El Tenerife tira de orgullo y toma ventaja ante el Getafe

El Tenerife?rompi¨® los pron¨®sticos y se impuso en la ida de la final del ascenso ante el Getafe. Un triunfo basado en el orden y el empuje de un equipo que pas¨® por encima del Getafe en la primera mitad y que supo vivir muy bien de las rentas despu¨¦s del gol de Jorge S¨¢enz. Un Tenerife todo coraz¨®n, que supli¨® su te¨®rica desventaja t¨¦cnica ante un rival con m¨¢s talento gracias a su orden y una defensa impecable. El esfuerzo de los canarios fue encomiable, tanto, que sorprendi¨® a un rival que se durmi¨® en los laureles. La vuelta de la final, el pr¨®ximo s¨¢bado, promete. Ser¨¢ un partido intenso, en el que parte con ventaja este buen Tenerife, que est¨¢ creciendo a medida que avanzan estas eliminatorias por el ascenso. El gol del central Jorge, el primero de su carrera con el conjunto isle?o, valdr¨¢ su peso en oro. El Getafe nunca encontr¨® a sus jugadores importantes, anulados por la intensidad de sus rivales.

El f¨²tbol, sin duda, ofrece par¨¢metros sorprendentes. El Tenerife ve¨ªa de jugar una pr¨®rroga ag¨®nica ante el C¨¢diz un d¨ªa despu¨¦s de que el Getafe?eliminara al Huesca de manera mucho m¨¢s c¨®moda. Cuando todo apuntaba a un conjunto madrile?o mucho m¨¢s fresco que su rival, el equipo de Mart¨ª se desboc¨® en un primer tiempo realmente primoroso. La excelencia del Tenerife no radic¨® en el aspecto t¨¦cnico. M¨¢s bien en un esfuerzo impresionante que neutraliz¨® al Getafe, en apariencia el favorito, con m¨¢s talento en sus filas. Con motivaci¨®n y garra, asido a un gran Santana, puro coraz¨®n tinerfe?o, los canarios le dieron un soberano repaso a los de Bordal¨¢s, que no se lo cre¨ªa en la banda. Con Aitor Sanz due?o del centro del campo, todos los intentos del Getafe por combinar y llevar el mando del choque fueron neutralizados. A su magn¨ªfico juego de contenci¨®n, el Tenerife sum¨® r¨¢pidos contragolpes y un punto de anticipaci¨®n que desbordaron a su rival. A los 21 minutos, el prometedor central Jorge S¨¢ez se fue de la marca de Faurl¨ªn y marc¨® de cabeza a la salida de un saque de esquina. Un error imperdonable de la zaga del Getafe en un partido tan importante.

Bien asentado atr¨¢s y en busca del veloz Amath, el partido se le hab¨ªa puesto muy de cara al Tenerife. El Getafe, descolorido, sin el bal¨®n y lleno de dudas, estaba condenado a reaccionar, quiz¨¢s ayudado por el previsible desplome f¨ªsico de los locales. Jugar 90 minutos con la intensidad de los primeros 45 se antojaba como un reto muy complicado.

As¨ª se vio nada m¨¢s comenzar la segunda mitad. El Getafe dio un paso adelante, Portillo encontr¨® huecos con el bal¨®n y el Tenerife, aunque se defendi¨® bien, se vio m¨¢s dominado y metido atr¨¢s. El dominio, no obstante, fue mucho m¨¢s aparente que real. Los de Mart¨ª se defendieron con un orden exquisito e incluso lanzaron alg¨²n que otro contragolpe con mucho peligro, como en una jugada de Lozano que sac¨® muy bien Guaita y otra internada de Suso que no supo rematar el japon¨¦s Gaku. En el desarrollo del partido, adem¨¢s, las malas noticias se fueron acumulando en el equipo madrile?o. Por ejemplo, la amarilla a Portillo, que le impedir¨¢ jugar la vuelta de la final, o la lesi¨®n de Cala, tocado muscularmente y sacado del campo entre grandes gestos de dolor. Menos favorito que antes de esta ida de la final, el Getafe tendr¨¢ que mejorar mucho para superar a este Tenerife tan ordenado y combativo, confeccionado a imagen y semejanza de su entrenador, Mart¨ª. Un t¨¦cnico que puede dejar en Primera a un equipo que siempre fue muy especial para ¨¦l en su carrera deportiva.