La Juventus castiga la imprudencia del Oporto

La Juventus dej¨® vista para sentencia su eliminatoria ante el Oporto, que necesita un milagro en forma de tres goles en Tur¨ªn para entrar en los cuartos de final. Pen¨® el equipo portugu¨¦s por la imprudencia de su zaguero Alex Telles, que le dej¨® en inferioridad num¨¦rica mediada la primera parte cuando el partido estaba completamente cerrado. Fue ¨¦l quien se lo abri¨® de par en par a la Juventus, que lo madur¨® y lo hizo suyo con dos goles de dos futbolistas que acababan de entrar de refresco. La cita en O Dragao sirvi¨® tambi¨¦n para engrosar el hist¨®rico de enfrentamientos entre dos mitos del f¨²tbol mundial, Casillas y Buffon. Se han cruzado en 17 ocasiones, en seis venci¨® el espa?ol, en otras seis acabaron en tablas y la de Oporto fue la quinta en la que triunf¨® el italiano. La ventaja del portero madrile?o se labra en los partidos con la selecci¨®n porque las tres veces anteriores que se cruzaron en eliminatorias la victoria final siempre fue para el meta juventino. Y parece que habr¨¢ una cuarta.

El Oporto ten¨ªa un plan: forzar cerca de la meta de Buffon el error de la Juventus en el manejo y responder. Todo le cambi¨® en el ecuador tras un rapto de furia de su lateral zurdo Alex Telles, que se pas¨® de frenada en dos acciones pr¨¢cticamente consecutivas. En la primera le pis¨® con estr¨¦pito el tobillo a Cuadrado, en la segunda arroll¨® a Lichsteiner. Fueron dos falta alevosas en acciones sin peligro para su meta, dos justas amonestaciones y un problema para su equipo, que se aboc¨® al repliegue cuando no iba ni media hora de partido. Nuno retir¨® del campo a Andr¨¦ Silva, un delantero, para cuadrar la zaga con el mexicano Lay¨²n. El partido tom¨® una ¨²nica direcci¨®n, la de la meta de Casillas.

La Juventus se encontr¨® entonces ante una oportunidad para encarrilar la eliminatoria. Siempre mostr¨® la intenci¨®n de jugar desde atr¨¢s y de mover al rival con la circulaci¨®n. Pero esta fue casi siempre premiosa. En superioridad num¨¦rica esa lentitud se acentu¨® porque el Oporto cogi¨® el cerrojo y tap¨® espacios. Sin noticias hasta entonces de Buffon o Casillas, empez¨® a barruntarse que el primero iba a ser espectador y el segundo tendr¨ªa trabajo. Tuvo que estirarse el madrile?o en los ¨²ltimos instantes de la primera parte. Un remate de Higua¨ªn que rebot¨® en el central Felipe puso a prueba sus reflejos, por lo que se vio en perfecto estado de revista. Y justo antes del descanso no lleg¨® a tocar un disparo de Dybala desde la frontal que se estrell¨® en el palo.

Dybala era el factor diferencial, el futbolista que le daba colmillo en un partido romo sin apenas ritmo, pero de desgaste, muy exigente para el Oporto. Lo madur¨® la Juventus, que lleg¨® al gol con Pjaca y Dani Alves, que acababan de salir al campo, en una de esas maniobras que dejan en buen lugar al t¨¦cnico, en este caso a Massimiliano Allegri.