Las 40 expediciones del Albacete para enamorar una provincia
La nueva directiva llega al club y en menos de dos a?os lo coloca a un paso del ascenso a LaLiga Santander con una pol¨ªtica basada en recuperar la confianza de la afici¨®n
A la ciudad de esta historia se la conoce como la del doble llanto. ¡°Lloras cuando llegas y cuando te vas¡±, repite m¨¢s de uno en los pasillos de la ciudad deportiva Andr¨¦s Iniesta, la del Albacete Balompi¨¦. El club est¨¢ formado por profesionales de todas partes de Espa?a que memorizaron el dicho para contrarrestar otros refranes menos generosos con la capital manchega. En 2017, un grupo inversor compr¨® el equipo tras su ascenso a LaLiga 1|2|3. Encabez¨® un proyecto deportivo que, tan solo dos temporadas despu¨¦s, acaba de meter al Alba, 14? en presupuesto, en los playoffs que definir¨¢n el tercer nuevo integrante de la LaLiga Santander [jugar¨¢ las semifinales contra el RCD Mallorca]. Adem¨¢s, ha conseguido volver a llenar su estadio tras una novedosa campa?a de captaci¨®n de aficionados con jugadores viajando a los puntos m¨¢s rec¨®nditos de la provincia.
La nueva directiva entendi¨® al llegar que ten¨ªa que volver a enamorar a la afici¨®n del club. V¨ªctor Varela, malague?o y consejero delegado del conjunto manchego desde hace dos temporadas, resume aquellas primeras sensaciones: ¡°Necesit¨¢bamos difundir nuestro mensaje y nuestra labor, por un lado, y quer¨ªamos tambi¨¦n que el Albacete volviera a ser un referente social de la regi¨®n¡±. Varela organiz¨® de la mano de las pe?as expediciones con la gente del club para conquistar los pueblos de toda la provincia cual h¨¦roes cervantinos.
El consejero delegado plante¨® una campa?a llamada ¡°Locura por el Alba¡±, que en los ¨²ltimos 15 meses ha sumado visitas a unos 40 pueblos de las provincias de Albacete y de Cuenca. Rafa L¨®pez, presidente de la federaci¨®n de pe?as del club, recuerda el caso que m¨¢s le ¡°choc¨®¡±. ¡°Habl¨¦ a la directiva de una pe?a en Nerpio, que quedaba a m¨¢s de dos horas de la ciudad¡±, dice. Varela no se asust¨®. Al contrario. ¡°Si ellos bajan al menos una vez al Carlos Belmonte, nosotros tenemos que ir hacia all¨ª¡±, le contest¨® el m¨¢ximo responsable del d¨ªa a d¨ªa del equipo manchego. Nerpio es un pueblo de la Sierra del Segura cuya poblaci¨®n apenas supera los 1.200 habitantes. ¡°Puedo invitar a la gente a que venga a mi estadio, pero eso carece de valor a?adido¡±, reflexiona Varela. A cada visita acuden un jugador y una jugadora de los primeros equipos y los acompa?a un periodista que explica a la gente la historia y los valores del club ¡°para acercarlo a toda la sociedad¡±.
Este a?o el club marc¨® un r¨¦cord con 9.082 abonos e increment¨® un 41% la asistencia al estadio. Al principio de temporada, colocaron ocho lonas en las gradas para disimular los huecos que las ausencias podr¨ªan dejar en un recinto para 15.000 espectadores. A medida que avanzaba la temporada tuvieron que ir retir¨¢ndolas. Y en el partido contra el Granada CF, el 20 de mayo, colgaron el cartel de aforo completo. Las pe?as, encabezadas por Rafa L¨®pez, se sumaron a la lucha de la directiva para crear abonados. ¡°De nada sirve que los aficionados est¨¦n en las pe?as si no ayudan al equipo¡±, dice L¨®pez. Los viajes cervantinos dieron sus frutos y se crearon cinco pe?as nuevas. Una de ellas, en Elche de la Sierra, a punto de inaugurarse, re¨²ne a varios pueblos de la sierra de Segura, que bajan cada fin de semana al Carlos Belmonte, a Albacete, que tiene casi 200.000 habitantes.
