Adi¨®s a Feliciano Rivilla, el lateral que atacaba a Gento
Jug¨® 356 partidos con la camiseta del Atl¨¦tico y otros 26 con la selecci¨®n, con la que gan¨® la Eurocopa de 1964
El lunes por la tarde, a los 81 a?os, falleci¨® Feliciano Mu?oz Rivilla (?vila, 1936), considerado el mejor lateral derecho de la historia del Atl¨¦tico de Madrid. Rivilla, titular en la final de la Eurocopa de 1964 en la que Espa?a derrot¨® a Rusia (2-1), fue un lateral moderno en una ¨¦poca en la que los defensas, m¨¢s que jugar, destru¨ªan y marcaban. El galgo de la Toledana, el perif¨¦rico barrio de ?vila en el que se cri¨®, rompi¨® con ese t¨®pico de que el lateral derecho sol¨ªa ser el peor jugador de un equipo, malo t¨¦cnicamente, casi siempre bajito, percher¨®n de piernas y pegador por oficio.
Su evoluci¨®n tiene la misma secuencia que muchos de los laterales ofensivos que se estilan ahora. Empez¨® como extremo en el Real ?vila, luego interior y finalmente acab¨® formando una defensa legendaria en el Atl¨¦tico, con ¨¦l en el flanco derecho, el cacique argentino Griffa en el medio y Calleja en costado izquierdo. De 1958 a 1968, la banda derecha del Atl¨¦tico fue suya durante 357 partidos y conquist¨® una Liga (1966), tres Copas del General¨ªsimo (60, 61 y 65) y una Recopa (1962).
¡°No era muy alto, med¨ªa 1,70 m¨¢s o menos, pero era muy r¨¢pido y muy bueno t¨¦cnicamente. Por entonces, algunos laterales empezaban a apoyar a los medios y Feliciano sub¨ªa mucho¡±, recuerda Adelardo, capit¨¢n hist¨®rico del Atl¨¦tico. Sus duelos con el madridista Paco Gento marcaron una ¨¦poca. Si en la otra banda los envites entre Amancio y Calleja saltaban chispas, los enfrentamientos entre Gento y Rivilla estuvieron marcados por la velocidad de ambos y la deportividad.
¡°Rivilla no era un defensa duro y contra Gento, como es normal, no sub¨ªa tanto, pero le atacaba y hac¨ªa da?o porque los extremos por entonces no persegu¨ªan como ahora a los laterales¡±, prosigue Adelardo.
El extremo madridista siempre admiti¨® la rapidez del rojiblanco, al que muchas veces superaba y al momento se lo volv¨ªa a encontrar delante. ¡°Rivilla era muy r¨¢pido y bueno. Me entend¨ªa bien: sab¨ªa que si me daba metros estaba perdido y que marc¨¢ndome encima no hab¨ªa manera de que pudiera deshacerme de ¨¦l¡±, dec¨ªa Gento en un reportaje para EL PA?S realizado en 2003. ¡°?Qu¨¦ r¨¢pido eras, me cago en...! Me iba de t¨ª y te volv¨ªa a tener delante. Eras el mejor. Ben¨ªtez, el del Bar?a, no era para tanto y Verde, otro del Atleti, era m¨¢s tramposo: te agarraba y te pon¨ªa el culo. T¨² eras un se?or. Tranquilo, pero pesado". Rivilla coincid¨ªa: "Fuimos unos caballeros, no como Amancio y Calleja¡±.
¡°Fue muchas veces internacional (26) para una ¨¦poca en la que no se jugaban tantos partidos. Hab¨ªa que estar muy en forma para ir siempre a la selecci¨®n y ¨¦l siempre lo estaba. Fue al Mundial de Chile y gan¨® la Eurocopa del 64 a Rusia. Fue indiscutible en el Atl¨¦tico y en la selecci¨®n¡±, asegura Adelardo. En la final de la Eurocopa del 64 contra la Rusia de Yashin, particip¨® en el hist¨®rico gol de Marcelino. Metido en campo contrario, Rivilla recibi¨® una apertura de Zoco y dio el pase en profundidad para Chus Pereda, que acab¨® poniendo el centro para Marcelino. ¡°Jug¨® una final impecable, fue de los mejores¡±, dice Adelardo.
Retirado en 1968, un a?o m¨¢s tarde el Atl¨¦tico le concedi¨® un homenaje por todo lo alto al que fue invitado el Santos de Pel¨¦, que se impuso 3-1 ante 50.000 espectadores. Los negocios ocuparon su vida ya fuera del f¨²tbol. Durante a?os pod¨ªa leerse Rivelsa en el cartel de la emblem¨¢tica gasolinera, propiedad suya, situada frente a la estaci¨®n de Atocha.
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