El Atl¨¦tico, mucho mediocentro, poca diversi¨®n

A veces es complejo encontrarle un punto de atracci¨®n a los partidos del Atl¨¦tico, sobre todo hasta que se pone por delante en el marcador. A veces, ni con esas, como este domingo. Gan¨® con un penalti muy discutible y se marc¨® un tost¨®n para olvidar. El equipo transita segundo por la Liga, una posici¨®n noble y meritoria, pero cuesta mucho observarle puntos para el deleite, alg¨²n gramo de virtuosismo que recuerde que en este juego tambi¨¦n existe el placer de un pase filtrado o una cintura suelta y caliente que siente a un defensa. Otro 1-0 con poco para recordar.

En ese once nacido de la precariedad de efectivos, sin Griezman y Diego Costa, solo Correa ten¨ªa la distinci¨®n de los diferentes entre los elegidos por Simeone. Mucho mediocentro, mucha polic¨ªa en el medio, poca diversi¨®n por boca del punk corrosivo de Eskorbuto. La electricidad de los proleg¨®menos de los partidos del Atl¨¦tico se queda varada en la presentaci¨®n del once con el estruendoso Thunderstruck de AC/DC. La tormenta de decibelios de heavy metal da paso a un conjunto espeso y sin chispa. Tan duro de pelar, como duro de ver. Tanto que cada vez escucha con m¨¢s asiduidad los silbidos de la hinchada cuando destila f¨²tbol dormidera como el de ayer. M¨¢s cuando percibe a su equipo sometido y sufridor en los tramos finales contra un conjunto que huele a Segunda Divisi¨®n. La demanda de resultados comienza a equipararse con la del juego.

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Esta vez la previa y la preparaci¨®n del partido pon¨ªan el foco en el ensayo de Koke como mediapunta y en la revisi¨®n de Carlos Isaac, el juvenil y ofensivo lateral derecho. Lo primero dio poco juego, m¨¢s all¨¢ de los intentos de crear una l¨ªnea recta que nac¨ªa en Thomas, pasaba por el propio Koke y pretend¨ªa terminar en Gameiro o Correa. El chico estuvo decente, le falt¨® atrevimiento para encarar cuando se proyect¨® en ataque y pec¨® de fogosidad en una entrada a Muntari que le vali¨® una amarilla. Subir, eso s¨ª, sube con desparpajo.

Con nada de f¨²tbol a lo que agarrarse, cuando el Depor ense?aba el orgullo del equipo que se sabe en el precipicio recibi¨® el mazazo de ese discutible penalti de Mosquera sobre Sa¨²l. Estaba en pleno zarandeo al Atl¨¦tico, deshilachado y hasta vulnerable. Lucas P¨¦rez se hab¨ªa plantado a toda mecha ante Oblak tras un mal despeje de cabeza de Savic. Una vez m¨¢s, la victoria del Atl¨¦tico empez¨® a cimentarse en una acci¨®n salvadora de su portero, esta vez con el pie. Despu¨¦s con una mano voladora a otro disparo cruzado de Lucas P¨¦rez. No se encontraba el Atl¨¦tico, muy previsible sobre todo cuando trataba de agujerear por la banda de Lucas. Una y otra vez la posici¨®n adelantada y est¨¢tica del franc¨¦s romp¨ªa con la sorpresa que debe contener la subida de un lateral. Ah¨ª, estuvo m¨¢s acad¨¦mico Carlos Isaac.

Encontr¨® el gol en esa discutible decisi¨®n del colegiado. Gameiro empotr¨® la pelota en la porter¨ªa de Rub¨¦n sin contemplaciones. Un castigo excesivo para este Depor de Seedorf, que compiti¨® bien y no mereci¨® la derrota. Apret¨® y apuro al Atl¨¦tico cuando pudo y hasta el final. No encontr¨® el equipo de Simeone una contra definitiva ni con Torres y Costa ya en el campo. En realidad no encontr¨® nada. Bueno s¨ª, una carrera poderosa de Lucas para cruzarse y finiquitar una galopada de Borja Valle para citarse con Oblak.

La grada, una vez m¨¢s, tuvo que conformarse con jalear una acci¨®n defensiva de su equipo. Ofensivamente tuvo muy poco de lo que disfrutar. Fue pitar el colegiado y salir zumbando el personal para su casa. Vio ganar a su equipo, pero con tanto mediocentro hay poca diversi¨®n.