La ciudad del doble llanto, tiene tambi¨¦n dos caras. En el centro a¨²n quedan algunos locales de Kodak y varios bares setenteros aut¨¦nticos, de esos que los j¨®venes modernos llamar¨ªan vintage y que todo el mundo intenta imitar sin ¨¦xito. Por esas calles, las del Altozano, cerca de una estatua en honor a los cuchilleros de la ciudad, aparece a las cuatro y media de la tarde Valeriano Belmonte, uno de los aficionados m¨ªticos del Alba, camino al cementerio para limpiar las l¨¢pidas de familiares y amigos. Lo hace todas las tardes, puntual, desde las cinco hasta que se apague el sol. Belmonte, dibujante y poeta de 75 a?os, recita versos a las puertas del Carlos Belmonte para animar a los aficionados antes de cada encuentro.
¡°Dibujaba y hac¨ªa unos versitos sobre los resultados del equipo en el peri¨®dico La Verdad¡±, cuenta. Ese diario, cuyo nombre pintado en la pared de la ciudad deportiva resguarda todav¨ªa un puesto de estacionamiento al lado de La Tribuna (el otro peri¨®dico local), cerr¨® en enero de 2017. ¡°No paso al campo porque sufro mucho, pero si llegamos a la final voy a ir, aunque es muy dif¨ªcil¡±, afirma el viejo Belmonte, a quien su padre polic¨ªa col¨® por primera vez en 1951 en el Parque de los M¨¢rtires, estadio del Albacete Balompi¨¦ hasta 1960. A¨²n recuerda ¡°a Porro, a Nicanor y a Juanito Rodr¨ªguez [jugadores ic¨®nicos de la historia el Alba]¡±. En la plantilla actual no queda ning¨²n albacete?o, pero el poeta guarda especial cari?o por el portero y capit¨¢n Tomeu Nadal: ¡°Es el mejor¡±.
Nadal y el defensa ?lvaro Arroyo son los ¨²nicos supervivientes del ascenso a LaLiga 1|2|3 en 2017. El portero es uno de los ¨ªdolos de la afici¨®n y quien m¨¢s participa de las expediciones por la regi¨®n. En La Gineta, otro pueblo de 1.200 personas a 20 kil¨®metros de Albacete, lo invitaron a ser pregonero de las fiestas. ¡°Cuando vas a estos pueblos, ves que hay gente que cree en el equipo. Vale la pena ir a todos lados, la gente est¨¢ muy enganchada¡±, dice Nadal, manacor¨ª de 30 a?os, que pas¨® por el RCD Mallorca, el Getafe CF y el N¨¢stic de Tarragona.
Paula Sancho Pauleta, jugadora del club, tambi¨¦n particip¨® de la gira: ¡°Los ni?os se ponen muy contentos cuando vamos¡±, dice la futbolista, que lleg¨® a principios de temporada del Valencia F¨¦minas CF. ¡°Me encontr¨¦ con un club muy familiar, todo el mundo te saluda, te ayudan. Todo est¨¢ muy unido¡±, destaca. ¡°Es como en la ciudad, todo est¨¢ cerca¡±.
¡°Nosotros queremos transmitir lo mismo que encontramos en esta ciudad, cercan¨ªa y humildad¡±, afirma Nadal. Los familiares y amigos que vinieron a visitarlo alucinaron con ¡°la vida¡± de Albacete. ¡°El centro est¨¢ lleno todos los d¨ªas¡±, cuenta. Y un empleado del club recuerda aquella primera semana en la que lo invitaron a tomar algo un s¨¢bado a las cinco de la tarde y al mover la cortina del sal¨®n del bar se encontr¨® con ¡°un enorme fiest¨®n¡±.
