Localizados sin vida los cuerpos de los dos alpinistas desaparecidos en el monte Nanga Parbat
El espa?ol Alex Txikon y su equipo han encontrado en Pakist¨¢n a Tom Ballard y Daniele Nardi, en b¨²squeda desde hac¨ªa d¨ªas
La forma m¨¢s directa y l¨®gica de escalar el Nanga Parbat desde su vertiente Diamir pasa por una ruta que tiene nombre, el espol¨®n Mummery, pero ninguna ascensi¨®n. Tampoco lo lograron Tom Ballard y Daniele Nardi, cuyos cuerpos sin vida fueron avistados este s¨¢bado a una altura de unos 5.900 metros, en dicho espol¨®n. Si nadie ha podido escalar dicha ruta, lo cierto es que dos personas la recorrieron en 1970¡ pero solo como una forma desesperada de descenso: Reinhold Messner y su hermano Gunther hab¨ªan alcanzado la cima desde la vertiente Rupal, pero incapaces de descender por donde hab¨ªan subido, decidieron lanzarse a la desesperada por la vertiente opuesta.
With great sadness I inform that the search for ?? @NardiDaniele and ?? Tom Ballard is over as @AlexTxikon and the search team have confirmed that the silhouettes spotted on Mummery at about 5900 meters are those of Daniele and Tom. R.I.P. #NangaParbat pic.twitter.com/vBmsRKJgKC
— Stefano Pontecorvo (@pontecorvoste) March 9, 2019
Foto made with a telescope by ?@AlexTxikon? and his team on the #NangaParbat. @NardiDaniele is on the center left (orange vest) Tom Ballard at the center (blu vest) and their tent is visible next to Tom. Foto property of ?@AlexTxikon?. pic.twitter.com/TvOSYwbS2L
— Stefano Pontecorvo (@pontecorvoste) March 9, 2019
Simone Moro, el alpinista que atesora cuatro primeras invernales en ochomiles ¡ªShisha Pangma (2005), Makalu (2009 y 2011) y Nanga Parbat (2016, junto a Ali Sapdara y Alex Txik¨®n)¡ª convers¨® en su d¨ªa con Reinhold Messner sobre aquel episodio: ¡°Me dijo que sab¨ªan que el descenso directo por el espol¨®n Mummery era sencillo t¨¦cnicamente, pero peligros¨ªsimo. Tambi¨¦n me dijo que estaban muertos, as¨ª que volver a morir no ser¨ªa mucho peor". Reinhold sobrevivi¨®, pero su hermano Gunther desapareci¨®, sepultado por un alud justo en la zona donde desaparecieron el pasado 24 de febrero Ballard y Nardi. El embajador de Italia en Pakist¨¢n, Stefano Pontecorvo, as¨ª como la familia de Daniele Nardi, dieron por concluidas las labores de rescate agradeciendo especialmente el trabajo de Alex Txikon y su equipo.
Uno de los escasos entretenimientos en el campo base del Nanga Parbat pasa por sentarse frente al espol¨®n Mummery y esperar a que caiga un alud. ¡°A veces caen tres al d¨ªa¡±, aclara Simone Moro en conversaci¨®n telef¨®nica desde su residencia en Bolzano, quien recuerda que ¡°todos los alpinistas saben que escoger esa ruta es como jugar a la ruleta rusa, una forma de suicidio¡±. Toda la parte inferior de la v¨ªa queda barrida por los aludes de nieve, muchas veces provocados por la rotura de seracs (masas de hielo) que se desprenden del glaciar superior. No hay escapatoria posible.
Obviamente, tanto Tom Ballard como Daniele Nardi estaban al corriente del compromiso extremo que asum¨ªan en dicha ruta y m¨¢s a¨²n en invierno, cuando las nevadas son copiosas. De hecho, ambos se quedaron solos cuando su compa?ero de expedici¨®n, el paquistan¨ª Karim Hayat, se retir¨® al poco de arrancar la marcha. ¡°Lo que dijo al llegar a casa", explica Moro, "fue que prefer¨ªa perder su sueldo antes que perder la vida¡±. Entonces, ?por qu¨¦ siguieron con el plan establecido los dos alpinistas dados ya oficialmente por fallecidos? Todos los alpinistas de ¨¦lite asumen tarde o temprano riesgos que escapan a su control, se exponen a peligrosos objetivos, en un cara o cruz que coloca su actividad un pelda?o por encima de lo que se conoce como simple deporte.
"No han tenido mala suerte"
Ballard y Nardi pretend¨ªan pasar por la parte inferior del espol¨®n lo m¨¢s r¨¢pido posible y situarse a una altura vecina de los 7.000 metros, en el plateau superior, fuera de peligro. Es el cl¨¢sico juego del gato y del rat¨®n. Confiaban en su suerte. No la tuvieron. Simone Moro va m¨¢s all¨¢ en su an¨¢lisis: ¡°No por ser alpinista tengo que dar la raz¨®n a los alpinistas. En mi opini¨®n, esa ruta es impracticable y nadie, y menos los j¨®venes del futuro, deber¨ªa tratar de escalarla. Estoy muy triste por Tom y por Daniele, pero hay que sacar conclusiones. Daniele llevaba a?os persiguiendo el Nanga Parbat invernal, pero ya se ha escalado dos veces (en 2016 y en 2018) as¨ª que la ¨²nica opci¨®n que pod¨ªa conceder reconocimiento a Nardi era abrir una nueva v¨ªa y en invierno. Eso le ceg¨® y convenci¨® a Tom porque necesitaba alguien de nivel a su lado. Nardi era un buen alpinista, como muchos, no uno excepcional, y a veces hay que saber escoger los retos cuando se busca cierta forma de notoriedad. Todos buscamos notoriedad, no es nada malo, pero hay que saber hasta d¨®nde se puede llegar¡±, analiza Moro.
Simone, autor tambi¨¦n en 2003 de una nueva ruta al Nanga Parbat junto a Jean-Christophe Lafaille, aclara que lo m¨¢s sencillo en su caso pasaba por callarse para ahorrarse un alud de voces cr¨ªticas que le se?alan por su aparente falta de sensibilidad. ¡°Quiero que quede claro que comparto el dolor de los familiares de Ballard y Nardi pero, cuando leo o escucho que han tenido mala suerte, tengo algo que decir al respecto: no han tenido mala suerte: estaban a sabiendas en un lugar muy, muy peligroso¡±.
De hecho, casi todos los accidentes en monta?a tienen que ver no con la mala fortuna, sino con la toma equivocada de decisiones o con los errores t¨¦cnicos y t¨¢cticos. Un alud no distingue entre un alpinista de ¨¦lite y otro modesto. Los accidentes tienen que ver con errores humanos, fallos que todo alpinista trata de soslayar mediante entrenamiento, conocimiento del medio y de sus limitaciones, combinaci¨®n de factores que conviven dif¨ªcilmente con la ambici¨®n.
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