨¢ del Tour de Trump de 1990, la segunda y ¨²ltima edici¨®n de la carrera. ¡°Lo llam¨® as¨ª porque solo quer¨ªa hacer publicidad de s¨ª mismo¡±, dice el ciclista mexicano, un coet¨¢neo de Miguel Indurain, que, corriendo en el equipo holand¨¦s PDM, aquel a?o qued¨® octavo del Tour de Francia y gan¨® una etapa, repitiendo sus resultados de 1989. ¡°A todo le pon¨ªa su nombre, a sus hoteles, sus rascacielos, sus casinos, hasta a su yate, que atrac¨® en el puerto de Baltimore¡±.

Los casinos de Atlantic City y su boardwalk (paseo mar¨ªtimo de tablas de madera: all¨ª, junto al Trump Plaza, termin¨® en 1989 su primer Tour) los promocionaba el candidato llevando a boxear a Myke Tyson. De los cinco millones de d¨®lares que costaba cada a?o la carrera ciclista que bautiz¨®, Trump no aportaba m¨¢s de 250.000 d¨®lares, los premios en met¨¢lico que la convirtieron en la prueba mejor pagada del ciclismo despu¨¦s del Tour de Francia. El nombre de Trump sin embargo, sirvi¨® de im¨¢n para atraer a la cadena NBC y para que participaran, atra¨ªdos por su fama y sus millones, algunos de los mejores equipos del mundo, como el Panasonic o el PDM, aparte del Z con Greg LeMond y el Seven-Eleven de Andy Hampsten, antecesor del Motorola que har¨ªa grande Lance Armstrong. Con ellos compet¨ªa entonces la selecci¨®n amateur de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, con corredores como Viatcheslav Ekimov o Vladislav Bobrik, de rojo y con las siglas CCCP en el maillot.

¡°La llam¨¦ Tour de Trump [con de en el original ingl¨¦s] y no Tour of America porque pienso a lo grande. El otro nombre ser¨ªa minimizar su ambici¨®n¡±, declar¨® por entonces Trump. El millonario habl¨® incluso de futuras ediciones atravesando el pa¨ªs de Nueva York a San Francisco. Una de sus bancarrotas famosas sucedi¨® a su discurso visionario pocas semanas despu¨¦s. El Tour de Trump no volvi¨® a disputarse. La carrera sigui¨® unos a?os m¨¢s tomando el apellido de otro gran magnate estadounidense, el Tour DuPont.

¡°Yo creo en la uni¨®n de los pueblos y en el di¨¢logo y en la buena convivencia¡±, dice Alcal¨¢, que no aprueba en absoluto las ideas desarrolladas por Trump respecto a M¨¦xico y los mexicanos en su campa?a para la presidencia. ¡°No creo ni siquiera que vaya en serio su promesa de construir un muro entre los dos pa¨ªses. ?l mismo si pensara se dar¨ªa cuenta de que Estados Unidos necesita a M¨¦xico, y necesita llevarse bien con nosotros, igual que nosotros les necesitamos a ellos. Yo comenc¨¦ como ciclista profesional en Estados Unidos, en el Seven-Eleven, y all¨ª termin¨¦, cuando ya se llamaba Motorola¡±.

No recuerda Alcal¨¢ si a Trump le sent¨® mal premiar a un ciclista mexicano, como tambi¨¦n hab¨ªa olvidado que cuando logr¨® en San Sebasti¨¢n la victoria en su Cl¨¢sica, quiz¨¢s su mejor triunfo, el ¨²ltimo clasificado, a casi media hora, fue un jovenc¨ªsimo norteamericano que debutaba en el ciclismo profesional llamado Lance Armstrong, otra idealizaci¨®n frustrada del sue?o americano.