Sangre, sudor y goles del Deportivo

El Deportivo se acerca a Primera Divisi¨®n tras marcar dos goles que dejan al Mallorca en una posici¨®n precaria de cara al partido de vuelta el pr¨®ximo domingo. El primer acto de la final del play-off de ascenso fue todo lo intenso que se preve¨ªa, tambi¨¦n doloroso por una severa lesi¨®n sufrida por ?lex Berganti?os, que se fue con la boca destrozada tras un involuntario, pero alevoso, choque con Pedraza. La jugada marc¨® el partido porque el Mallorca tuvo que jugar toda la segunda parte en inferioridad num¨¦rica.

Sangre, sudor y goles puso el Deportivo, al que le pas¨® contra el M¨¢laga y le volvi¨® a suceder contra el Mallorca: le cost¨® entrar en el partido porque le buscan arriba y le encuentran, le incomodan la salida de bal¨®n y de alguna manera le apagan la luz. Sucede que tras diez meses de traj¨ªn los cuerpos no est¨¢n para grandes alardes, as¨ª que en cuanto el rival baj¨® el tono de la persecuci¨®n empezaron a aparecer los espacios, por m¨¢s que el Mallorca tuviese claro que, si fallaba el primer plan, el segundo consist¨ªa en un intensivo repliegue. Pero avis¨® de inicio, sin un ritmo alto con bal¨®n, pero con una cierta ambici¨®n que, con todo, no apag¨® Riazor, con el aspecto y la animaci¨®n de sus mejores veladas.

El Deportivo entr¨® en el partido al cuarto de hora, con un remate de Carlos Fern¨¢ndez tras centro de Fede Cartabia. Al argentino se le esperaba desde hace meses. Ha llegado en el momento justo. Ante el Mallorca trabaj¨® la espalda de Estupi?an, al que se le aguardaba con el percutor, pero tuvo que aplicarse en restar, siempre nervioso y alterado. Por el flanco zurdo del Mallorca supo entrar el Deportivo, por all¨ª gener¨® tambi¨¦n la acci¨®n que vali¨® una falta que Cartabia coloc¨® en la escuadra. Un gol de bandera para un partido plagado de tensi¨®n, pero tambi¨¦n de nobleza, y que puso a la parroquia el coraz¨®n en un pu?o cuando en un tackle, una disputa a ras de suelo, en la que Pedraza lleg¨® m¨¢s tarde que ?lex Berganti?os al bal¨®n y empotr¨® los tacos de su bota contra el capit¨¢n deportivista.

Berganti?os se fue al hospital con un serio destrozo en el rostro, y el mediocentro mallorquinista a la caseta, asustado y compungido tras un lance tan fortuito como peligroso. Para entonces el central Somma hab¨ªa pedido papas, lesionado, as¨ª que el Deportivo tuvo que gastar dos cambios antes del intermedio en futbolistas de car¨¢cter defensivo.

Peor estaba el Mallorca con uno menos. Pero hay mucho que rascar para superar al combo que ha armado Vicente Moreno. Se qued¨® sin dictado en el partido, sin la posibilidad de gestionar la pelota durante largo tiempo, pero jam¨¢s dej¨® de asomarse. Mira siempre hacia delante el admirable equipo mallorqu¨ªn, que a¨²n as¨ª se encontr¨® con una manta m¨¢s corta de lo habitual, se cerr¨® por dentro, concedi¨® las bandas y desde ah¨ª busc¨® el Deportivo el segundo gol. Lo encontr¨® en una chilena de Quique Gonz¨¢lez, que se pase¨® sobre la l¨ªnea de meta y que ante la ausencia de videoarbitraje se valid¨® de manera artesanal, a ojo de buen linier. Con algo m¨¢s de diez minutos por jugar el Deportivo evit¨® riesgos, guard¨® la pelota y el tesoro.