La muerte s¨²bita frustra la primera final de Espa?a en un Mundial de hockey hierba
Irlanda se impone en el sexto ¡®shoot-out¡¯ con el que se dirimi¨® la semifinal y las espa?olas luchar¨¢n por el tercer puesto ante Australia
La fatalidad sobrecogi¨® a la selecci¨®n espa?ola femenina de hockey hierba en la semifinal del Mundial. Deb¨ªa y debe manejarse todav¨ªa en Londres ante el segundo reto m¨¢s importante de su historia, tras el oro ol¨ªmpico de Barcelona-92. La tensi¨®n fue extrema durante la extenuante y tensa lucha que mantuvo en esa semifinal con Irlanda, disputada en el Lee Valley Hockey & Tennis Centres. Las irlandesas, apoyadas mayoritariamente desde una grada con casi 10.000 espectadores, acabaron llev¨¢ndose el billete para la final en ¨²ltima instancia, gracias a un gol en la muerte s¨²bita.
El partido concluy¨® con empate a uno y la primera tanda de cinco shoot-outs, con empate a dos. El shoot-out es una suerte similar al cl¨¢sico penalti, con la sustancial diferencia de que la ejecutora puede encarar a la portera durante ocho segundos. Entr¨® en danza la ruleta extrema, la de la muerte s¨²bita, con otro shoot-out para cada equipo. En ese trance, el menor fallo era decisivo. Lanz¨® Gigi Oliva, pero la portera irlandesa Ayeisha McFerran le adivin¨® el movimiento y frustr¨® su remate, algo que no pudo hacer la portera espa?ola, excelente durante todo el partido, Mari ?ngeles Ruiz. La bati¨® Gillian Pinder en ese crucial shoot-out y zanj¨® el duelo. Antes, la propia Gigi Oliva y Lola Riera, con una tremenda sangre fr¨ªa y una vaselina sobre la portera irlandesa hab¨ªan anotado sus lanzamientos en la tanda de cinco shoot-outs que acab¨® con empate a dos.
La fatalidad se presagiaba ya antes de que comenzara esa primera ronda de penaltis. Algunas jugadoras espa?olas no pod¨ªan contener los nervios. Cristina Guinea lloraba, con una rodilla hincada en el suelo, mientras las cinco encargadas de lanzar los shoot-outs se preparaban. Guinea maldec¨ªa la acci¨®n en que, nada m¨¢s empezar el partido, le toc¨® la bola en el pie. Las irlandesas aprovecharon el lanzamiento de su primer penalti-c¨®rner para adelantarse con un gol de Anna O¡¯Flanagan. El equipo espa?ol reaccion¨® poco a poco, mejor¨® su juego y someti¨® a las irlandesas a una constante presi¨®n. Hasta que Alicia Magaz, la delantera del Club de Campo, obtuvo el empate en el minuto 39. Las irlandesas disfrutaron de hasta cinco penalti-c¨®rners; Espa?a, de ninguno.
Pero el desaf¨ªo espa?ol, en menor tono, contin¨²a en pie. Solo hab¨ªa llegado una vez a las semifinales de un Mundial. Fue en 2006, cuando se celebr¨® en el Club de Campo de Madrid. Entonces, la capitana Silvia Mu?oz, se rompi¨® el peron¨¦ en el partido previo a la semifinal. Y Espa?a cay¨® en la pr¨®rroga ante Australia por 1-0, con un gol de oro de Suzie Faulkner. Espa?a tambi¨¦n perdi¨® entonces el partido por la medalla de bronce ante Argentina. Ahora, en Londres, el desaf¨ªo de la selecci¨®n espa?ol es batir a Australia, que perdi¨® su semifinal ante Holanda por 3-1. Australia fue subcampeona en el Mundial de 2014, Cay¨® en la final ante Holanda, que, adem¨¢s de defender su t¨ªtulo es tambi¨¦n subcampeona ol¨ªmpica. Irlanda, al igual que Espa?a, no hab¨ªa alcanzado nunca una medalla en un Mundial. Su primer objetivo ya lo ha conseguido al derrotar a Espa?a. Su desaf¨ªo es may¨²sculo ante un equipo con el potencial de Holanda.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.