Heynckes: ¡°Jam¨¢s vi al Bayern tan fuerte en el Bernab¨¦u¡±
El entrenador alem¨¢n se?ala que su equipo hizo m¨¢s m¨¦ritos que el Madrid para avanzar a la final y resalta la figura del portero Keylor Navas, que hizo ocho paradas
¡°El Bayern fue mejor en los dos partidos¡±, sentenci¨® Toni Kroos, el primer conductor del Madrid, al salir de la ducha, peinado y liberado de la tortura de la eliminatoria; ¡°pero siempre tuve la sensaci¨®n de que estar¨ªamos en la final¡±.
El Bayern abrum¨® al Madrid en el desarrollo del juego. Por el dominio del bal¨®n, de los espacios y de las circunstancias que suelen determinar los resultados. El conjunto alem¨¢n, que cay¨® por un global de 4-3, remat¨® 39 veces por 16 del Madrid en toda la eliminatoria; y el contraste de centros result¨® igual de llamativo, con 26 por seis. Solo las ocho magn¨ªficas paradas que hizo Keylor Navas empujaron a su equipo lejos de la ruina.
Marcelo: ¡°Me da en la mano, es penalti¡±
La moviola volvi¨® a pasearse por el Bernab¨¦u. Antes del descanso, un centro de Kimmich golpe¨® en la mano de Marcelo, al l¨ªmite de la l¨ªnea del ¨¢rea. Ni el ¨¢rbitro ni ninguno de sus asistentes observ¨® la infracci¨®n. ¡°Me da en la mano, s¨ª. Es penalti¡±, admiti¨® tras el encuentro el lateral brasile?o.
El entrenador del Bayern, Heynckes, advirti¨® en la v¨ªspera que su equipo necesitaba un buen arbitraje para pasar de ronda. ¡°Es muy dif¨ªcil pitar una semifinal de la Champions¡±, coment¨® Marcelo, ¡°no hablo de los ¨¢rbitros¡±. En el bando rival, Boateng y Arturo Vidal protestaron en Twitter por el penalti no se?alado y colgaron sendas fotos a modo de prueba documental.
Jupp Heynckes se admir¨® ante la actuaci¨®n del guardameta costarricense. ¡°Ha estado incre¨ªble¡±, dijo; ¡°el Madrid puede darle las gracias. Para m¨ª ha sido el mejor de su equipo¡±.
El entrenador del Bayern pidi¨® un arbitraje objetivo antes del partido y C¨¹neyt ?akir omiti¨® pitar penalti por mano de Marcelo en su ¨¢rea. Heynckes, sin embargo, no quiso hacer hincapi¨¦ en este episodio cuando, ya eliminado, le preguntaron por el partido. De un negro riguroso ¡ªcamisa, corbata y chaqueta¡ª el viejo jefe practic¨® el autocontrol emocional y ensalz¨® a sus jugadores. ¡°Estamos muy decepcionados¡±, dijo; ¡°porque hemos hecho un partido sobresaliente. Jam¨¢s he visto al Bayern tan fuerte como hoy en el Bernab¨¦u. En general el partido ha sido una propaganda fenomenal para el f¨²tbol. Mi equipo tiene car¨¢cter ganador. Y, aunque nunca lo dije, nuestra lista de lesionados es grand¨ªsima. Apenas ten¨ªa recambios para el ataque. Como en la ida, creo que nos castigaron los errores individuales. A este nivel no te lo puedes permitir¡±.
El t¨¦cnico se refiri¨® al error de Tolisso, que en lugar de despejar opt¨® por ceder la pelota a su portero Ulreich, muy comprometido por la presencia de Benzema, que se lo rob¨®. ¡°Ha sido un regalo¡±, lament¨® Heynckes.
¡°El Madrid solo ha jugado a hacer contragolpes¡±, declar¨® el alem¨¢n, a modo de conclusi¨®n. ¡°Creo que nosotros hemos sido mejor equipo. Merecimos estar en la final¡±.
El Madrid tir¨® tres veces a puerta. El Bayern tir¨® diez. Veinte veces, si se consideran los remates totales, como el que tuvo Hummels, que cabece¨® desviado a la salida de un c¨®rner en los minutos de descuento.
¡°Una locura¡±
¡°Hemos estado muy cerca¡±, lament¨® el central internacional de Alemania. ¡°Fue un partido de locura. Si juegas como hemos jugado esta eliminatoria y creas todas estas oportunidades, debes estar en la final. El a?o pasado el Madrid hizo m¨¢s por pasar a la final que ahora. Lo m¨¢s lamentable es que nos quedemos fuera por dos errores puntuales¡±.
Hummels evoc¨® el golpe pret¨¦rito. El a?o pasado el Madrid y el Bayern se enfrentaron en los cuartos de final de la Champions. El equipo espa?ol se impuso en la ida y en la vuelta: 4-2 y 1-2. En ambas ocasiones, aliviado por la expulsi¨®n de un jugador rival. Javi Mart¨ªnez en M¨²nich y Vidal en Madrid.
Las expulsiones de 2017, muy rigurosas, brindaron elementos de queja a los expedicionarios b¨¢varos mientras abandonaban Madrid, previa celebraci¨®n de un banquete en el hotel Intercontinental de la Castellana. Esta vez, la comitiva se retir¨® m¨¢s aturdida aun. La sensaci¨®n de superioridad que experimentaron sobre el campo no acab¨® por traducirse en el marcador.
Alaba, como la mayor¨ªa de sus compa?eros, repiti¨® el mismo discurso melanc¨®lico que anticipa las vacaciones o el final de la temporada de competiciones de clubes. ¡°Estamos muy decepcionados por la eliminaci¨®n, lo hemos dado todo¡±, dijo Alaba, que, como tantos otros, se fue a la ducha llorando. ¡°Hemos merecido pasar a la final¡±.
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