El VAR y Vinicius alivian al Madrid

Jug¨® el Ajax, gan¨® el Madrid. Un soplo del VAR que traer¨¢ cola ¡ªun gol que pareci¨® gol, anulado al cuadro local con 0-0¡ª, la jovialidad de Vinicius y una resurrecci¨®n final de Asensio aliviaron a un Real que pas¨® gran parte de la noche contra las cuerdas. Un campe¨®n sometido durante una hora por un rival que redujo al Madrid al papel de inesperado resistente. El chasco fue may¨²sculo para un Ajax expansivo y vigoroso.

El exigente Johan Cruyff se hubiera sentido jubiloso con esta nueva veta del Ajax, un grupo de jovenzuelos con aire de haber salido de p¨ªcnic adolescente que capitanea un chico de 19 a?os, De Ligt. Entre todos enchironaron a un Real Madrid desnortado, abatido por la frescura de su adversario, un equipo descamisado, transgresor. Tan audaz con la pelota como sin ella, sin tiritona alguna a la hora de birlar el bal¨®n a su oponente en campo ajeno. Frente a un rival tan vivificante, el campe¨®n fue un equipo raso. Incapaz hasta el final de encontrar una ruta de evacuaci¨®n en un duelo propicio para el contragolpe, para el turbo de Vinicius y Bale. Pero el grupo madridista se vio esposado, sin apa?o con el bal¨®n, encapsulado por los cadetes del Ajax.

Ante el acoso holand¨¦s nadie advirti¨® c¨®mo tutelar el juego. El Madrid no contaba tres pases seguidos. Empe?ados los suyos en trastear con la pelota al pie con parsimonia, los robos del Ajax se sucedieron. Y eso que no se trata ¡ªnunca lo fue en su fascinante historia¡ª de un conjunto con colmillo. Lo suyo es la plasticidad, el despliegue a toda mecha con ese 4-3-3, un formato que el club ha metabolizado hasta los huesos desde hace 50 a?os. A lo largo de su vida han pesado tanto los extremos que nadie se extra?a de que aliste a tres velocistas como Neres, Ziyech y Tadic y prescinda de un ariete convencional. As¨ª dispuso a su equipo Ten Hag. Y as¨ª sac¨® la cadena al Madrid una y otra vez, con Tadic de agitador y Sch?ne de baliza ante el papel m¨¢s templado del ya azulgrana De Jong. A sus virtudes sum¨® este Ajax un ardor desconocido. Fue m¨¢s que un equipo pinturero.

Aun cuando el choque no hab¨ªa enfocado alguna parada de Courtois, las alertas en su per¨ªmetro eran constantes. El Ajax se quedaba en la sala de espera del gol por un escobazo crucial de Casemiro, una interrupci¨®n vital de Nacho, otras cuantas de Sergio Ramos... Solo un aceler¨®n de Vinicius le sirvi¨® de sacudida al Madrid. El disparo del brasile?o lo desvi¨® el poco ortodoxo Onana. La jugada sirvi¨® de sonajero para el equipo espa?ol. Un respiro. Pero solo un respiro, porque el Ajax cogi¨® otra bocanada y vuelta a la carga. Incluso a Modric se le anudaban los pies en un Madrid sin hilo con Benzema, que suele ser el mejor sedante posible cuando se trata de embridar los partidos. Frente a un Ajax que llegaba aturdido por los ¨²ltimos tropezones en su poco pujante liga dom¨¦stica, resulta que el Madrid se vio m¨¢s intimidado que en sus recientes peajes por el Camp Nou y el Metropolitano.

Mazraoiu fue el primero en poner en jaque al Real, pero su disparo se fue cruzado por un palmo. Le sigui¨® Tadic, con un remate al poste derecho de Courtois. Y el meta belga se luci¨® con los pies ante Ziyech. Sin monsergas, el Ajax atornill¨® al Madrid en su trinchera hasta que lleg¨® la gran trama de la noche. De Ligt gan¨® por el aire un c¨®rner, Courtois se hizo un l¨ªo con el bal¨®n y Tagliafico le hizo pagar el error. Solo aparentemente. El juez de VAR era el polaco Marciniak, que, en principio estaba designado como ¨¢rbitro de campo. Un trueque a ¨²ltima hora hizo que el esloveno Skormina dejara las pantallas y cogiera el silbato. Nadie hab¨ªa sospechado ni por asomo que algo flagrante (como dicta la doctrina) hubiera sucedido. Skormina vio la tele a pie de c¨¦sped y decret¨® que Tadic, en fuera de juego posicional, hab¨ªa bloqueado a Courtois. Ni Courtois hab¨ªa reclamado nada.

Una nueva sociedad

Con el susto, pero bendecido por este repentino empe?o arbitral en enredarse de mala manera con el VAR, el Madrid pudo encarar el duelo tras el intermedio sin otro lamento que su inopinada inferioridad del primer tramo. No remiti¨® el Ajax, pero el segundo rel¨¢mpago de Vinicius fue terminal para el cuadro de ?msterdam. El brasile?o no especula. La porter¨ªa contraria es su indisimulado destino en cada jugada. Desde el costado izquierdo arranc¨® hacia el ¨¢rea, dej¨® en la cuneta a tres rivales y cit¨® a Benzema con el gol. Lo del galo y el brasile?o comienza a ser una sociedad cotizada.

El gol rebaj¨® algo al Ajax hasta que Ziyech encontr¨® la red tras un quite previo en medio campo que pill¨® desajustados a los madridistas, que reclamaron falta en el origen de la jugada. Solari movi¨® el cesto y con Lucas encontr¨® el equilibrio que no hab¨ªa tenido el Madrid con Bale. Y no solo eso. Con Lucas, se agigant¨® Carvajal, un jabato. Tambi¨¦n irrumpi¨® el mejor Asensio en muchos meses. Uno y otro articularon el tanto final. Carvajal abri¨® gas por su costado y su centr¨® lo emboc¨® Asensio.

Tambi¨¦n hubo protesta, esta vez por una presunta falta de Lucas a De Jong. Pero ya hac¨ªa tiempo que el ¨¢rbitro pasaba de todo. Salvo de amonestar a Sergio Ramos, que tras cumplir 600 partidos con el Madrid se perder¨¢ la vuelta por sanci¨®n. Y a tenor de la ida, pese al marcador, quiz¨¢ a¨²n haya vuelta.