Brindis del tridente del Barcelona ante el Athletic de Bilbao
Su¨¢rez, Neymar y Messi, con otro asombroso libre directo, abaten al correoso equipo de Valverde
Vuelven los viejos tiempos en el Camp Nou. El tridente reapareci¨® en la Copa. Un gol por barba de los delanteros del Bar?a sell¨® la sufrida y tambi¨¦n merecida clasificaci¨®n de los azulgrana ante el Athletic. El encuentro de vuelta nada tuvo que ver con la ida de San Mam¨¦s. El de anoche fue un thriller con muy pocas secuencias que valieran la pena despu¨¦s del filme trepidante de Bilbao. Una vez reducida la contienda a una cuesti¨®n psicol¨®gica, a un asunto de espacio-tiempo, no les tembl¨® el pulso a Messi, Luis Su¨¢rez y Neymar.
Aunque el debate sobre la alineaci¨®n se centra siempre en el puesto de volante derecho, demarcaci¨®n de la que se ha ca¨ªdo Rakitic y ayer ocup¨® un inocuo Rafinha, el aficionado del Bar?a no le quita el ojo a las ¨¢reas desde que dejaron de ser el punto fuerte del equipo de Luis Enrique. Necesitan los azulgrana de los goles del tridente porque la defensa concede ocasiones en cada partido, tambi¨¦n en la Copa, una competici¨®n que penaliza m¨¢s los errores que la Liga. Marcaron por fin Luis Su¨¢rez y Neymar y, por supuesto, no falt¨® el gol de falta de Messi, suficiente para compensar el tanto de Saborit y el 2-1 de San Mam¨¦s. El partido qued¨® resumido en los cuatro goles despu¨¦s de un juego muy t¨¢ctico propiciado por el despliegue de equipo de Valverde.
La suplencia de Aduriz no disminuy¨® la presi¨®n del Athletic. Achicaban tan arriba los rojiblancos que la mejor l¨ªnea de pase de los azulgrana fue el pase largo de Cillessen. El plan de Valverde oblig¨® al Bar?a a ser profundo, y especialmente a buscar la mucha cancha habilitada entre la zaga y el portero Gorka. No hab¨ªa un momento para pensar, ni por tanto para controlar ni elaborar, y se impon¨ªa la velocidad punta, circunstancia que dificultaba la posesi¨®n y la precisi¨®n, un terreno que beneficiaba al Athletic, obligado en cualquier caso a sincronizar los movimientos defensivos, a no cometer ning¨²n fallo, a jugar al l¨ªmite en el Camp Nou. La incomodidad barcelonista era tan manifiesta que por un momento pareci¨® que Neymar y Su¨¢rez jugaban juntos por primera vez en el Bar?a.
Muy descoordinados y precipitados, los azulgrana solo contaron una sola ocasi¨®n de gol cuando ya se llevaba media hora, y curiosamente fue un gol mal anulado por un fuera de juego inexistente de Neymar. Asum¨ªa mucho riesgo el Athletic, pendiente del bander¨ªn del linier, y ante la nulidad de la banda derecha azulgrana, empezaron a combinar los futbolistas de la izquierda: Alba, Iniesta y Neymar. La lesi¨®n de Etxeita, sustituido por Elustondo, desestabiliz¨® un poco m¨¢s al Athletic. Ya no perdon¨® el Bar?a en la segunda llegada despu¨¦s de que se conectaran los tres delanteros: Messi abri¨® para Neymar y su centro pasado fue rematado de manera espectacular por Luis Su¨¢rez. Nada mejor que una dura volea cruzada del uruguayo, certero cuando remata de primera, para celebrar el gol 300 del tridente del Bar?a.
Hab¨ªa que ser muy selectivo y certero porque las oportunidades eran m¨ªnimas por la dificultad que ten¨ªa el paciente Messi para conectar con el desmarque vertiginoso que tiraban Neymar y Luis Su¨¢rez. Abatido y moment¨¢neamente eliminado, el Athletic respondi¨® con la entrada de Aduriz mientras Williams se dejaba caer en el costado de Alba. El juego, sin embargo, continu¨® por la banda de Neymar, siempre decisivo contra los vascos, barrido de mala manera por B¨®veda, que se resbal¨® despu¨¦s de un largo cambio de Umtiti. Messi dej¨® que fuera el brasile?o quien transformara con suspense el penalti y se reencontrara con el gol despu¨¦s de una sequ¨ªa que duraba desde octubre cuando la visita del City. Los muchachos de Valverde, sin embargo, empataron en su primer remate a la meta de Cillessen.
Elustondo le gan¨® la carrera a Alba y su centro lo cabece¨® en el segundo palo Saborit. El tanto aturdi¨® al Barcelona y seren¨® al Athletic. El encuentro qued¨® en punto muerto, sin ritmo ni continuidad, a merced de un tiro libre, la suerte preferida de Messi, que igual¨® el registro de Koeman (26) con un nuevo lanzamiento sorprendente para Gorka. Aunque volvi¨® a apuntar al lado del portero, el 10 tir¨® a la base del poste izquierdo del marco del Athletic. No hubo par¨¢bola sino un lanzamiento raso que no parec¨ªa registrado en el amplio repertorio de Messi. La jugada vali¨® para sellar la clasificaci¨®n despu¨¦s de que Luis Enrique sustituyera a Neymar e Iniesta, un signo de que el fin justificaba los medios en la Copa para el Bar?a despu¨¦s de quedar rezagado en la Liga.
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