El Real Madrid se apunta el primer asalto ante Unicaja gracias a la pasi¨®n de Llull

El desenlace de la temporada para el Real Madrid de baloncesto depender¨¢, fundamentalmente, de lo que le duren las fuerzas a Sergio Llull. En su mejor a?o como profesional, el icono y l¨ªder del conjunto de Laso volvi¨® a decantar otro partido a base de pasi¨®n y acierto. En el primer partido de las semifinales de la Liga Endesa sucumbi¨® Unicaja a los 28 puntos (14 en los ¨²ltimos nueve minutos) y las seis asistencias del base madridista, de nuevo iluminado en los instantes decisivos. El car¨¢cter del menorqu¨ªn y de Andr¨¦s Nocioni fue el argumento principal de los blancos para poner el 1-0 ante un rival aplicado y correoso.

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Comenz¨® el¨¦ctrica la semifinal con un primer cuarto intenso en el juego, err¨¢tico en el tiro y fugaz en la sensaci¨®n. Al ritmo que marcaba Jamar Smith, se present¨® Unicaja con un prometedor parcial de 6-12 en cuatro minutos; pero marc¨® territorio el Madrid inmediatamente con las revoluciones de Llull, el car¨¢cter de Nocioni y los puntos de Ay¨®n (20-16, m. 10). Se destemplaron los visitantes en el baile de rotaciones y aprovech¨® el equipo de Laso para afilar el colmillo. Casi siempre con El Chapu como ariete llegaron los mejores minutos madridistas aprovechando el dominio en el rebote (23-14 al descanso; 39-37 al final) y la iniciativa al contraataque (36-23, m. 16). Esa ¡°identidad¡± que ped¨ªa recuperar Carroll a los suyos en los mensajes que se lanzaron en la v¨ªspera. Apenas Llull despej¨® las dudas. Tard¨® en encontrarle el pulso al partido Unicaja y solo cuando Alberto D¨ªaz rompi¨® a sudar lograron los de Plaza contener la embestida local y ajustar el marcador (38-34, m. 20).

La victoria en el primer asalto ten¨ªa un valor estrat¨¦gico para el Madrid seg¨²n evidencia su enciclopedia. En las 16 ¨²ltimas eliminatorias de playoff los blancos vencieron en el estreno de la serie y se apuntaron el cruce. En el hist¨®rico de la era ACB, 27 triunfos y solo tres derrotas madridistas tras ganar el primer partido; y un balance de tres victorias y 14 derrotas en las 17 eliminatorias en las que cayeron en el primer episodio. Nunca falt¨® el Madrid en la final en los cinco a?os en el banquillo de Laso. No supera Unicaja una ronda de semifinales desde la temporada 2005-2006, aquella que desemboc¨® en su primer y ¨²nico t¨ªtulo liguero tras ganar 3-0 al TAU en la final.

Era la reedici¨®n de un duelo cl¨¢sico de la Liga con pocos precedentes en eliminatorias. Era un mano a mano entre dos biorritmos alterados por su aventura europea. Los blancos, hastiados por otro viaje en balde a la Final Four; los verdes, catapultados por su heroico triunfo en la Eurocup ante el Valencia. ¡°No somos el t¨ªpico estudiante que deja todo para ¨²ltima hora¡±, explic¨® Laso en la previa al tiempo que recopilaba achaques. ¡°El triunfo en Europa nos ha hecho perder el miedo a cualquier rival a la hora de competir de t¨² a t¨²¡±, ambicionaba Plaza. Diferentes lenguajes corporales para afrontar la misi¨®n y distinto cuentakil¨®metros para los contendientes: 75 partidos en las piernas de los jugadores del Madrid por 58 en los de Unicaja.

Confiado en su resistencia y dispuesto a explorar los m¨¢rgenes de la fatiga rival, Unicaja se lanz¨® a por la victoria a la vuelta de la caseta. Subidos a los hombros de Omic y agarrados a la agitaci¨®n de Eyenga, Brooks y Lafayette, los verdes firmaron un parcial de 2-9 que retrat¨® la irregularidad madridista (40-43, m. 24). Volvieron entonces Llull y Ay¨®n para enderezar a los suyos. Lo consiguieron a medias porque a Unicaja le bastaba con la aplicaci¨®n colectiva, los rebotes de Dani D¨ªez y alg¨²n fogonazo de Nedovic para mantener el marcador en un pa?uelo (54-54, m. 31). Sin embargo, ajeno a pizarras e inercias, Llull se volvi¨® a citar con la ¨¦pica y desat¨® otra de sus tormentas con ocho puntos consecutivos en dos minutos que dejaron tiritando al equipo malague?o (62-54, m. 33). Un tap¨®n monumental de Nocioni a Omic y otra canasta parab¨®lica de Llull terminaron de desatar a los parroquianos del Palacio. El Madrid puso el 1-0 en la semifinal; el viernes, en el mismo escenario y a la misma hora, el segundo asalto.