Ecclestone, fin de una gesti¨®n con claros y oscuros

Nada m¨¢s conocerse el cese de Bernie Ecclestone como CEO del campeonato del mundo de F¨®rmula 1, algunos de los principales actores del Mundial se manifestaron a trav¨¦s de las redes sociales. La mayor¨ªa agradec¨ªa a este hombrecito de pelo blanco nacido en Suffolk (Gran Breta?a) hace 86 a?os la promoci¨®n que ha hecho del certamen, a la vez que aprovechaban la ocasi¨®n para darle la bienvenida a la c¨²pula de Liberty Media, los nuevos propietarios del tinglado, con Chase Carey como cabeza visible de la metamorfosis que se avecina.

A partir de ahora, el hombre que le dio la vuelta a la F-1 pasar¨¢ a un segundo o tercer plano como presidente honor¨ªfico. ¡°Esta es mi posici¨®n en estos momentos, aunque ni siquiera s¨¦ qu¨¦ significa¡±, coment¨® el brit¨¢nico nada m¨¢s conocer la decisi¨®n de los nuevos due?os. ¡°A partir de ahora, mis d¨ªas ser¨¢n bastante m¨¢s tranquilos. Puede que vaya a alguna carrera, todav¨ªa tengo dinero para pagar una entrada¡±, a?adi¨®, tirando de su habitual iron¨ªa. ¡°Bernie ha hecho un mega trabajo, pero el cambio se hab¨ªa retrasado demasiado. Le deseo lo mejor al se?or Carey en su tarea de volver a hacer de nuestro deporte algo incre¨ªble¡±, escrib¨ªa Nico Rosberg en su perfil de Twitter.

Bernie ha hecho un mega trabajo, pero el cambio se hab¨ªa retrasado demasiado Nico Rosberg

El sentir del ¨²ltimo campe¨®n del mundo, que colg¨® el mono a los pocos d¨ªas de levantar el t¨ªtulo, es el m¨¢s generalizado entre aquellos que convergen en el negocio del gran circo. Pilotos, equipos y patrocinadores reconocen la gran labor hecha por Ecclestone a lo largo de las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas. Sin embargo, la obra de gobierno de este ex piloto (finales de los a?os 50), convertido en agente (lo fue de Jochen Rindt) y despu¨¦s en propietario (compr¨® Brabham en 1972) nunca estuvo libre de cierta controversia, b¨¢sicamente por personalista, sectaria y caprichosa.

Estamos hablando de alguien que se hizo con el volante de la F-1 a partir de la comercializaci¨®n de sus derechos de televisi¨®n a finales de la d¨¦cada de los a?os setenta, despu¨¦s de ser una pieza fundamental en la creaci¨®n de la Asociaci¨®n de Constructores de la F-1 (FOCA) y de convertirse en su jefe ejecutivo (1978). Ese cometido fue capital en el litigio que mantuvo con Jean Marie Balestre, el entonces presidente de la Federaci¨®n Internacional del Autom¨®vil (FIA), y que culmin¨® con el conocido como golpe de estado de Ecclestone y de su abogado, Max Mosley, que a?os despu¨¦s (1991) asumir¨ªa el papel de presidente de la FIA. A lo largo de estos 40 a?os, Mr E (as¨ª es c¨®mo se le conoce en el paddock) consigui¨® aglutinar un patrimonio estimado de 3.000 millones de euros, a partir de multitud de operaciones y tejemanejes oscuros, que a punto estuvieron incluso de meterle entre rejas.

He visto la F1 como un espectador, y hay momentos en los que ni siquiera estoy seguro de lo que est¨¢ pasando en la carrera Ross Brawn

Chase Carey, vicepresidente de la 21st Century Fox, tom¨® posesi¨®n de su nuevo puesto el lunes por la noche hora espa?ola. Con ¨¦l reaparece en la escena Ross Brawn, uno de los ingenieros m¨¢s ilustres del campeonato, elemento clave en la resurrecci¨®n de Ferrari a principios de la d¨¦cada de los 2000, fundador de BrawnGP y posterior director de Mercedes. Brawn se encargar¨¢ de la divisi¨®n deportiva, mientras que Sean Bratches liderar¨¢ la comercial. ¡°Consideramos que en los ¨²ltimos cuatro o cinco a?os el no ha sido suficiente, hay mucho m¨¢s potencial¡±, afirm¨® Carey a Sky Sports News.

¡°Necesitamos implementar una nueva organizaci¨®n para lograr que eso ocurra, y para asegurarnos que este deporte hace todo lo posible para llegar a sus aficionados¡±, a?adi¨® el ejecutivo, que tiene la clara intenci¨®n de sacudir la F-1 para adaptarla a los tiempos que corren y liberarle de los cors¨¦s que lleva desde hace ya demasiado tiempo. ¡°Creo que la simplicidad es un objetivo clave para el futuro¡±, opin¨® Brawn ante los micr¨®fonos de BBC 5. ¡°He visto la F1 en los ¨²ltimos a?os como un espectador, y hay momentos en los que ni siquiera estoy seguro de lo que est¨¢ pasando en la carrera¡±, zanjaba el t¨¦cnico.