La Audiencia Nacional torpedea la ley antidopaje
Marta Dom¨ªnguez vuelve a ser deportista de alto nivel tras una sentencia del tribunal
Cualquier deportista de cualquier pa¨ªs sancionado por dopaje por un laudo del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), de Lausana, podr¨ªa entrenar o competir en Espa?a y no ser castigado por ello. El jurista Alberto Palomar llama a esta circunstancia ¡°el gran agujero de la ley antidopaje espa?ola¡± y una sentencia de la Audiencia Nacional lo ha puesto de manifiesto. En este sentido, tambi¨¦n, Espa?a es diferente de los pa¨ªses de su entorno. Y Marta Dom¨ªnguez, de 42 a?os, tiene derecho a seguir benefici¨¢ndose hasta junio de 2018 de su inclusi¨®n en la lista de deportistas de alto nivel pese a estar sancionada por dopaje hasta octubre pr¨®ximo.
En enero de 2016, dos meses despu¨¦s de que el TAS la suspendiera tres a?os, el Consejo Superior de Deportes (CSD) retir¨® la condici¨®n de deportista de alto nivel a Dom¨ªnguez. Aplicaba as¨ª, a petici¨®n de la federaci¨®n espa?ola de atletismo, el reglamento que excluye de los beneficios de tal condici¨®n (exenciones fiscales, privilegios para acceder a la universidad, puntos extra en las oposiciones a funcionaria del Estado, al Ej¨¦rcito y a la Polic¨ªa y derecho a afiliarse a la Seguridad Social como aut¨®noma especial) a los deportistas sancionados por dopaje ¡°con car¨¢cter firme en v¨ªa administrativa¡±.
De acuerdo, dijo Dom¨ªnguez en su recurso a la Audiencia Nacional, pero, seg¨²n la ley antidopaje espa?ola, para que una sanci¨®n impuesta a un deportista de nivel internacional mediante un laudo como los del TAS ¡°sea definitiva en v¨ªa administrativa¡± deber¨ªa ser reconocida en Espa?a por la agencia antidopaje (AEPSAD) siguiendo lo dispuesto en la Ley de Enjuiciamiento Civil, lo que no ha ocurrido en su caso.
La Secci¨®n Sexta de lo contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional ha atendido a sus razones y ha ordenado que se le reintegre en la lista.
Fuentes del CSD, el organismo que decide qu¨¦ deportistas son de alto nivel, han asegurado que no la reintegrar¨¢n a la lista, sino que cumplir¨¢n con la ley. ¡°La AEPSAD reconocer¨¢ el laudo y la sanci¨®n del TAS, certificar¨¢ que est¨¢ puesta acorde al C¨®digo Mundial Antidopaje, como exige la ley, y asunto concluido¡±, explican.
¡°Pero eso no es tan sencillo¡±, se?ala Palomar. ¡°Para convertirse en un acto administrativo, la ratificaci¨®n de la AEPSAD deber¨ªa contar con el tr¨¢mite de audiencia a la deportista, y esta contar¨ªa con el derecho a recurrir a un tribunal de lo contencioso-administrativo... Todo el problema nace de una mala ley, que determina que los deportistas de nivel internacional est¨¢n sometidos a las normas de sus federaciones internacionales y de la Agencia Mundial Antidopaje, mientras que los de nivel nacional dependen de la agencia espa?ola. Esto crea un agujero. En la legislaci¨®n antidopaje de ning¨²n otro pa¨ªs cercano se da esta distinci¨®n¡±.
Desde que tiene las competencias sancionadoras, la AEPSAD no ha reconocido ninguna sanci¨®n impuesta por un laudo del TAS, lo que, llevando la sentencia de la Audiencia Nacional a su extremo, significar¨ªa que son sanciones inexistentes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.