El ¡®efecto VAR¡¯ en la Liga: m¨¢s penaltis, menos protestas y fueras de juego

A?o I del VAR. La revoluci¨®n tecnol¨®gica ha sacudido el f¨²tbol espa?ol. A su paso queda la evidencia de que algo sustancial ha cambiado en el juego. No solo esos parones en los que a veces caen los partidos mientras el ¨¢rbitro se aprieta el pinganillo en la oreja y escucha a sus colegas de Las Rozas. No solo esos gritos de gol ahogados porque el gran hermano ha anulado un tanto. La presencia invisible del VAR ha alterado el comportamiento de jugadores, aficionados y ¨¢rbitros. Esta Liga que acaba de bajar la persiana es, por ejemplo, la que ha registrado menos fueras de juego (4,54 por partido) desde que hay registros, en la temporada 2005-2006, seg¨²n Opta. Es uno de los efectos de la orden que tienen los colegiados de dejar jugar y no se?alar la posible infracci¨®n salvo que sea muy clara, ya que en el caso de gol ser¨¢ revisada en v¨ªdeo. Hay colch¨®n.

El ojo que todo lo ve tambi¨¦n ha provocado que sea la temporada con m¨¢s penaltis (130 en total, 0,34 por encuentro) desde hace 10 a?os (el curso 2008-2009). Hasta 37 penas m¨¢ximas han sido se?aladas gracias a la intervenci¨®n del videoarbitraje, una ayuda tecnol¨®gica que hoy permite ver con detalle todas esas jugadas dentro del ¨¢rea que, por su rapidez y por la concentraci¨®n de jugadores, pueden pasar desapercibidas para el colegiado a pie de campo. Seg¨²n el Comit¨¦ T¨¦cnico de ?rbitros (CTA), el curso pasado hubo 69 errores en la se?alizaci¨®n de un penalti, de los que el VAR corrigi¨® 44 y se mantuvo el fallo humano en 25. Es decir, que el VAR permiti¨® pasar de un acierto del 91,5% en estas acciones a un 96,9%. ¡°En todas las ligas con la tecnolog¨ªa suben los penaltis, es l¨®gico. En el Mundial se pas¨® de 15 en la edici¨®n anterior a 29 en Rusia¡±, explica Carlos Velasco Carballo, que este jueves cumple un a?o en la presidencia del Comit¨¦.

El n¨²mero de faltas (27,1 por encuentro) es el m¨¢s bajo al menos desde 2006, y solo el curso pasado se mostraron menos tarjetas amarillas (4,89 por cita) y rojas (0,21), producto de que los futbolistas se sienten m¨¢s vigilados: siete expulsiones directas fueron dictaminadas a trav¨¦s del monitor. Especialmente significativa es la reducci¨®n en el n¨²mero de amonestaciones por protestar, un 17% menos que la temporada pasada, y por simular, un 68% menos y solo seis amarillas por este motivo en esta ¨²ltima Liga.

¡°El VAR ha funcionado extraordinariamente bien¡±, afirma Velasco Carballo sobre la gran apuesta de su mandato. El Comit¨¦ ha celebrado 15 seminarios este ejercicio, por los cuatro del curso anterior, con los ¨¢rbitros, ha analizado casi 2.800 clips de v¨ªdeo y ha aumentado los filtros de evaluaci¨®n. Cada actuaci¨®n arbitral es analizada en un informe por un delegado, en otro por el CTA y en un tercero por el propio colegiado, que ha de ver su partido en las 48 horas siguientes y rellenar un formulario en el que se autoeval¨²a. El trabajo para los colegiados se ha multiplicado: de 19 partidos de media hace un a?o, con dos descansos al mes, a 36 este curso, con solo dos parones al a?o. Los colegiados retirados, como Undiano Mallenco, podr¨¢n seguir a los mandos de la consola.

Hay un antes y un despu¨¦s del VAR. La tecnolog¨ªa ha participado en 60 goles este curso, y se han contado 121 intervenciones directas, una cada 3,14 partidos, un porcentaje similar al del Mundial (3,20). De esas, en 112 el ¨¢rbitro hizo caso a su colega al otro lado del pinganillo, y en 66 acudi¨® a ver el monitor en la banda.

¡°Ha sido una gran ayuda. No es casualidad que la Liga haya estado tan ajustada, en los puestos de arriba y en los de abajo¡±, explica Paco L¨®pez, entrenador del Levante. ¡°Ha habido m¨¢s justicia que sin esta herramienta, pero tambi¨¦n se han cometido errores. Hay un margen de mejora importante¡±, a?ade. ¡°Se ve que en los partidos hay menos protestas¡±, se suma Asier Garitano, nuevo t¨¦cnico del Alav¨¦s, ¡°queda adaptarse mejor. Lo importante es que los criterios sean iguales para todos. La misma jugada a veces se revisa y otras no. Eso hay que mejorarlo, y tambi¨¦n agilizar las decisiones. En el f¨²tbol no estamos acostumbrados a que se pare tanto¡±.

Velasco Carballo recoge esta unificaci¨®n de criterios como una de las cosas a cambiar ¡ª¡°es nuestra obsesi¨®n, pero la realidad dice que no siempre sancionamos de la misma manera¡±¡ª, junto a las valoraciones del juego brusco grave y a esa necesidad de acortar la toma de decisiones. El tiempo medio invertido por revisi¨®n ha sido de 83 segundos, de 129 cuando se ha recurrido a la pantalla. Los partidos se han alargado, y de ah¨ª que los goles marcados a partir del minuto 90 se hayan disparado: 22 m¨¢s (67 por 45) que la temporada pasada. El tiempo efectivo de juego, sin embargo, ha disminuido: de 54m 18s a 53m 8s.

¡°Se ha de decidir m¨¢s r¨¢pido¡±, pide tambi¨¦n Jos¨¦ Luis Mendilibar, entrenador del Eibar. ¡°No podemos estar dos minutos y medio esperando despu¨¦s de cantar un gol a ver si te lo dan, y luego en otras jugadas no sabemos ni por qu¨¦ se para. Algo hay que hacer. Todos pensaban que el VAR iba a ser el no va m¨¢s y que nos iba a salvar y de eso nada. La pol¨¦mica sigue¡±.