Fichajes de Estado
Quiz¨¢ cada gol del genial Neymar para el Qatar Saint-Germain sirva para ayudar a los jeques a venderse como algo que no son
¡°El ant¨ªdoto para 50 enemigos es un amigo¡±. Arist¨®teles
Neymar puso el otro d¨ªa en su cuenta de Instagram que el presidente del Barcelona era ¡°un chiste¡±. Quiz¨¢. Pero ¨¦l tambi¨¦n lo es. Es de risa que un jugador de f¨²tbol brasile?o se haya convertido en el instrumento de propaganda de un Gobierno desesperado por pulir su pobre imagen internacional e intentar darle una pizca de brillo a la grotesca decisi¨®n de la FIFA de celebrar el Mundial de 2022 en sus tierras.
Lo cual no significa que deber¨ªamos re¨ªrnos de los catar¨ªes. Queda por ver si la jugada les funcionar¨¢. Quiz¨¢ s¨ª. Quiz¨¢ cada gol del genial Neymar para el Qatar Saint-Germain sirva para ayudar a los jeques a venderse como algo que no son: los due?os de un pa¨ªs alegre, cool, moderno y digno de celebrar un Mundial de f¨²tbol. Puede ser que esos 222 millones gastados en el brasile?o resulten ser la mejor inversi¨®n que Qatar haya hecho jam¨¢s. Otros pa¨ªses con problemas de imagen podr¨ªan incluso plantearse imitar su plan.
Puede ser que esos 222 millones gastados en el brasile?o resulten ser la mejor inversi¨®n que Qatar haya hecho jam¨¢s
El r¨¦gimen de Kim Jong-un en Corea del Norte, por ejemplo. Una vez que hubiese adquirido un club de f¨²tbol, se comprar¨ªa un jugador de renombre mundial. Alguien que encaje con la personalidad del querido l¨ªder pero que a su vez promueva una percepci¨®n de la Rep¨²blica Popular Democr¨¢tica como un pa¨ªs socialista serio y respetable. Lo indicado ser¨ªa un pollo sin cabeza con un misil en el pie izquierdo. A los lectores seguramente se les ocurrir¨¢n propuestas mejores , pero por ahora el que me viene a la mente es Gareth Bale.
El precio del fichaje se podr¨ªa encarecer en el caso de que el presidente Nicol¨¢s Maduro, de Venezuela, entrase en la contienda, pero habr¨ªa otras opciones quiz¨¢ m¨¢s accesibles para pa¨ªses cuya gente se muere de hambre, como por ejemplo Wayne Rooney. Est¨¢ en el oto?o de su carrera , pero su valor reside en que sigue siendo una de las personas m¨¢s famosas del mundo. Su incaducable apetito por la bebida y su noci¨®n de que tiene el derecho se?orial de poseer a cualquier mujer que se le antoje (como volvi¨® a demostrar en una salida nocturna hace unos d¨ªas) ofrecen m¨¢s puntos a favor.
Lo ¨²nico que podr¨ªa inflar el precio de Rooney ser¨ªa que Donald Trump viese en ¨¦l un alma gemela, pero cabe la esperanza, desde el punto de vista del da?o que su bufonesco Gobierno hace a su pa¨ªs, que los mayores que le rodean en la Casa Blanca propongan un jugador, o quiz¨¢ un entrenador, m¨¢s capaz de enderezar el barco del Estado. Jos¨¦ Mourinho ser¨ªa una opci¨®n, aunque entre ¨¦l y Trump siempre se correr¨ªa el peligro de un choque de narcisismos.
?Qui¨¦n m¨¢s? El jugador espejo de la Rusia de Vladimir Putin combinar¨ªa potencia, alardes de grandeza y profunda inseguridad. Nadie mejor que Cristiano Ronaldo. Para Reino Unido, Ars¨¨ne Wenger: est¨¢ tan confundido y perdido como la primera ministra Theresa May , pero al ser franc¨¦s servir¨ªa para transmitir el mensaje oficial, poco cre¨ªble a d¨ªa de hoy, de que los ingleses quieren mucho a los europeos y desean mantener buenas relaciones con el resto del continente. El Gobierno espa?ol de Mariano Rajoy quiz¨¢ no lo sepa, pero su problema de imagen hoy es que la gente de fuera cree que est¨¢ pecando de intransigencia con los catalanes. Si Rajoy tuviera un club de f¨²tbol, y fuera tan listo para las relaciones p¨²blicas como los catar¨ªes, no lo dudar¨ªa: los mejores fichajes de Estado ser¨ªan Pep Guardiola y Gerard Piqu¨¦.
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