Del Bernab¨¦u al mundo, Messi copa el cl¨¢sico ante el Real Madrid
El delantero del Barcelona, que espera la renovaci¨®n de su contrato, recibe elogios a granel tras su doblete ante el equipo de Zidane
Si la imagen ante el PSG, subido a una valla publicitaria en el Gol Nord del Camp Nou, con el pu?o en alto, en modo guerrero para celebrar el triunfo ¨¦pico ante el equipo parisino dio la vuelta al mundo, la fotograf¨ªa de Messi en el Bernab¨¦u, con la camiseta en las manos y ense?ando el n¨²mero 10 a la grada, cobra un valor simb¨®lico m¨¢s relevante. Por el lugar, por el rival y por el partido que acaba de firmar el argentino. Ante el equipo de Emery, se habl¨® m¨¢s de Messi por el retrato que por su juego. Este domingo no hay dudas, la foto del 10 es tan memorable como su partido. Ahuyent¨® los fantasmas de que ya no comparec¨ªa en los partidos grandes y dej¨® a Chamart¨ªn en llamas. Una vez m¨¢s, ning¨²n jugador ha coleccionado tantos goles como ¨¦l en la casa del Madrid. Suma 14, 23 en los cl¨¢sicos.
En 2005, cuando el nombre Messi era an¨®nimo en el mundo del f¨²tbol, Leo rompi¨® su cascar¨®n ante la Juventus de Capello. ¡°?Qui¨¦n es ese peque?o diablo?¡±, pregunt¨® en la sala de prensa del Camp Nou. Era el d¨ªa del Torneo Gamper. Este domingo de Sant Jordi, tan representativo para Catalu?a como maldecido para el Bar?a (un 23 de abril de 1975 el Bar?a cae las semifinales de su primera Copa de Europa, en 2002 el Madrid conquist¨® el Camp Nou en las semis de la Champions y en 2013 el Bayern aplast¨® al Bar?a 4-0), Messi rompi¨® todas las brujer¨ªas. Y, de nuevo, Capello, se rindi¨® ante el 10. ¡°Ronaldo es un gran goleador. Pero Messi es un genio y los genios hacen otra cosa. Es el mejor de todos los tiempos, no hay duda de eso y cr¨¦eme que he visto f¨²tbol¡±, dijo el italiano tras el cl¨¢sico.
Messi quer¨ªa su partido, amagaba en las ¨²ltimas grandes citas con aparecer pero, al final, todo se quedaba en una tentativa. Este domingo no hubo forma de parar al rosarino, el 10 volvi¨® al callej¨®n del enganche y ni la jaula de camisetas del Madrid ni las tarascadas (recibi¨® seis, hizo amonestar a Kovacic y Casemiro y expulsar a Sergio Ramos) lo detuvieron. Estaba fino en la gambeta, logr¨® siete regates de los 11 que intent¨®, acert¨® en el tiro (dos de seis) y fue vertical en los pases: no jug¨® nunca para atr¨¢s y 18 de los 34 pases que complet¨® con ¨¦xito fueron para buscar a sus compa?eros de ataque. La prensa del mundo se rindi¨® ante el partido de Messi. ¡°Lo gan¨® solo¡±, titul¨® el diario argentino Ol¨¦. ¡°Reverencia¡±, subray¨® el medio brasile?o Globoesporte. ¡°Messi noquea al Real¡±, entendi¨® L??quipe. Y La Gazzetta dello Sport record¨® lo que estaba en juego: ¡°Messi abate al Real y el Bar?a reabre la Liga¡±.
A la espera de firmar su nuevo contrato y, sobre todo, de que el club dise?e un proyecto deportivo tentador, Messi manda un mensaje. Lo hace con lo que sabe (goles) y en el lugar que m¨¢s le gusta (el Bernab¨¦u).
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