Caster Semenya y c¨®mo se define a una mujer

El Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) tiene ante s¨ª un caso que desborda, por una vez, el mundo peque?o del deporte hasta lindar casi los terrenos de la filosof¨ªa. La decisi¨®n que tome despu¨¦s de la vista que desde el lunes hasta el viernes pr¨®ximos llevar¨¢ a cabo en su sede de Lausana tendr¨¢ una repercusi¨®n evidente sobre la forma en que la sociedad ha fijado y regulado los g¨¦neros: qu¨¦ caracter¨ªsticas biol¨®gicas debe tener una persona para ser considerada mujer.

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La IAAF no quiere que Caster Semenya sea como es

Semenya, debate envenenado

La sudafricana Caster Semenya, de 28 a?os, es triple campeona mundial y doble campeona ol¨ªmpica de 800m. Es la atleta imbatible. La federaci¨®n internacional de atletismo (IAAF) dice que la raz¨®n de su superioridad radica no solo en su gran talento y capacidad atl¨¦tica sino tambi¨¦n en que naci¨® con test¨ªculos y por eso produce tanta testosterona como los hombres, lo que le proporciona m¨¢s hemoglobina, que se traduce en mayor resistencia y una musculatura m¨¢s fuerte, igual a mayor velocidad. Corre con ventaja sobre las mujeres que tienen un desarrollo sexual considerado normal. Y para evitar esa desigualdad, dice la IAAF, esa especie de dopaje end¨®geno, lo mejor es imponer una regla: Semenya, y las que como ella produzcan m¨¢s testosterona de lo normal en las mujeres (el llamado grupo DSD: des¨®rdenes de desarrollo sexual), deber¨¢n tomar estr¨®genos para reducir la producci¨®n end¨®gena de testosterona a niveles llamados femeninos. O lo que es lo mismo, deber¨¢ tomar sustancias para empeorar su rendimiento, en una especie de contradoping.

La atleta, por supuesto, est¨¢ en contra de la simplificaci¨®n a la que los argumentos de la IAAF reducen su caso y el de otras atletas. Su primera raz¨®n es cient¨ªfica: no est¨¢ tan demostrado lo que la IAAF considera como palabra de dios. Una mayor producci¨®n end¨®gena de testosterona no equivale autom¨¢ticamente a mayor fuerza y mayor vigor. No toda la testosterona tiene la acci¨®n anabolizante que proclama la federaci¨®n bas¨¢ndose en un estudio que gran parte de la propia comunidad cient¨ªfica ha rechazado. No es lo mismo tomar testosterona para doparse que producir testosterona.

Una categor¨ªa intermedia

Incluso Naciones Unidas ha solicitado a la IAAF que no imponga la norma de la reducci¨®n de testosterona a las mujeres que quieran participar en pruebas de hasta 1.500m y lanzamientos.

La segunda raz¨®n de Semenya tiene un calado que supera el debate sobre la imposible igualdad de condiciones a la que se aspira en las competiciones deportivas. ?Si ya se ha aceptado globalmente que el g¨¦nero y el llamado sexo biol¨®gico no tienen por qu¨¦ coincidir siempre, por qu¨¦ se empe?a la IAAF en seguir r¨ªgidamente una noci¨®n que la sociedad ya ha superado? Y m¨¢s a¨²n, ?por qu¨¦ tiene que da?ar su cuerpo, ir contra su propia naturaleza, para poder competir con las atletas de su g¨¦nero?

Con esos argumentos, Semenya recurri¨® ante el TAS en junio pasado la decisi¨®n de la IAAF de imponer la regulaci¨®n a las mujeres con excesiva producci¨®n de testosterona.

Para solucionar el problema, algunos expertos han propugnado incluso la creaci¨®n de una tercera categor¨ªa, indeterminada, junto a la masculina y la femenina en las que se dividen las competiciones de atletismo. ¡°La se?ora Semenya es incuestionablemente una mujer. Es una hero¨ªna e inspiraci¨®n para muchos en todo el mundo¡±, expres¨® este viernes su bufete de abogados.