Al Madrid solo se le resiste Messi

Horario y d¨®nde ver el Barcelona - Real Madrid de la Supercopa de Espa?a

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El Real Madrid campea por Espa?a y por el mundo como el mejor equipo de f¨²tbol y el club de referencia para suerte del evangelizador Florentino P¨¦rez: ¡°La gente es del Madrid o habla del Madrid¡±. Juega seguramente mejor que nadie, tiene registros diferentes, dispone de una plantilla con cerca de 20 titulares y hasta se dir¨ªa que controla el mercado para evitar que alg¨²n adversario se refuerce m¨¢s de la cuenta, dispuesto si hace falta a intervenir porque tiene una econom¨ªa saneada, sus cl¨¢usulas de rescisi¨®n son disuasorias y el t¨¦cnico entrena como jugaba: alrededor de Zidane las cosas se suceden con tanta naturalidad que sus intervenciones son tan selectivas como decisivas, las mejores para una entidad tan grandilocuente como el Madrid.

La trayectoria imperial del equipo blanco, campe¨®n de Liga, de la Champions y de la Supercopa de Europa, exige retos continuos, a poder ser may¨²sculos, ninguno como el sextete, que consiste en ganar las seis competiciones de la temporada 2017-2018, marca que solo Guardiola alcanz¨® en 2009. As¨ª que para mantener las comparaciones entre el Bar?a del hoy t¨¦cnico del City y el Madrid de Zidane se impone ganar la Supercopa de Espa?a, un torneo que por s¨ª solo tendr¨ªa poco valor y que en el litigio Madrid-Bar?a adquiere un tono rimbombante porque adem¨¢s se juega a doble partido: hoy en el Camp Nou y el mi¨¦rcoles en el Bernab¨¦u.

El cl¨¢sico siempre ha sido un acontecimiento ¨²nico en cualquier contexto, a menudo, decisivo por sus repercusiones: el Madrid de Ben¨ªtez se acab¨® despu¨¦s de un 0-4 en el Bernab¨¦u y el equipo de Zidane naci¨® en el Camp Nou a partir de un 1-2. La diferencia principal entre uno y otro equipo fue Casemiro, curiosamente titular con el franc¨¦s y reserva con su valedor espa?ol, hoy entrenador del Newcastle. El partido jugado en el estadio azulgrana fue el punto de partida del despegue del Madrid y el discurrir inmaculado del equipo blanco, tan aclamado que incluso desde ciertos medios y sectores se pide al Bar?a que le rinda honores con el pase¨ªllo. En tanto que campe¨®n europeo, el Madrid solo se ha visto distorsionado y emborronado por Messi, el mismo que despu¨¦s de poner el 2-3 en el ¨²ltimo cl¨¢sico mostr¨® su zamarra azulgrana con el 10 a la hinchada del Bernab¨¦u.

Fuera del mercado

El Bar?a vive de Messi. El equipo necesita un ejercicio de afirmaci¨®n futbol¨ªstica despu¨¦s que el club quedara aturdido por el nocaut de Neymar, cuya salida demuestra que los jugadores y los directivos van en direcciones opuestas si se hace caso a Piqu¨¦. Al Bar?a le ignoran, nadie le hace caso, ni ficha ni despide a futbolistas; solo se sabe que tiene 222 millones que no quer¨ªa, acostumbrado como estaba a marcar el paso en el mercado con fichajes como el de Maradona, Cruyff, Alexanco o Ronaldinho hasta que apareci¨® Messi y La Masia. Hoy dif¨ªcilmente se apuesta por la cantera, se ha perdido pie en el mercado y no se sabe muy bien qu¨¦ es lo que quiere ni le conviene, como si tuviera un ojo de cada color, incapaz de encontrar al centrocampista que le devuelva la pausa, el saber estar y el estilo que representaba Xavi. El PSG y Qatar le amargan la vida al Barcelona.

La sensatez est¨¢ ahora en el banquillo y en Valverde. A la espera de refuerzos, el t¨¦cnico juega con Denis Su¨¢rez o Deulofeu. Una vez deshecho el tridente, el Bar?a contragolpear¨¢ menos y volver¨¢ a sus or¨ªgenes, al equipo como una unidad: las l¨ªneas estar¨¢n m¨¢s juntas, la presi¨®n despu¨¦s de perder la pelota ser¨¢ obligatoria, habr¨¢ mucha intensidad, tocar¨¢ organizarse a trav¨¦s del pase y la suerte depender¨¢ mucho de la felicidad de Messi, autor de 23 goles en 32 partidos contra el Madrid, a pesar de que se le da mucho mejor el Bernab¨¦u que el Camp Nou, donde no marca desde que al Madrid le defend¨ªa Iker Casillas.

Aunque le siguen buscando las vueltas a Keylor Navas, al Madrid le sobran jugadores para enfrentar al Bar?a. La ausencia por sanci¨®n de Modric ser¨¢ cubierta por Kovacic o Isco y puede que tambi¨¦n salgan Theo y Asensio. Cristiano jugar¨¢ un buen rato en un estadio que se le da especialmente bien. El Madrid necesita sus goles para redondear el f¨²tbol precioso de sus centrocampistas, una colecci¨®n de jugadores que en manos de Zidane evoca la ¨¦poca de Guardiola en el Bar?a.

La hinchada madridista pide un marcador de impacto en el Camp Nou, como los que consegu¨ªa el Bar?a en Chamart¨ªn, ahora que nada parece prohibido para el equipo de Zidane. Los aficionados barcelonistas en cambio siguen expectantes, preocupados por la indefinici¨®n del club, despu¨¦s del extrav¨ªo y desorientaci¨®n de la junta, consciente de que no se puede equivocar con los fichajes. La raz¨®n de ser del Bar?a vuelve a estar en ganar al Madrid, ni que sea en un amistoso como el de Miami o en la Supercopa. Los azulgrana hablan de partidos y de Messi mientras los blancos lo hacen de t¨ªtulos y de la obra coral de Zidane. El cl¨¢sico nunca fue un encuentro menor, ni siquiera a mitad de agosto, cuando a¨²n no empez¨® la Liga, todav¨ªa no se ha sorteado la Champions y Neymar alterna Par¨ªs con Saint Tropez.