El Madrid se esconde detr¨¢s de Casemiro
Solari da la titularidad a Isco y el Legan¨¦s se impone por juego y ocasiones ante la brava resistencia del volante brasile?o
El Real Madrid sucumbi¨® a otro viaje a los confines meridionales de la ciudad pero logr¨® pasar la eliminatoria escondido detr¨¢s de las piernas de Casemiro. Tap¨®n de todas las filtraciones de su defensa, definitivamente recuperado de la lesi¨®n que le retir¨® de Bala¨ªdos, el mediocentro brasile?o tir¨® de oficio y puso el sello distintivo de ferocidad que le caracteriza para procurar que su equipo sobreviva al paso por Legan¨¦s. A su alrededor se estabiliz¨® el Madrid despu¨¦s de una primera parte de agon¨ªa. El pase a cuartos de la Copa no oculta el panorama oscuro de diez derrotas en 32 partidos esta temporada. Como dijo el propio Casemiro camino de la ducha: ¡°No estamos bien, hay que ser sinceros¡±.
Legan¨¦s, 1 - Real Madrid, 0
Legan¨¦s: Cu¨¦llar; Juanfran, Bustinza (En-Nesyri, m. 70), Omeruo, Siovas, Kravets (Silva, m. 75); Eraso, Recio, Gumbau (Arn¨¢iz, m. 63); Merino, Braithwaite. No utilizados: Tejero, Nyom, Tar¨ªn, Vesga.
Real Madrid: Navas; Odriozola, Varane, Nacho, Reguil¨®n (Ceballos, m. 46); Valverde, Casemiro; Lucas (Brahim, m. 86), Isco (Cristo, m. 68), Marcelo; Vinicius. No utilizados: Zidane, Carvajal, Grau, J. S¨¢nchez.
Gol: 1-0. M. 30. Braithwaite.
?rbitro: Mart¨ªnez Munuera. Amonest¨® a Recio, Vinicius, Casemiro y Ceballos. VAR: Jaime Latre.
Butarque, 9.437 espectadores.
Isco jug¨® de titular por tercera vez con Solari y el resultado fue igual de decepcionante. Por detr¨¢s de Vinicius, el malague?o ejerci¨® de segunda punta. Con una estructura de apoyos que le asist¨ªa, se supon¨ªa que se trataba de la organizaci¨®n m¨¢s favorable a sus condiciones. Sin embargo, no consigui¨® entrar en juego apenas y cuando lo hizo eligi¨® mal. Si el Madrid atacaba, en lugar de desmarcarse hacia adelante, en donde es m¨¢s da?ino, bajaba al mediocampo a recibir la pelota por delante de sus marcadores, facilitando las coberturas a Recio. Si el Madrid se defend¨ªa, se quedaba descolgado desentendi¨¦ndose de labores ingratas del quite. El vagabundeo de Isco reflej¨® muchos de los problemas de su equipo, incapaz de manejar la pelota y sometido a las sencillas rutinas de cambios de orientaci¨®n y centros de un rival muy limitado en la elaboraci¨®n.
El gol del Legan¨¦s merode¨® el ¨¢rea de Keylor. Lo tuvo Kravets y control¨® mal, lo tuvo Braithwaite y remat¨® en falso, lo tuvo Merino y se le fue desviado. Las gradas se revolv¨ªan. El Madrid se congelaba. Segu¨ªa tieso. Como en el Villamar¨ªn, el equipo se mostr¨® obediente pero r¨ªgido. Replegado bajo el caparaz¨®n de la defensa amontonada, con energ¨ªa pero no demasiada, con oficio pero sin creatividad ni conexi¨®n. Al cuarto barullo en el ¨¢rea de Keylor el Legan¨¦s no perdon¨®.
La secuencia que desemboc¨® en el 1-0, pasada la media hora, describe la clase de partido que se vio en Butarque. Hubo un c¨®rner favorable al Legan¨¦s. La pelota qued¨® muerta. Vinicius se la llev¨® y lanz¨® el contragolpe. Pas¨® a Casemiro y el mediocentro galop¨® y meti¨® el ¨²ltimo pase. Recibi¨® Isco, solo ante Pichu Cu¨¦llar. La muchedumbre se resign¨® al finiquito. Pero Cu¨¦llar despej¨® y Valverde, que ven¨ªa desde atr¨¢s, remat¨® a las manos del arquero. Fue el primer disparo de los visitantes. Al minuto siguiente el bal¨®n estaba en el interior de la porter¨ªa de Keylor.
Hasta tres veces ganaron los jugadores del Legan¨¦s una pelota dividida en el ¨¢rea madridista en la avalancha que precedi¨® al gol. Ante la perplejidad de la defensa, m¨¢s agrupada que agresiva, Braithwaite dispar¨® dos veces en el ¨¢rea chica. El Madrid no reaccion¨® hasta que no sali¨® del descanso y Solari no hizo la reforma. Quitar a Reguil¨®n y devolver a Marcelo al lateral para dar entrada a Ceballos implic¨® mucho m¨¢s que un cambio de esquema. Tuvo efecto domin¨®. En el medio, Ceballos incorpor¨® dosis de control del bal¨®n y de ingenio para buscar la ruptura. Arriba, oblig¨® a Isco a quedarse como falso nueve mientras que Vinicius recuperaba su espacio natural pegado a la banda izquierda. Recobrada cierta armon¨ªa entre los visitantes, las acciones del Legan¨¦s perdieron sustancia o se espaciaron en el tiempo. Al menos hasta los minutos finales. Hasta que Merino se dej¨® llevar por la emoci¨®n de un contragolpe y defini¨® por encima del larguero con Keylor medio vencido.
El partido se desmadej¨® cuando quedaban diez minutos. Sin nada que perder, los dos equipos se implicaron en jugadas de riesgo. Vinicius dispuso de un par de ocasiones. Apur¨® el tiro con una rosca que fren¨® Cu¨¦llar y en la siguiente acci¨®n sirvi¨® a Brahim. El ¨²ltimo fichaje de Florentino P¨¦rez se top¨® con el palo mientras, en el otro extremo del campo, Braithwaite dispar¨® tres veces contra Keylor, que se las sac¨® todas. Hasta 11 veces par¨® el costarricense. Mala se?al para el Madrid que acab¨® la noche bajo la ovaci¨®n que la hinchada le dedic¨® al Legan¨¦s, ganador sin m¨¢s premio que el reconocimiento popular.
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