Apretaditos todos en la cabeza

¡°No hay d¨ªa sin susto, no hay d¨ªa tranquilo este Tour¡±, dice Froome, que tiene a todos sus rivales en la chepa.

Cuatro en medio minuto; siete en dos minutos. Nunca en los ¨²ltimos a?os hab¨ªan estado tan juntitos los primeros puestos de la general de un Tour que, el martes, despu¨¦s del descanso de este lunes en el Puy, entrar¨¢ en su ¨²ltima semana, la famosa tercera. Los hay que rascan tanto en su memoria para acordarse de un Tour tan abierto y apretado que se van hasta 1968 y cuentan que la v¨ªspera de la contrarreloj final de Par¨ªs, entre los cuatro primeros no hab¨ªa ni un minuto ¡ªel l¨ªder, Herman Van Springel, le sacaba 12s a Gregorio San Miguel, 16s a Jan Janssen, el ganador final, y 58s a Franco Bittosi¡ª, pero un viaje atr¨¢s de solo un a?o, al Tour de 2016 quiz¨¢s baste para intentar entender por qu¨¦ en la grande boucle de 2017, despu¨¦s de 2.650 kil¨®metros, la saturaci¨®n de emociones desbordantes en la mayor¨ªa de las 15 etapas disputadas no se ha traducido en minutos en la general, sino en segundos.

Exceptuando a los ca¨ªdos y retirados (Richie Porte), y no a todos los ca¨ªdos ¡ªDan Martin, el pele¨®n ciclista que eligi¨® ser irland¨¦s despu¨¦s de haber sido campe¨®n juvenil de Inglaterra, qu¨¦ car¨¢cter y temple, perdi¨® m¨¢s de un minuto bajando el Mont du Chat al tropezar con el yaciente Porte, y a¨²n est¨¢ en la general luchando, quinto a un minuto pelado de Chris Froome, y, aunque no puede ni bajarse de la bici sin ayuda por los dolores que sufre en la espalda, no pierde ocasi¨®n y ataca siempre¡ª, solo Nairo Quintana y Alberto Contador, de entre los que se consideraban favoritos en D¨¹sseldorf, cuentan en minutos su desventaja.

Lo mismo ocurr¨ªa hace un a?o justo despu¨¦s del Mont Ventoux. Entre los cuatro primeros en la clasificaci¨®n (Froome, Adam Yates, Nairo a¨²n vivo y Bauke Mollema) la diferencia era de 56s. Y Romain Bardet, que iba quinto, estaba a 1m 15s. En Par¨ªs, Bardet, el segundo, termin¨® a m¨¢s de 4m.

¡°?Por qu¨¦ estamos tan apretados este a?o?¡±, se pregunta Froome. ¡°Por una sola raz¨®n, por el recorrido. No hay etapas de monta?a seguidas, sino salpicadas por todos los macizos de Francia, y con muy pocos finales en alto. No s¨¦, es un Tour diferente, pero ya lo sab¨ªamos y ven¨ªa preparado para ello¡±.

Menos contrarreloj

En 2016, un a?o denso en los Pirineos y m¨¢s a¨²n en los Alpes, y con el Mont Ventoux entre medias, las distancias entre los mejores en las etapas de monta?a se midieron tambi¨¦n en segundos. La mayor diferencia de recorrido entre un a?o y otro es la disminuci¨®n de los kil¨®metros contrarreloj respecto al Tour pasado. Froome dej¨® de estar cercano de todos despu¨¦s de las dos largas contrarreloj casi consecutivas del 2016. Froome sigue cercano en el 2017 porque solo se han disputado 10 kil¨®metros contrarreloj, los del primer d¨ªa de lluvia y ca¨ªda de Valverde en D¨¹sseldorf. Las 14 etapas siguientes, el ingl¨¦s solo ha gestionado avaramente aquellos segundos alemanes a la espera de la contrarreloj del s¨¢bado en Marsella.

¡°Son los dem¨¢s los que tienen que atacarme en los Alpes [jueves, Galibier; viernes, Izoard], porque tienen que recuperar el tiempo que les sacar¨¦ en la contrarreloj¡±, dice el ingl¨¦s, que ya lleva 53 d¨ªas de amarillo y ha superado los 52 de Jacques Anquetil, que gan¨® cinco Tours.

Adem¨¢s de la raz¨®n rom¨¢ntica de que cada vez hay m¨¢s igualdad entre los mejores, como ya se apreci¨® en el pasado Giro, donde las monta?as no separaban a los hombres de los superhombres, la igualdad tan exagerada del Tour del 2017 y del 2016 en la monta?a solo se puede explicar por una causa: porque Froome ya lleva un par de a?os sin marcar diferencias. Y porque los rivales, bloqueados psicol¨®gicamente por el dominio del ingl¨¦s, se olvidan de atacarle.