En la d¨¦cada de los 90, el equipo estuvo en la m¨¢xima categor¨ªa, entrenado por Benito Floro y se gan¨® el apodo de El Queso Mec¨¢nico. La fiesta, que a punto estuvo de ser europea, a las puertas de la clasificaci¨®n a la Europa League, termin¨® en 1996. ¡°Nadie nos lo quitar¨¢¡±, dice Daniel Navarro, presidente de la pe?a Quijote Blanco, la m¨¢s numerosa con m¨¢s de 100 miembros, creada en el segundo descenso a LaLiga 1|2|3 en 2005.
En El C¨®rner, la cafeter¨ªa de la ciudad deportiva Andr¨¦s Iniesta, antes y despu¨¦s de un entrenamiento cualquiera, los aficionados pueden encontrar al entrenador, Luis Miguel Ramis; al consejero delegado o al capit¨¢n del equipo junto al personal de mantenimiento. ¡°Nos hemos juntado gente de distintos sitios, que dejamos nuestros lugares para intentar crecer aqu¨ª¡±, dice Nadal. ¡°Y lo estamos logrando¡±, agrega.
¡°El ¨¦xito para nosotros es avanzar cada d¨ªa¡±, afirma Varela, a quien el due?o del grupo Skyline, el empresario venezolano-liban¨¦s Georges David Kabchi, le encarg¨® la b¨²squeda de un club para invertir en el f¨²tbol espa?ol. El primero que miraron fue el Albacete porque era capital de provincia, ten¨ªa historia, hab¨ªa jugado en la m¨¢xima categor¨ªa, ten¨ªa margen de crecimiento e instalaciones para la cantera. El descenso a Segunda B fren¨® las negociaciones, pero la vuelta a LaLiga 1|2|3 del conjunto manchego sentenci¨® la historia. ¡°No sab¨ªamos bien qui¨¦n ven¨ªa¡±, recuerda L¨®pez, un comercial inmobiliario de 35 a?os, presidente de la federaci¨®n de pe?as hace casi cuatro temporadas. Se encarg¨® de investigar, se puso en contacto con gente del M¨¢laga, donde Varela hab¨ªa trabajado como director de comunicaci¨®n. ¡°Se han ganado nuestra confianza haciendo cosas¡±, asegura.
A los viajes para conquistar la regi¨®n, el nuevo grupo inversor le sum¨® realidades. ¡°Entend¨ªamos el escepticismo de la gente¡±, confiesa Varela. ¡°Ven¨ªamos de fuera, nadie conoc¨ªa el proyecto¡±, reflexiona. Por eso una de las primeras medidas de la directiva, adem¨¢s de fortalecer el v¨ªnculo con las pe?as, esencia de todo club, fue comunicar los cien primeros hitos de su gesti¨®n. En el documento aparecen cosas como cambiar las redes rotas de la ciudad deportiva o limpiar las telara?as del pabell¨®n hasta la creaci¨®n de una cantera femenina o de un departamento de seguridad.
N¨¦stor Susaeta, centrocampista de 34 a?os, lleva m¨¢s de 16 a?os entre equipos de Segunda B y de LaLiga 1|2|3. ¡°La gente que ha venido a gestionar el club ha sabido hacer los cambios sin volverse locos, con sensatez y humildad¡±, analiza. ¡°El p¨²blico y nosotros nos contagiamos de ese sentimiento de humildad¡±, agrega Susaeta. ¡°No ganamos ning¨²n partido 5-0, no tenemos el 70% de la posesi¨®n, ni somos tan buenos para hacerlo. ?Ni vamos a serlo!¡±, admite.
L¨®pez, el jefe de las pe?as, destaca la fidelidad de la afici¨®n del Albacete y su hospitalidad. ¡°Nos gusta recibir a gente de fuera, hacerlos sentir como en casa¡±, dice. Y en el club, repleto de forasteros, responden con creces. A Susaeta le hace ilusi¨®n escuchar constantemente la palabra ¡°gracias¡±. ¡°Todos me lo repiten por la ciudad¡±, dice. ¡°Gracias por lo que est¨¢is haciendo, gracias por hacernos so?ar, gracias¡¯, me gritan. Y que te den las gracias por hacer tu trabajo es algo m¨¢gico¡±, concluye.