Traor¨¦, el techo de la Liga que amenaza al Atl¨¦tico

En un esquinazo de la Avenida Pablo Iglesias de Gij¨®n, una fachada roja y blanca y un luminoso con el rostro silueteado de Enrique Castro, Quini, presiden la entrada a lo que podr¨ªa considerarse una suerte de museo del gol. A primera hora de la ma?ana, rodeados de im¨¢genes ilustrativas de la carrera del Brujo, el Sporting es la conversaci¨®n monotem¨¢tica.

En Dquini, nombre del establecimiento gastronomico que regenta Jorge, hijo del legendario goleador del Sporting y del Barcelona, la clientela departe animada sobre la necesidad de que su equipo se imponga hoy (13.00, beIN LaLiga) al Atl¨¦tico. Las conversaciones se trufan de aseveraciones futboleras en las que la decisi¨®n del t¨¦cnico Rubi de prescindir del capell¨¢n antes de los partidos se ha apagado para dar paso, entre otros asuntos, a las esperanzas puestas en Lacina Traor¨¦ (Costa de Marfil, 27 a?os), el techo de la Liga con sus 2,03 metros de altura. ¡°Si metiera la mitad de los goles que este de la foto¡±, advierte un veterano cliente en referencia a Quini, ¡°nos salvamos seguro¡±. La sombra del Brujo sigue siendo alargada para cualquier delantero centro que llega al Sporting. Goleadores reputados como el portugu¨¦s Fernando Gomes, el checo Luhovy o incluso David Villa tuvieron que convivir con el peso de Su Majestad el gol, otro apodo de Quini que se rememora en una de las cristaleras del restaurante.

Traore, al que la flema afilada de parte de la hinchada sportinguista ha bautizado como Tractore, lleg¨® cedido por el M¨®naco en el mercado invernal. Su aterrizaje en Gij¨®n fue complejo. ¡°Cuando preguntamos por ¨¦l, el M¨®naco nos dijo que no estaba a nuestro alcance¡±, relata Nico Rodriguez, director deportivo del club¡±.

Desde que con 20 a?os sali¨® de Abiy¨¢n, su ciudad natal, Traore ha pasado por Ruman¨ªa (Cluj), por Rusia en dos ocasiones (Kuban, Anzhi y CSKA) Francia (dos etapas en el Monaco), e Inglaterra (Everton). Pese a que una lesi¨®n de tibia interrumpi¨® su progresi¨®n, siempre ha tenido buen cartel entre los ojeadores del f¨²tbol europeo. En el Anzhi lleg¨® a cobrar diez millones de euros por temporada. ¡°Pese a su altura, es un jugador t¨¦cnico. No es el t¨ªpico delantero alto que solo va de cabeza. Le gusta participar en el juego¡±, apunta Rodr¨ªguez. ¡°No nos da solo juego a¨¦reo porque peine los balones largos, tambi¨¦n los puede bajar con el pecho y aguantarlos para jugarlos¡±, analiza Sergio, el capit¨¢n. Nico Rodr¨ªguez tambi¨¦n describe a un chico alegre: ¡°Se r¨ªe de todo y con todos. Cuando lleg¨®, lo ¨²nico que le preocupaba era que la casa que eligiera tuviera gimnasio. La primera que vio ten¨ªa y ya no busc¨® m¨¢s¡±.

En el p¨¢rking de Mareo sobresale el oscuro todoterreno alem¨¢n de alta gama que maneja Traore. Los modelos que ofrece el club no son c¨®modos para un conductor de su altura.

Rubi tambi¨¦n trata de buscarle el mejor acomodo posible para convertirlo en el referente ofensivo de un equipo sometido a la presi¨®n de la permanencia en una ciudad muy pasional con el d¨ªa a d¨ªa del club. Permanecer en Primera la pr¨®xima temporada supondr¨ªa un espaldarazo para el proyecto deportivo. Con la deuda de cerca de 40 millones de euros a punto de ser finiquitada, ya est¨¢ provisionada, los ingresos por televisi¨®n ya podr¨ªan ser destinados a fichar con menos restricciones.

El ¨²ltimo partido en Legan¨¦s hay quien lo decribe como el duelo en el que hab¨ªa 50 millones de euros en juego, la cantidad a percibir del contrato televisivo si se logra la permanencia. Esa victoria (0-2) ha acercado al Sporting a dos puntos del rival que marca el descenso y tambi¨¦n ha reanimado a una afici¨®n que ha tirado de Nacha Pop y su Chica de Ayer para espolear a Traor¨¦: ¡°Me asomo a la ventana veo a Lacina Traor¨¦, metiendo muchos goles en mi jard¨ªn. Es demasiado pronto para descender, este a?o nos salvamos s¨ª o s¨ª¡±.