El Sevilla zurra al Madrid

Sin tiempo para brindar por el espanto del Bar?a en Legan¨¦s, el Real Madrid se llev¨® una zurra en toda regla. A un Sevilla plet¨®rico le bast¨® un primer periodo supremo para aniquilar a un Real destartalado. Hasta el remangue del segundo episodio, ya con 3-0, fue un equipo r¨ªgido y sin dictado colectivo o individual. Enfrente, un adversario que tuvo de todo: una zaga valiente y robusta, un medio campo creativo y solidario, y dos atacantes iluminados. Por encima del sobresaliente general de los de Nervi¨®n, dos futbolistas troncales y eternos, Navas y Banega, el v¨¦rtigo y la pausa de un Sevilla capaz de acelerar y frenar con su ponente siempre bloqueado. Ellos, el capit¨¢n y el argentino, fueron la banda sonora inicial de un equipo sintonizado, con rimas en todos los sectores.

Frente al simposio de Banega ¡ªen nada rebajado como pivote central ¨²nico¡ª, la marcha triunfal de Navas y la excelente predisposici¨®n para la intendencia de todos los sevillistas, el Madrid solo fue un conjunto perplejo. En el primer tiempo, ni palabra de nadie. Salvo de Bale, el ¨²nico con soltura, el ¨²nico al rescate con un disparo al poste izquierdo del checo Vaclik. Para entonces, el Real ya ca¨ªa por 2-0. Tambi¨¦n Bale se asom¨® en el ¨²ltimo segundo del primer cap¨ªtulo para rematar alto tras una pifia del portero local. Para entonces, el Real ya sucumb¨ªa por 3-0.

La azotaina del regimiento de Mach¨ªn comenz¨® a los 18 segundos, cuando Andr¨¦ Silva se plant¨® ante Courtois en duelo esgrimista resuelto por el belga. Por supuesto, el envite andaluz lleg¨® por el costado derecho, la v¨ªa por la que Jes¨²s Navas dej¨® a rebufo a Marcelo en m¨¢s de una ocasi¨®n. Por esa v¨ªa iba a toda mecha el Sevilla, por esa ruta se origin¨® un error de Marcelo que deriv¨® en birle de Sarabia a Casemiro, un aceler¨®n de Navas y la puntilla de Silva.

El Madrid, con una alineaci¨®n titular¨ªsima ¡ªsalvo el relevo de Nacho por el lesionado Carvajal¡ª, no ten¨ªa dictado. Un repertorio de pases parabrisas, tal que un equipo de balonmano. Ni media le conced¨ªa el Sevilla, blindado por tres centrales que no titubeaban al dejar la zona para acogotar a sus rivales. Cada madridista se sent¨ªa anudado por un contrario, por varios en muchas oportunidades. Seco el Madrid, tieso desde lo colectivo, sin nadie que no fuera Bale capaz de improvisar. Sin pisadas de Asensio, sin medio foco para Benzema, con Modric m¨¢s pendiente de abrochar a Banega que de ser Modric.

La racha de Ben Yedder

Tan expansivo resultaba el Sevilla, que de un c¨®rner en contra produjo el segundo gol. Navas, c¨®mo no, arranc¨® con el turbo desde el balc¨®n de su ¨¢rea. Ben Yedder le cit¨® un pase a la carrera que le dej¨® cara a cara con Courtois. El rechace del belga lo emboc¨® Andr¨¦ Silva, que ya lleva seis goles en LaLiga. Un goleador tan cl¨ªnico, tan preciso como Ben Yedder. ?l fue el autor del 3-0 en los morros de Courtois, quieto como una estalactita ante el remate del franc¨¦s. Seis goles en seis d¨ªas ha anotado el galo. Catorce el Sevilla en menos de una semana.

Iluminados los hispalenses, que tuvieron el cuarto gol en un estacazo del Mudo V¨¢zquez al larguero, al Madrid solo le quedaba descamisarse en el segundo periodo. Un do de pecho que no lleg¨®, pese a su mayor empe?o, pese a su mayor volumen. Modric pudo darle vidilla, pero su estupendo gol, al hilo de una fant¨¢stica asistencia de Asensio ¡ªsu ¨²nica huella¡ª fue condenado con justicia por el VAR. El croata ten¨ªa un juanete en fuera de juego.

Lesi¨®n de Marcelo

Al mayor impulso visitante respondi¨® un Sevilla m¨¢s macizo en su campo que fluido en el per¨ªmetro de Courtois. Como si hubiera decidido que la faena, casi resuelta en un primer tramo para rebobinar, requer¨ªa temple, el toreo de gente como Banega y el Mudo V¨¢zquez. Lo contrario de lo que precisaba el Madrid, agitado por Lopetegui con Lucas y Mariano por Nacho y el invisible Benzema. Vaclik le cerr¨® la puerta a Bale en un pulso entre ambos. Y el propio gal¨¦s evit¨® otra diana local. En el golpe a golpe tras el descanso no encontr¨® consuelo el Real, m¨¢xime cuando perdi¨® a Marcelo por lesi¨®n poco despu¨¦s de que Modric diera el testigo a Ceballos y Lopetegui se quedara sin cambios. La contienda estaba finiquitada desde que el Sevilla lo bordara en un primer tiempo que se le hizo alpino al Madrid.

Con Nervi¨®n atizando la caldera se cerr¨® una noche tan festiva para el Sevilla como para el Atl¨¦tico, ya de camino al derbi de Chamart¨ªn con solo dos puntos de retraso. Y todo tras un d¨ªa tan inopinado: Bar?a y Madrid no perd¨ªan en una misma jornada desde la 17? del curso 2014-2015. ?Jaque al bipartidismo?